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Lección 9 – “GUÁRDENSE DE TODA AVARICIA” – Para el 4 de marzo de 2023

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LECCIONES FUTURAS DE ESCUELA SABÁTICA

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2023

Mayordomía El Mensaje de los Tres Ángeles Efesios Norma Cultural y Mente Misionera de Personajes Bíblicos*

2024

Salmos El Gran Conflicto Marcos Juan

2025

Amor y Justicia en la Biblia Como Estudiar la Profecía y la Inspiración Éxodo Como Permanecer en Relación con Dios

2026

Colosenses – Filipenses Religión en el Mercado** Josué El Espíritu de Profecía

2027

1 & 2 de Corintios Mayordomía Eclesiología Ezequiel

2028

* Bible Characters as Counter Cultural and Mission Minded

** Religion in the Market Place


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Lección 9: Para el 4 de marzo de 2023

“GUÁRDENSE DE TODA AVARICIA”

Sábado 25 de febrero______________________________________________________

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Isaías 14:12–14; Efesios 5:5; Josué 7; Juan 12:1–8; Hechos 5:1–11; 1 Corintios 10:13.

PARA MEMORIZAR:

 “Y les dijo: ‘¡Cuidado! Guárdense de toda avaricia, porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee’ ” (Luc. 12:15).

La codicia se define como un deseo desmesurado de riquezas o posesiones que en realidad no nos pertenecen. La codicia es un gran problema, tanto que, por cierto, está al mismo nivel que no mentir, no robar, no asesinar; es tan dañina que Dios decidió advertir sobre ella en su gran Ley Moral. “No codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la esposa de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo” (Éxo. 20:17).

La codicia, o avaricia, a menudo figura junto a los pecados atroces que nos impedirán la entrada al Reino de Dios. “¿No saben que los injustos no heredarán el reino de Dios? No yerren, que ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores heredarán el reino de Dios” (1 Cor. 6:9, 10).

¿La codicia, a la altura de la extorsión, la idolatría, la fornicación y el adulterio? Eso es lo que dicen los versículos, y esta semana veremos ejemplos de su pecaminosidad y lo que podemos hacer para superarla.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Debemos dar a Dios todo el corazón, o no se realizará el cambio que se ha de efectuar en nosotros, por el cual hemos de ser transformados conforme a la semejanza divina. Por naturaleza estamos enemistados con Dios. El Espíritu Santo describe nuestra condición en palabras como estas: «Muertos en las transgresiones y los pecados», (Efesios 2: 1), «la cabeza toda está ya enferma, el corazón todo desfallecido», «no queda ya en él cosa sana». Isaías 1:5, 6. Nos sujetan firmemente los lazos de Satanás, «por el cual» hemos «sido apresados, para hacer su voluntad». 2 Timoteo 2:26. Dios quiere sanarnos y libertarnos. Pero como esto exige una transformación completa y la renovación de toda nuestra naturaleza, debemos entregarnos a él completamente.

La guerra contra nosotros mismos es la batalla más grande que jamás se haya reñido. El rendirse a sí mismo, entregando todo a la voluntad de Dios, requiere una lucha; mas para que el alma sea renovada en santidad, debe someterse antes a Dios…

[Dios] nos presenta la gloriosa altura a la cual quiere elevarnos mediante su gracia. Nos invita a entregarnos a él para que pueda cumplir su voluntad en nosotros. A nosotros nos toca decidir si queremos ser libres de la esclavitud del pecado para compartir la libertad gloriosa de los hijos de Dios (El camino a Cristo, pp. 43, 44).

Depended plenamente de Dios. Si obráis de otro modo, conviene que os detengáis. Deteneos donde estáis, y cambiad el orden de las cosas… Clamad a Dios con sinceridad, con hambre en el alma. Luchad con los instrumentos celestiales hasta que obtengáis la victoria. Poned todo vuestro ser en las manos del Señor, alma, cuerpo y espíritu, y resolved convertiros en su instrumento amante y consagrado, impulsado por su voluntad, dominado por su mente, saturado de su Espíritu… Entonces veréis claramente las cosas celestiales.

Si permitiéramos que nuestras mentes se espacian más en Cristo y el mundo celestial, encontraríamos un poderoso estímulo y apoyo al pelear las batallas del Señor. El orgullo y el amor al mundo perderán su poder cuando contemplamos las glorias de esa tierra mejor que tan pronto será nuestro hogar. Comparadas con la hermosura de Cristo todas las atracciones terrenales parecerán de poco valor (Mente, carácter y personalidad, t. 1, pp. 89, 69).

La benevolencia constante y abnegada es el remedio de Dios para los pecados ulcerosos del egoísmo y la codicia. Dios ha dispuesto que la benevolencia sistemática sostenga su causa y alivie las necesidades de los sufrientes y menesterosos. Ha ordenado que la dadivosidad se convierta en un hábito que puede contrarrestar el pecado peligroso y engañoso de la codicia. Dar continuamente da muerte a la codicia. La benevolencia sistemática está concebida en el plan de Dios para arrancarle los tesoros al codicioso tan pronto como son ganados y consagrarlos al Señor, a quien le pertenecen…

La práctica constante del plan de Dios de la benevolencia sistemática debilita la codicia y fortalece la benevolencia. Si las riquezas aumentan, los hombres, aun los que profesan piedad, colocan sus corazones en ellas; y cuanto más tienen, menos dan a la tesorería del Señor. Así las riquezas hacen egoístas a los hombres y su acumulación alimenta la codicia; y estos males se fortalecen mediante el ejercicio activo. Dios conoce nuestro peligro y nos ha protegido contra él con medios que previenen nuestra propia ruina (Testimonios para la iglesia, t. 3, p. 601).


Domingo 26 de febrero__________________________________________________

¿EL PECADO ORIGINAL DEFINITIVO?

A menudo se plantea la cuestión, y es comprensible, acerca de cómo surgió el pecado en el Universo de Dios. Entendemos cómo, por lo menos en parte. Y en esencia, fue por codicia. Por ende, quizá la codicia sea el pecado original definitivo.

Lee Isaías 14:12 al 14. ¿Qué pistas se dan allí sobre la caída de Lucifer? ¿Qué papel crucial jugó la codicia en esa caída?

Isaías 14:12-14

12 ¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones. 13 Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; 14 sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo.

“Descontento con su posición, y a pesar de ser el ángel que recibía más honores entre las huestes celestiales, se aventuró a codiciar el homenaje que solo debe darse al Creador. En vez de procurar el ensalzamiento de Dios como supremo en el afecto y la lealtad de todos los seres creados, trató de obtener para sí mismo el servicio y la lealtad de ellos. Y, codiciando la gloria con que el Padre infinito había investido a su Hijo, este príncipe de los ángeles aspiraba al poder que solo era un privilegio de Cristo” (PP 13, 14).

Lee Efesios 5:5; y Colosenses 3:5. ¿Con qué equipara Pablo la codicia, y por qué?

Efesios 5:5

Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios.

Colosenses 3:5

Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría;

Es fascinante notar que dos veces Pablo compara la codicia con la idolatría. La gente practica la idolatría cuando adora, es decir, dedica su vida a algo que no es Dios, algo creado en vez de al Creador (Rom. 1:25). Codiciar, entonces, ¿podría ser desear algo que no deberíamos tener, y desearlo tanto que nuestro deseo por ello (antes que por el Señor) se convierta en el centro de nuestro corazón?

Indudablemente, al principio Lucifer no sabía a dónde lo llevarían sus deseos equivocados. Lo mismo puede ocurrir con nosotros. El mandamiento contra la codicia, el único Mandamiento que se ocupa únicamente de los pensamientos, puede evitar que realicemos actos que también lleven a la violación de otros Mandamientos. (Ver, por ejemplo, 2 Sam. 11.)

Lee 1 Timoteo 6:6 y 7. Centrarnos en lo que Pablo escribe aquí, ¿cómo puede ayudarnos a protegernos de la codicia?

1 Timoteo 6:6-7

Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento; porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Mientras todos los seres creados reconocieron la lealtad del amor, hubo perfecta armonía en el universo de Dios. Cumplir los designios de su Creador era el gozo de las huestes celestiales. Se deleitaban en reflejar la gloria del Todopoderoso y en alabarle. Y su amor mutuo fue fiel y desinteresado mientras el amor de Dios fue supremo. No había nota discordante que perturbara las armonías celestiales. Pero se produjo un cambio en ese estado de felicidad.

Poco a poco Lucifer llegó a albergar el deseo de ensalzarse. Las Escrituras dicen: «Enaltecióse tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa de tu resplandor». Ezequiel 28:17. «Tú que decías en tu corazón: Junto a las estrellas de Dios ensalzaré mi solio… y seré semejante al Altísimo». Isaías 14: 13, 14. Aunque toda su gloria procedía de Dios, este poderoso ángel llegó a considerarla como perteneciente a sí mismo. Descontento con el puesto que ocupaba, a pesar de ser el ángel que recibía más honores entre las huestes celestiales, se aventuró a codiciar el homenaje que solo debe darse al Creador. En vez de procurar el ensalzamiento de Dios como supremo en el afecto y la lealtad de todos los seres creados, trató de obtener para sí mismo el servicio y la lealtad de ellos. Y codiciando la gloria con que el Padre infinito había investido a su Hijo, este príncipe de los ángeles aspiraba al poder que solo pertenecía a Cristo (Historia de los patriarcas y profetas, pp. 13, 14).

Muchos que pretenden creer en Dios lo niegan con sus obras. Su adoración del dinero, las casas y los terrenos los señalan como idólatras y apóstatas. Todo egoísmo es codicia, y por lo tanto es idolatría. Muchos que han hecho inscribir sus nombres en los libros de la iglesia como creyentes en Dios y en la Biblia, están adorando los bienes que el Señor les ha confiado para que ellos fuesen sus administradores. No se inclinan literalmente ante su riqueza terrenal, pero esta de todos modos es su dios. Son adoradores de Mamón. Honran las cosas de este mundo con un homenaje que pertenece al Creador. El que ve y conoce todas las cosas registra la falsedad de su profesión de piedad.

Dios queda excluido del templo del alma de un cristiano mundano, a fin de que la política mundanal tenga abundante lugar. El dinero es su dios. Pertenece a Jehová, pero aquel a quien ha sido confiado rehúsa dejarlo fluir en términos de obras de benevolencia. Si lo hubiese utilizado de acuerdo con el propósito de Dios, el incienso de sus buenas obras habría ascendido al cielo, y de miles de almas convertidas se habrían oído los himnos de alabanza y agradecimiento (Consejos sobre mayordomía cristiana, p. 235).

La religión pura proporciona paz, felicidad, contento; la piedad es provechosa para esta vida y la vida venidera.

Esa inquietud y descontento que termina en enojo y queja es pecaminosa; pero el descontento con uno mismo que induce a un esfuerzo más ferviente para lograr un aprovechamiento de la mente, para alcanzar un campo más amplio de utilidad es digno de alabanza. Este descontento no termina en disgusto, sino en la reunión de fuerza para alcanzar un campo más extenso y elevado de utilidad. Estad siempre equilibrados únicamente por un principio religioso firme y una conciencia sensible, teniendo siempre el temor de Dios ante vosotros, y ciertamente prosperaréis en vuestra preparación para una vida de utilidad (Nuestra elevada vocación, p. 244).


Lunes 27 de febrero____________________________________________________

UN ANATEMA EN EL CAMPAMENTO

Podría decirse que fue uno de los momentos más grandiosos en la historia de Israel. Después de cuarenta años de vagar por el desierto, finalmente estaban entrando en la Tierra Prometida. Mediante un milagro impresionante, los hijos de Israel cruzaron el río Jordán por tierra firme en la época en que este se inundaba. Esta travesía por tierra firme fue tan impresionante que el corazón de los reyes paganos de Canaán se derritió y no tuvieron ánimo para pelear (Jos. 5:1).

El primer desafío real en la conquista de Canaán fue la ciudad amurallada y fortificada de Jericó. Nadie sabía qué hacer para derrotar a los habitantes de Jericó, ni siquiera Josué. En respuesta a la oración de Josué, Dios le reveló el plan para la destrucción de la ciudad, el cual siguieron. Pero luego de esa victoria las cosas tomaron un giro decididamente malo.

Lee Josué 7. ¿Qué sucedió después de la poderosa victoria en Jericó y qué mensaje debemos extraer de esta historia para nosotros?

Josué 7

1 Pero los hijos de Israel cometieron una prevaricación en cuanto al anatema; porque Acán hijo de Carmi, hijo de Zabdi, hijo de Zera, de la tribu de Judá, tomó del anatema; y la ira de Jehová se encendió contra los hijos de Israel. Después Josué envió hombres desde Jericó a Hai, que estaba junto a Bet-avén hacia el oriente de Bet-el; y les habló diciendo: Subid y reconoced la tierra. Y ellos subieron y reconocieron a Hai. Y volviendo a Josué, le dijeron: No suba todo el pueblo, sino suban como dos mil o tres mil hombres, y tomarán a Hai; no fatigues a todo el pueblo yendo allí, porque son pocos. Y subieron allá del pueblo como tres mil hombres, los cuales huyeron delante de los de Hai. Y los de Hai mataron de ellos a unos treinta y seis hombres, y los siguieron desde la puerta hasta Sebarim, y los derrotaron en la bajada; por lo cual el corazón del pueblo desfalleció y vino a ser como agua. Entonces Josué rompió sus vestidos, y se postró en tierra sobre su rostro delante del arca de Jehová hasta caer la tarde, él y los ancianos de Israel; y echaron polvo sobre sus cabezas. Y Josué dijo: ¡Ah, Señor Jehová! ¿Por qué hiciste pasar a este pueblo el Jordán, para entregarnos en las manos de los amorreos, para que nos destruyan? ¡Ojalá nos hubiéramos quedado al otro lado del Jordán! ¡Ay, Señor! ¿qué diré, ya que Israel ha vuelto la espalda delante de sus enemigos? Porque los cananeos y todos los moradores de la tierra oirán, y nos rodearán, y borrarán nuestro nombre de sobre la tierra; y entonces, ¿qué harás tú a tu grande nombre? 10 Y Jehová dijo a Josué: Levántate; ¿por qué te postras así sobre tu rostro? 11 Israel ha pecado, y aun han quebrantado mi pacto que yo les mandé; y también han tomado del anatema, y hasta han hurtado, han mentido, y aun lo han guardado entre sus enseres. 12 Por esto los hijos de Israel no podrán hacer frente a sus enemigos, sino que delante de sus enemigos volverán la espalda, por cuanto han venido a ser anatema; ni estaré más con vosotros, si no destruyereis el anatema de en medio de vosotros. 13 Levántate, santifica al pueblo, y di: Santificaos para mañana; porque Jehová el Dios de Israel dice así: Anatema hay en medio de ti, Israel; no podrás hacer frente a tus enemigos, hasta que hayáis quitado el anatema de en medio de vosotros. 14 Os acercaréis, pues, mañana por vuestras tribus; y la tribu que Jehová tomare, se acercará por sus familias; y la familia que Jehová tomare, se acercará por sus casas; y la casa que Jehová tomare, se acercará por los varones; 15 y el que fuere sorprendido en el anatema, será quemado, él y todo lo que tiene, por cuanto ha quebrantado el pacto de Jehová, y ha cometido maldad en Israel. 16 Josué, pues, levantándose de mañana, hizo acercar a Israel por sus tribus; y fue tomada la tribu de Judá. 17 Y haciendo acercar a la tribu de Judá, fue tomada la familia de los de Zera; y haciendo luego acercar a la familia de los de Zera por los varones, fue tomado Zabdi. 18 Hizo acercar su casa por los varones, y fue tomado Acán hijo de Carmi, hijo de Zabdi, hijo de Zera, de la tribu de Judá. 19 Entonces Josué dijo a Acán: Hijo mío, da gloria a Jehová el Dios de Israel, y dale alabanza, y declárame ahora lo que has hecho; no me lo encubras. 20 Y Acán respondió a Josué diciendo: Verdaderamente yo he pecado contra Jehová el Dios de Israel, y así y así he hecho. 21 Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello. 22 Josué entonces envió mensajeros, los cuales fueron corriendo a la tienda; y he aquí estaba escondido en su tienda, y el dinero debajo de ello. 23 Y tomándolo de en medio de la tienda, lo trajeron a Josué y a todos los hijos de Israel, y lo pusieron delante de Jehová. 24 Entonces Josué, y todo Israel con él, tomaron a Acán hijo de Zera, el dinero, el manto, el lingote de oro, sus hijos, sus hijas, sus bueyes, sus asnos, sus ovejas, su tienda y todo cuanto tenía, y lo llevaron todo al valle de Acor. 25 Y le dijo Josué: ¿Por qué nos has turbado? Túrbete Jehová en este día. Y todos los israelitas los apedrearon, y los quemaron después de apedrearlos. 26 Y levantaron sobre él un gran montón de piedras, que permanece hasta hoy. Y Jehová se volvió del ardor de su ira. Y por esto aquel lugar se llama el Valle de Acor, hasta hoy.

Una vez confrontado, Acán admitió lo que hizo, diciendo que había “codiciado” esos bienes. La palabra hebrea traducida allí como “codicié”, chmd, se utiliza en algunos lugares de la Biblia en un sentido muy positivo. La misma raíz aparece en Daniel 9:23, por ejemplo, cuando Gabriel le dijo a Daniel que era un hombre “muy amado”.

Sin embargo, en este caso, este chmd era una mala noticia. A pesar de la clara orden de no saquear para sí de las ciudades capturadas (Jos. 6:18, 19), Acán hizo exactamente eso, y desprestigió a toda la nación. De hecho, después de la derrota de Hai, Josué temía que “los cananeos y todos los moradores de la tierra oirán, y nos rodearán, y borrarán nuestro nombre de sobre la tierra; y entonces, ¿qué harás tú a tu grande nombre?” (Jos. 7:9). En otras palabras, el Señor quería utilizar estas grandes victorias como una manera de hacer saber a las naciones vecinas de su poder y su obra entre su propio pueblo. Sus conquistas iban a ser (de una manera diferente) un testimonio para las naciones del poder de Jehová. Por supuesto, después del fiasco de Hai, además de las pérdidas humanas, ese testimonio se había visto comprometido.

Piensa en la facilidad con la que Acán podría haber justificado sus acciones: “Bueno, es una cantidad tan pequeña en comparación con todo el resto del botín. Nadie lo sabrá, y ¿qué mal puede causar? Además, mi familia necesita el dinero”. ¿Cómo podemos protegernos de este tipo de racionalización peligrosa?

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Para establecer su culpabilidad en forma indisputable, que no dejase motivo alguno para pensar que se lo había condenado injustamente, Josué exhortó solemnemente a Acán para que reconociera la verdad. El miserable culpable hizo una confesión completa de su falta: «Verdaderamente yo he pecado contra Jehová el Dios de Israel… Vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos; lo cual codicié, y tomé: y he aquí que está escondido debajo de tierra en el medio de mi tienda»…

Entre los millones de Israel, solo hubo un hombre que, en aquella hora solemne de triunfo y castigo, osó violar el mandamiento de Dios. La vista de aquel costoso manto babilónico despertó la codicia de Acán; y aun frente a la muerte que por su causa arrostraba, lo llamó «manto babilónico muy bueno». Un pecado le había llevado a cometer otro, y se adueñó del oro y la plata dedicados al tesoro del Señor; le robó a Dios parte de las primicias de la tierra de Canaán (Historia de los patriarcas y profetas, pp. 528-530).

El que considera las cosas terrenales como el mayor bien, el que dedica su vida al esfuerzo de obtener riquezas mundanales, ciertamente está haciendo una pobre inversión. Cuando sea demasiado tarde verá que aquello en que confía se desmorona en el polvo. Solo mediante la abnegación, mediante el sacrificio de las riquezas terrenales, se pueden obtener las riquezas eternas. El cristiano entra en el’ reino de los cielos por medio de mucha tribulación. Constantemente debe librar la buena batalla, y no deponer sus armas hasta que Cristo le dé reposo. Solo al dar a Jesús todo lo que tiene puede asegurarse la herencia que durará por toda la eternidad (Cada día con Dios, p. 150).

Esto ocasionó la ruina de los judíos y será la ruina de muchas almas en nuestros tiempos. Miles están cometiendo el mismo error que los fariseos a quienes Cristo reprendió en el festín de Mateo. Antes que renunciar a alguna idea que les es cara, o descartar algún ídolo de su opinión, muchos rechazan la verdad que desciende del Padre de las luces. Confían en sí mismos y dependen de su propia sabiduría, y no comprenden su pobreza espiritual. Insisten en ser salvos de alguna manera por la cual puedan realizar alguna obra importante. Cuando ven que no pueden entretejer el yo en esa obra, rechazan la salvación provista.

Una religión legal no puede nunca conducir las almas a Cristo, porque es una religión sin amor y sin Cristo. El ayuno o la oración motivada por un espíritu de justificación propia, es abominación a Dios. La solemne asamblea para adorar, la repetición de ceremonias religiosas, la humillación externa, el sacrificio imponente, proclaman que el que hace esas cosas se considera justo, con derecho al cielo, pero es todo un engaño. Nuestras propias obras no pueden nunca comprar la salvación…

El hombre debe despojarse de sí mismo antes que pueda ser, en el sentido más pleno, creyente en Jesús. Entonces el Señor puede hacer del hombre una nueva criatura. Los nuevos odres pueden contener el nuevo uno. El amor de Cristo animará al creyente con nueva vida. En aquel que mira al Autor y Consumador de nuestra fe, se manifestará el carácter de Cristo (El Deseado de todas las gentes, p. 246).


Martes 28 de febrero___________________________________________________

EL CORAZÓN DE JUDAS

Una de las historias más trágicas de la Biblia es la de Judas Iscariote. Este hombre tuvo un privilegio que solo han tenido otras once personas en toda la historia del mundo: haber estado con Jesús en persona todo ese tiempo y haber aprendido las verdades eternas directamente del Maestro. Qué triste es que muchos que nunca tuvieron nada ni remotamente parecido a las oportunidades que tuvo Judas se salvarán, mientras que ahora sabemos de Judas que está destinado a la destrucción eterna.

¿Qué sucedió? La respuesta la hallamos en una palabra: codicia, los deseos de su corazón.

Lee Juan 12:1 al 8. ¿Qué hizo María que llamó tanto la atención durante la fiesta? ¿Cómo reaccionó Judas? ¿Por qué? ¿Cuál fue la respuesta de Jesús?

Juan 12:1-8

1 Seis días antes de la pascua, vino Jesús a Betania, donde estaba Lázaro, el que había estado muerto, y a quien había resucitado de los muertos. Y le hicieron allí una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban sentados a la mesa con él. Entonces María tomó una libra de perfume de nardo puro, de mucho precio, y ungió los pies de Jesús, y los enjugó con sus cabellos; y la casa se llenó del olor del perfume. Y dijo uno de sus discípulos, Judas Iscariote hijo de Simón, el que le había de entregar: ¿Por qué no fue este perfume vendido por trescientos denarios, y dado a los pobres? Pero dijo esto, no porque se cuidara de los pobres, sino porque era ladrón, y teniendo la bolsa, sustraía de lo que se echaba en ella. Entonces Jesús dijo: Déjala; para el día de mi sepultura ha guardado esto. Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros, mas a mí no siempre me tendréis.

La amable reprensión del Salvador al comentario codicioso de Judas lo llevó a abandonar la fiesta e ir directamente al palacio del sumo sacerdote, donde estaban reunidos los enemigos de Jesús. Ofreció entregar a Jesús en sus manos por una suma mucho menor que el regalo de María. (Ver Mat. 26:14–16.)

¿Qué le pasó a Judas? Después de tener tantas oportunidades maravillosas, tantos privilegios excepcionales, ¿por qué haría algo tan malo? Según Elena de White, Judas “amó al gran Maestro y deseó estar con él. Sintió un deseo de ser transformado en su carácter y su vida, y quiso experimentarlo relacionándose con Jesús. El Salvador no rechazó a Judas. Le dio un lugar entre los Doce. Le confió realizar la obra de un evangelista. Lo dotó de poder para sanar a los enfermos y expulsar a los demonios. Pero Judas no llegó al punto de entregarse por entero a Cristo” (DTG 664).

Al fin y al cabo, todos tenemos defectos de carácter que, si nos rendimos, podremos superar mediante el poder de Dios que obra en nosotros. Pero Judas no se entregó completamente a Cristo, y el pecado de la avaricia, que podría haber vencido con el poder de Cristo, lo venció a él, con resultados trágicos.

¿Quién de nosotros no lucha contra la codicia por una cosa u otra? En este caso, lo que codiciaba era el dinero, y esa avaricia, un problema del corazón, lo llevó a robar (Juan 12:6), y finalmente lo llevó a traicionar a Jesús.

Qué terrible lección para todos nosotros sobre el peligro que puede ocasionar la codicia. Lo que parece una cosa pequeña, un simple deseo del corazón, puede llevar a la calamidad y a la pérdida eterna.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Judas poseía cualidades valiosas, pero en su carácter había algunos rasgos que debían ser extirpados antes que él pudiera salvarse. Debía nacer de nuevo, no de una semilla corruptible sino de una incorruptible. Su gran tendencia heredada y cultivada hacia el mal era la codicia. Y esta, mediante la práctica, se convirtió en un hábito que él hizo intervenir en todas sus transacciones…

Tuvo toda oportunidad posible de recibir a Cristo como su Salvador personal, pero rehusó este don. No quiso someter a Cristo sus métodos y su voluntad. No practicó lo que contrariaba sus inclinaciones personales, y por lo tanto su espíritu muy avariento no fue corregido. Mientras continuó siendo un discípulo exteriormente, y hasta en la presencia misma de Cristo, se apoderaba de los recursos que pertenecían a la tesorería del Señor…

Judas pudo haber recibido el beneficio de estas lecciones, si hubiera poseído el deseo de tener un corazón recto; pero su tendencia a adquirir lo venció, y el amor al dinero se convirtió en una fuerza predominante. Mediante la indulgencia permitió que este rasgo creciera en su carácter y arraigara profundamente, a tal punto que desplazó la buena semilla de la verdad sembrada en su corazón (Consejos sobre mayordomía cristiana, pp. 231, 232).

[El d]inero constituía una tentación continua para Judas, y de tiempo en tiempo, cuando hacía un pequeño servicio para Cristo o dedicaba un poco de tiempo a propósitos religiosos, se pagaba la sí mismo de los exiguos fondos recogidos para hacer avanzar la luz del evangelio. Finalmente se volvió tan avaro, que se quejó amargamente porque el ungüento derramado sobre la cabeza de Jesús era muy caro. Le dio vueltas al asunto una y otra vez, y calculó el dinero que podría haber sido colocado en sus manos para gastar, si ese ungüento hubiera sido vendido. Su egoísmo se fortaleció hasta que sintió que la tesorería había verdaderamente sufrido una gran pérdida al no recibir el valor del ungüento en dinero. Finalmente se quejó abiertamente de la extravagancia que significaba esta valiosa ofrenda para Cristo. Nuestro Salvador lo reprendió por su codicia. La reprensión irritó el corazón de Judas, hasta que, por una pequeña suma de dinero, consintió en traicionar a su Señor. Entre los guardadores del sábado habrá quienes en su corazón no son más fieles de lo que era Judas (Testimonios para la iglesia, t. 4, pp. 45, 46).

Si nos acercamos a Dios, nos aproximaremos unos a otros. No podemos aproximarnos a la misma cruz sin obtener unidad de espíritu. Cristo oró que sus discípulos fueran una sola cosa, así como él y el Padre son uno. Deberíamos buscar la unidad de espíritu y entendimiento. Deberíamos procurar la unidad para que Dios sea glorificado en nosotros, así como fue glorificado en el Hijo, y Dios nos amará como amó a su Hijo.

Dios os ama. No quiere atraeros para causaros daño; ¡0h, no! Desea consolaros, derramar sobre vosotros el aceité del gozo, sanar las heridas que os ha infligido el pecado, reparar lo que Satanás ha dañado. Desea daros el ropaje de la alabanza a cambio del espíritu de abatimiento (A fin de conocerle, p. 248).


Miércoles 1 de marzo___________________________________________________

ANANÍAS Y SAFIRA

Era una época emocionante para ser miembro de la iglesia. Después del gran derramamiento del Espíritu Santo en el día de Pentecostés, los apóstoles predicaban el evangelio con poder y miles se unían a la iglesia.

“Después de haber orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con valentía la palabra de Dios. La multitud de los que habían creído era de un corazón y un pensamiento. Y ninguno decía ser suyo nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común” (Hech. 4:31, 32).

Qué privilegio tuvieron Ananías y Safira de formar parte de la iglesia primitiva, verla crecer y ver la manifestación del Espíritu Santo de una manera tan marcada. “Ningún necesitado había entre ellos, porque todos los que poseían heredades, o casas, las vendían y traían el precio de la venta, y lo ponían a los pies de los apóstoles, y era repartido a cada uno según su necesidad” (Hech. 4:34, 35).

En este escenario, Ananías y Safira, obviamente impresionados por lo que estaba sucediendo, quisieron ser parte de ello y decidieron vender una propiedad y contribuir con las ganancias a la iglesia. Hasta aquí, todo bien…

Lee Hechos 5:1 al 11. ¿Qué crees que fue peor, retener parte del dinero o mentir al respecto? ¿Por qué un castigo tan duro?

Hechos 5:1-11

1 Pero cierto hombre llamado Ananías, con Safira su mujer, vendió una heredad, y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles. Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios. Al oír Ananías estas palabras, cayó y expiró. Y vino un gran temor sobre todos los que lo oyeron. Y levantándose los jóvenes, lo envolvieron, y sacándolo, lo sepultaron. Pasado un lapso como de tres horas, sucedió que entró su mujer, no sabiendo lo que había acontecido. Entonces Pedro le dijo: Dime, ¿vendisteis en tanto la heredad? Y ella dijo: Sí, en tanto. Y Pedro le dijo: ¿Por qué convinisteis en tentar al Espíritu del Señor? He aquí a la puerta los pies de los que han sepultado a tu marido, y te sacarán a ti. 10 Al instante ella cayó a los pies de él, y expiró; y cuando entraron los jóvenes, la hallaron muerta; y la sacaron, y la sepultaron junto a su marido. 11 Y vino gran temor sobre toda la iglesia, y sobre todos los que oyeron estas cosas.

Al principio, parecían sinceros en su deseo de dar para la obra. Sin embargo, “más tarde, Ananías y Safira agraviaron al Espíritu Santo cediendo a sentimientos de codicia. Empezaron a lamentar su promesa, y pronto perdieron la dulce influencia de la bendición que había encendido sus corazones con el deseo de hacer grandes cosas en favor de la causa de Cristo” (HAp 60). En otras palabras, aunque habían comenzado con la mejor de las motivaciones, su codicia finalmente hizo que mostraran una fachada y pretendieran ser lo que en realidad no eran.

“Y vino un gran temor sobre toda la iglesia, y sobre todos los que oyeron estas cosas” (Hech. 5:11). Después de este incidente, la gente seguramente tuvo más cuidado al devolver su diezmo. Pero este triste relato no se incluyó en la Biblia como una advertencia sobre la fidelidad en el diezmo. ¿Qué nos enseña? ¿A dónde puede conducirnos la codicia?

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Dios odia la hipocresía y la falsedad. Ananías y Safira practicaron el fraude en su trato con Dios; mintieron al Espíritu Santo, y su pecado fue castigado con un juicio rápido y terrible. Cuando Ananías vino con su ofrenda, Pedro le dijo: «Ananías, ¿por qué ha llenado Satanás tu corazón a que mintieses al Espíritu Santo, y defraudases del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu potestad? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios».

«Entonces Ananías, oyendo estas palabras, cayó y espiró. Y vino un gran temor sobre todos los que lo oyeron»…

La sabiduría infinita vio que esta manifestación señalada de la ira de Dios era necesaria para impedir que la joven iglesia se desmoralizara. El número de sus miembros aumentaba rápidamente. La iglesia se vería en peligro si, en el rápido aumento de conversos, se añadían hombres y mujeres que, mientras profesaban servir a Dios, adoraban a Mamón. Este castigo testificó que los hombres no pueden engañar a Dios, que él descubre el pecado oculto del corazón, y que no puede ser burlado. Estaba destinado a ser para la iglesia una advertencia que la indujese a evitar la falsedad y la hipocresía, y a precaverse contra el robar a Dios (Los hechos de los apóstoles, pp. 60, 61).

[H]ay algunos que son culpables del mismo pecado que cometieron Ananías y Safira, pues piensan que si retienen una porción de lo que Dios pide en el sistema del diezmo, los hermanos no lo sabrán nunca. Así pensaba la pareja culpable cuyo ejemplo se nos da como advertencia. En este caso Dios demostró que escudriña el corazón. No pueden ocultársele los motivos y propósitos del hombre. Dejó a los cristianos de todas las épocas una amonestación perpetua a precaverse del pecado al cual los corazones humanos están continuamente inclinados.

Aunque no haya ahora indicios visibles del desagrado de Dios a la repetición del pecado de Ananías y Safira, este es igualmente odioso a su vista, y el transgresor será castigado con toda seguridad en el día del juicio; y muchos sentirán la maldición de Dios aun en esta vida. Cuando se hace una promesa a la causa, es un voto hecho a Dios y debe ser cumplido como cosa sagrada. A la vista de Dios, no es menos que un sacrilegio el apropiarnos para nuestro uso particular de lo que una vez fue prometido para fomentar su obra sagrada (Testimonios para la iglesia, pp. 460, 461).

La abnegación es la nota tónica de las enseñanzas de Cristo. Con frecuencia se impone este concepto a los creyentes con un lenguaje que parece autoritario, porque no hay otra forma de salvar a los hombres si no se los separa de su vida de egoísmo. Mientras Cristo vivió en el mundo hizo una correcta presentación del poder del evangelio… A cada alma que sufra con él mientras resiste al pecado, trabaja por su causa y se niega a sí misma por el bien de otros, él le promete una parte en la recompensa eterna de los justos. Poniendo en práctica el mismo espíritu que caracterizó la obra de su vida, llegaremos a participar de su naturaleza. Al compartir esta vida de sacrificio por amor a otros, disfrutaremos con él la vida futura, «un cada vez más excelente y eterno peso de gloria». 2 Corintios 4:17 (Consejos sobre mayordomía cristiana, p. 29).


Jueves 2 de marzo_____________________________________________________

CÓMO VENCER LA CODICIA

La codicia es un problema del corazón, y al igual que el orgullo y el egoísmo, a menudo pasa desapercibida; por eso puede ser tan mortal y engañosa. Ya es bastante difícil vencer los pecados que son obvios: la mentira, el adulterio, el robo, la idolatría, la transgresión del sábado. Pero estos son actos externos, cosas en las que tenemos que pensar antes de hacerlas. Pero, ¿cómo hacer para superar los pensamientos equivocados? Eso se pone difícil.

Lee 1 Corintios 10:13. ¿Qué promesa encontramos aquí, y por qué es tan importante entender esto en el contexto de la codicia?

1 Corintios 10:13

13 No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.

Entonces, ¿cómo, con el poder de Dios, podemos estar protegidos contra este pecado peligrosamente engañoso?

  1. Tomar la decisión de servir a Dios y depender de él, y de ser parte de su familia. “Elijan hoy a quién servir […]; que yo y mi casa serviremos al Señor” (Jos. 24:15).
  2. Orar diariamente e incluir Mateo 6:13: “No nos dejes caer en tentación, sino líbranos del mal. Porque tuyo es el reino, el poder y la gloria por todos los siglos”. Cuando sientas codicia por algo que sabes que no deberías tener, ora por ello, reclamando las promesas de la Biblia para obtener la victoria, como 1 Corintios 10:13.
  3. Estudiar la Biblia en forma regular. “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti” (Sal. 119:11).

Jesús abordó el problema de la humanidad con el pecado. Él fue tentado en todo, así como nosotros. Y, para poder resistir, pasó noches enteras en comunión de oración con su Padre. Y Jesús no dejó esta Tierra hasta que abrió camino con el ejemplo, y luego prometió poder para que cada persona tenga una vida de fe y obediencia, y desarrolle un carácter como el de Cristo.

“Busquen al Señor mientras puede ser hallado, llámenlo en tanto que está cerca. Deje el impío su camino, y el hombre malo sus pensamientos; y vuélvase al Señor, quien tendrá de él misericordia, y a nuestro Dios, que es amplio en perdonar” (Isa. 55:6, 7).

¿Qué consecuencias provocó la codicia en tu vida? ¿Qué lecciones aprendiste? ¿Qué podrías necesitar aprender de ellas?

ESPÍRITU DE PROFECÍA

El pecado mortal que condujo a Acán a la ruina tuvo su origen en la codicia, que es, entre todos los pecados, el más común y el que se considera con más liviandad. Mientras que otros pecados se averiguan y se castigan, ¡cuán raro es que se censure siquiera la violación del décimo mandamiento! La historia de Acán nos enseña la enormidad de ese pecado y cuáles son sus terribles consecuencias.

La codicia es un mal que se desarrolla gradualmente. Acán albergó avaricia en su corazón hasta que ella se hizo hábito en él y le ató con cadenas casi imposibles de romper. Aunque fomentaba este mal, le habría horrorizado el pensamiento de que pudiera acarrear un desastre para Israel; pero el pecado embotó su percepción, y cuando le sobrevino la tentación cayó fácilmente.

¿No se cometen aun hoy pecados semejantes a ése, y frente a advertencias tan solemnes y explícitas como las dirigidas a los israelitas? Se nos prohíbe tan expresamente albergar la codicia como se le prohibió  Acán que tomara despojos en Jericó. Dios declara que la codicia o avaricia es idolatría. Se nos amonesta:… «Mirad, y guardaos de toda avaricia». Lucas 12:15… Tenemos ante nosotros la terrible suerte que corrieron Acán, Judas, Ananías y Safira. Y aun antes de estos casos tenemos el de Lucifer, aquel «hijo de la mañana» que, codiciando una posición más elevada, perdió para siempre el resplandor y la felicidad del cielo. Y no obstante, a pesar de todas estas advertencias, la codicia reina por todas partes (Historia de los patriarcas y profetas, p. 530).

Dios proveyó para que no seamos tentados más allá de lo que podemos soportar, y que para toda tentación preparará una salida. Si vivimos totalmente para Dios, no permitiremos que nuestra mente se entregue a imaginaciones egoístas.

Si de alguna manera Satanás puede obtener acceso a la mente, sembrará su cizaña y la hará crecer al punto de producir una cosecha abundante. En ningún caso puede Satanás dominar los pensamientos, palabras y actos, a menos que voluntariamente le abramos la puerta y le Invitemos a pasar. Entrará entonces y, arrebatando la buena semilla del corazón, anulará el efecto de la verdad.

Todos los que llevan el nombre de Cristo necesitan velar, orar y guardar las avenidas del alma; porque Satanás está obrando para corromper y destruir, si se le concede la menor ventaja (El hogar cristiano, p. 365).

(1 Corintios 10: 12, 13). Estas palabras se dan para las personas que aún están relacionadas con el mundo, sujetas a tentaciones e influencias que son engañosas y alucinantes. Mientras mantengan fija su atención en Aquel que es su sol y su escudo, las tinieblas y la oscuridad que las rodean no dejarán una mancha ni una mácula en sus vestiduras. Caminarán con Cristo; orarán, creerán y trabajarán para salvar a las almas que están a punto de perecer. Están tratando de romper las ataduras con que Satanás las ha ligado, y no serán avergonzadas si por fe hacen de Cristo su compañero. El gran engañador presentará constantemente tentaciones y engaños para echar a perder la obra de los seres humanos; pero si confían en Dios, si son mansos, humildes y dóciles de corazón, si perseveran en el camino del Señor, el cielo se regocijará porque ganarán la victoria. Dios dice: «Andará conmigo de blanco, con vestiduras inmaculadas, porque es digno» (El Cristo triunfante, p. 49).


Viernes 3 de marzo_____________________________________________________

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:

En la conquista de Jericó, Acán no fue el único que llevó plata y oro al campamento de Israel. Josué les había dicho que llevaran la plata y el oro y los utensilios de bronce y hierro al tesoro de la casa de Dios (Jos. 6:19, 24). Todo lo demás debía quemarse. Sin embargo, Acán fue el único que se quedó con algo. “Entre los millones de Israel, solo hubo un hombre que, en aquella hora solemne de triunfo y castigo, osó violar el mandamiento de Dios. La vista de aquel costoso manto babilónico despertó la codicia de Acán; y aun cuando esa prenda lo había puesto cara a cara con la muerte, lo llamó ‘un manto babilónico muy bueno’. Un pecado lo había llevado a cometer otro, y se adueñó del oro y la plata dedicados al tesoro del Señor; le robó a Dios parte de las primicias de la tierra de Canaán” (PP 529, 530).

En la lista paulina de las señales del fin, los primeros dos elementos involucran nuestra actitud hacia el dinero y las posesiones. “En los últimos días, habrá tiempos muy difíciles. Pues la gente solo tendrá amor por sí misma y por su dinero [codicia]” (2 Tim. 3:1, 2, NTV). El egoísmo y el amor al dinero son descripciones significativas de la humanidad en los últimos días, nuestros días.

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

  1. Lee 1 Timoteo 6:6 al 10: “Sin embargo, grande ganancia es la piedad acompañada de contentamiento; porque nada hemos traído a este mundo, y nada podremos llevar. Así, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos. Los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y perniciosas, las cuales hunden a los hombres en ruina y perdición. El amor al dinero es la raíz de todos los males; y algunos, por esa codicia, se desviaron de la fe y fueron traspasados de muchos dolores” (énfasis añadido). En clase, den ejemplos de personas que, por amor al dinero, “fueron traspasados [ellos mismos y otros] de muchos dolores”. Hay muchos ejemplos, ¿verdad? ¿Cómo podemos encontrar el equilibrio correcto, sabiendo que necesitamos dinero para vivir pero sin caer en la trampa de la que Pablo advierte aquí?
  2. ¿Qué otras cosas, además del dinero, podemos codiciar?
  3. ¿Cuál es la diferencia entre un deseo legítimo de algo y la codicia? ¿Cuándo podría un legítimo deseo de algo convertirse en codicia?

COMENTARIO DEL VIDEO

(Actualizado)

LA VERDAD ACERCA DE LOS DIEZMOS Y LAS OFRENDAS A LA LUZ DE LA BIBLIA Y EL ESPÍRITU DE PROFECIA

La primera vez que la palabra -diezmos- se menciona en la Biblia se encuentra en Génesis 14 donde leemos:

18Entonces Melquisedec, rey de Salem y sacerdote del Dios Altísimo, sacó pan y vino; 19y le bendijo, diciendo: Bendito sea Abram del Dios Altísimo, creador de los cielos y de la tierra; 20y bendito sea el Dios Altísimo, que entregó tus enemigos en tu mano. Y le dio Abram los diezmos de todo.

¿Quién era Melquisedec? Melquisedec es identificado por los eruditos de la Biblia, como Sem, el hijo mayor de Noé, quien fue el último de los patriarcas de edad longeva y en su larga vida logró conocer hasta Isaac y su hijo Jacob, por lo tanto, cabe la posibilidad que en los tiempos antiguos los diezmos se les entregaban a los patriarcas, que al mismo tiempo eran sacerdotes.

La segunda vez que la Biblia menciona la palabra -diezmos- lo encontramos en Génesis 28, donde Jacob hace la promesa de devolver los diezmos a Dios, si regresaba con bien de su forzado viaje:

20E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje en que voy, y me diere pan para comer y vestido para vestir, 21y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios. 22Y esta piedra que he puesto por señal, será casa de Dios; y de todo lo que me dieres, el diezmo apartaré para ti.

La tercera vez que encontramos la palabra -diezmos- en el libro de Números capitulo 18. En este capítulo encontramos la institución oficial de dos grupos de trabajadores religiosos como lo fueron los sacerdotes y los levitas, y también la institución oficial de los diezmos y las ofrendas.

Esto lo hizo Dios por escrito, en el monte Sinaí a través de Moisés.

En el capítulo 18 de Números aparte de encontrar la institución de los levitas, sacerdotes y el diezmo, también encontramos una detallada explicación de los servicios religiosos de los sacerdotes y levitas, como también una detallada explicación de la distribución de los diezmos y ofrendas que serviría para el sostén del santuario y para pagar el salario de los sacerdotes y levitas.

De acuerdo con el libro de Números capitulo 18, los sacerdotes eran los encargados de hacer exclusivamente los trabajos religiosos del altar, mientras que los levitas eran los encargados de hacer todo tipo de trabajo religioso fuera del altar.

Tanto los sacerdotes como los levitas predicaban y enseñaban al pueblo, la diferencia era que los sacerdotes lo hacían desde el altar y los levitas predicaban y enseñaban en cualquier otro lugar, con tal que no fuera el altar.

A parte del trabajo de la predicación, los levitas también eran los encargados de todo el mantenimiento del templo en todas sus formas. Estos dos trabajos no se podían mezclar, Dios ordenó so pena de muerte, que el levita desempeñara el trabajo del sacerdote y viceversa.

Jehová dijo a Aarón: Tú y tus hijos, y la casa de tu padre contigo, llevaréis el pecado del santuario; y tú y tus hijos contigo llevaréis el pecado de vuestro sacerdocio. Y a tus hermanos también, la tribu de Leví, la tribu de tu padre, haz que se acerquen a ti y se junten contigo, y te servirán; y tú y tus hijos contigo serviréis delante del tabernáculo del testimonio. Y guardarán lo que tú ordenes, y el cargo de todo el tabernáculo; mas no se acercarán a los utensilios santos ni al altar, para que no mueran ellos y vosotros. Se juntarán, pues, contigo, y tendrán el cargo del tabernáculo de reunión en todo el servicio del tabernáculo; ningún extraño se ha de acercar a vosotros. Y tendréis el cuidado del santuario, y el cuidado del altar, para que no venga más la ira sobre los hijos de Israel. Porque he aquí, yo he tomado a vuestros hermanos los levitas de entre los hijos de Israel, dados a vosotros en don de Jehová, para que sirvan en el ministerio del tabernáculo de reunión. Mas tú y tus hijos contigo guardaréis vuestro sacerdocio en todo lo relacionado con el altar, y del velo adentro, y ministraréis. Yo os he dado en don el servicio de vuestro sacerdocio; y el extraño que se acercare, morirá

A continuación, en el mismo capítulo 18 de Números, Dios indica la distribución de los diezmos y las ofrendas entre los sacerdotes y los levitas:

Para los sacerdotes son todas las ofrendas:

Dijo más Jehová a Aarón: He aquí yo te he dado también el cuidado de mis ofrendas; todas las cosas consagradas de los hijos de Israel te he dado por razón de la unción, y a tus hijos, por estatuto perpetuo.

Para los levitas son todos los diezmos:

21Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo de reunión.

24Porque a los levitas he dado por heredad los diezmos de los hijos de Israel, que ofrecerán a Jehová en ofrenda; por lo cual les he dicho: Entre los hijos de Israel no poseerán heredad. Números 18

Para los sacerdotes solamente el 1% de los diezmos, dado a ellos por los levitas; dicho en otras palabras, los levitas tenían que pagar sus diezmos a los sacerdotes, de todo el diezmo que ellos recibían departe del pueblo de Israel:

26Hablarás a los levitas y les dirás: Cuando toméis los diezmos de los hijos de Israel que os he dado como vuestra heredad, vosotros presentaréis de ellos, como ofrenda mecida a Jehová, el diezmo de los diezmos… 28Así presentaréis también vuestra ofrenda a Jehová de todos los diezmos que recibáis de los hijos de Israel; se la daréis al sacerdote Aarón como ofrenda reservada a Jehová. Números 18

En el libro de Nehemías capítulo 10 encontramos la orden divina puesta en acción, en la descripción que hace Nehemías en cuanto a la recolección de los diezmos y su distribución:

NEHEMÍAS 10

37 que traeríamos también las primicias de nuestras masas, y nuestras ofrendas, y del fruto de todo árbol, y del vino y del aceite, para los sacerdotes, a las cámaras de la casa de nuestro Dios, y el diezmo de nuestra tierra para los levitas; y que los levitas recibirían las décimas de nuestras labores en todas las ciudades; 38 y que estaría el sacerdote hijo de Aarón con los levitas, cuando los levitas recibiesen el diezmo; y que los levitas llevarían el diezmo del diezmo a la casa de nuestro Dios, a las cámaras de la casa del tesoro. 39 Porque a las cámaras del tesoro han de llevar los hijos de Israel y los hijos de Leví la ofrenda del grano, del vino y del aceite; y allí estarán los utensilios del santuario, y los sacerdotes que ministran, los porteros y los cantores; y no abandonaremos la casa de nuestro Dios.

Tenemos una guía clara en la Biblia, instituida por Dios, para la distribución de los diezmos y las ofrendas en nuestra iglesia.

En nuestros días modernos los sacerdotes son todos los pastores de nuestra iglesia sin importar su rango o posición en la iglesia y los levitas son todos los laicos que trabajan para la obra de Dios, que no son -dedicados-para la obra como los pastores ya que son de sostén propio.

Los administradores de nuestra iglesia enseñan que los levitas modernos son los pastores y obreros bíblicos, entonces queda la pregunta: ¿Quiénes son los sacerdotes en nuestros tiempos modernos?

El capítulo 18 de Números es bien definido, los sacerdotes son los que hacen el trabajo del altar, (bautizar, predicar, casar, presentar niños, oficiar ritos etc.) Los levitas trabajan con el evangelismo y con el cuido de la iglesia, hoy en día los laicos predican debido a la escases que hay de pastores.

Entonces de acuerdo con Dios, dicho por Él mismo en el capítulo 18 de Números, encontramos que esta sería la distribución de los diezmos y ofrendas en nuestros días modernos en nuestra iglesia:

Conferencia, misión o asociación: Todas las ofrendas que recibe la iglesia, más el 1% de todos los diezmos

Iglesia local: 9% de los diezmos que recibe la iglesia.

Hasta el año 2022, el reporte de ministros activos en la iglesia adventista alrededor del mundo es de 20,924 en contraposición de eso, la membresía de nuestra iglesia está casi llegando a los 22 millones, dicho en otras palabras, hay solamente 1000 pastores disponibles para cada millón de miembros.

Dios diseñó que el 9 % de los diezmos se quedara con los casi 22 millones de laicos, para cubrir los gastos del evangelio, y que el 1% de los diezmos, más todas las ofrendas, se entregara a los 21,000 pastores del mundo.

¿QUE PODEMOS HACER CON NUESTROS DIEZMOS Y OFRENDAS CUANDO PERDEMOS LA CONFIAZA EN LOS LIDERES DE NUESTRA IGLESIA?

Hay un documento llamado “Gospel Financing: Pulling Together” (Finanzas Evangelísticas: Puestas Juntas) escrito por el pastor Frank B Holbrook, quien es director asociado del Instituto de Investigaciones Bíblicas de la Conferencia General.

Como todos sabemos el Instituto de Investigaciones Bíblicas, es la máxima autoridad teológica de nuestra iglesia, es allí donde nace nueva luz teológica y es allí donde se lleva cualquier pregunta teológica que sea difícil de contestar, allí está la crema y la nata mundial de la teología de nuestra iglesia.

El pastor Holbrook, nos dice en su documento lo siguiente:

(Traducción al español en todo este estudio ha sido realizada por el hermano Tony García)

Original: “Whereshall I send my tithe? I no longer have confidence in church leadership. May I give it to anyone who claims to preach ‘the straight testimony’ of the Adventist faith? May I assist self-supporting units with it?» In other words, am I free, as a church member, to direct my tithe into any channel I see fit? Can I expect the Lord’s approval of such a course of action?

Traducción: “¿Dónde mandaré mis diezmos? Si yo ya no tengo confianza en el liderazgo de la iglesia. ¿Puedo entregarle ese diezmo a cualquiera que dice predicar el testimonio de la fe Adventista?; ¿Puedo ayudar a esas organizaciones evangelistas que son de sostén propio con mis diezmos? En otras palabras ¿Cómo miembro de iglesia, soy libre de dirigir mis diezmos a cualquier canal que crea conveniente? ¿Puedo esperar la aprobación de Dios si tomo cualquiera de las acciones mencionadas?

Original: «These are practical questions–and sincere. Unfortunately, they reflect an uncertainty among some of our members over the role and function of the organized world church of Seventh-day Adventists. Since we are a Bible-based church, we believe that Israel’s experience with organization and tithing can provide sound insights to assist modern Adventists in resolving such questions.”

Traducción: Estas son preguntas prácticas y sinceras. Desafortunadamente (estas preguntas) reflejan la incertidumbre de ciertos miembros de iglesia sobre el trabajo y las funciones de la iglesia Adventista del Séptimo Día mundial. Debido a que nosotros somos una iglesia basada en la Biblia, nosotros creemos que la experiencia de Israel con la organización y los diezmos, nos pueden proveer un sonido claro asistiendo a los adventistas modernos para contestar estas preguntas”

El pastor Holbrook continúa explicando lo que nosotros hemos dicho anteriormente, él dice:

Original: «The Levites (living in the 48 cities allotted to them throughout the tribal territories–Num. 35: 7) periodically gathered the tithes from the people. They in turn tithed what they received and brought this «tithe of the tithe» to the sanctuary storehouse chamber, where it was redistributed to the priests (and in later years to other Levitical personnel) who served in the sanctuary service and worship (see Num. 18:26-28).»

Traducción: Los levitas (que vivían en 48 ciudades asignadas a ellos a través de los territorios de las otras tribus—Números 35: 7) periódicamente recogían los diezmos del pueblo. Ellos diezmaban los diezmos que recibían, y traían el “diezmo de los diezmos” al aposento del granero (alfolí) del santuario, allí era redistribuido a los sacerdotes (y en años más tarde a otro personal levita) quienes servían en los servicios del santuario y adoración. (véase número 18: 26-28)

Aquí encontramos que el Levita, traía al templo, el diezmo de los diezmos, y también traía todas las ofrendas al templo, para ser distribuida entre los sacerdotes, es decir que ellos se cobraban su salario, antes de traer el diezmo de los diezmos al templo.

DE ACUERDO CON EL ESPÍRITU DE PROFECIA, TODOS TENEMOS LA OBLIGACION Y EL PRIVILEGIO DE INVERTIR NUESTROS BIENES DONDE MÁS SE NECESITEN:

Original: «The Lord has made us individually His stewards. We each hold a solemn responsibility to invest our means ourselves. God does not lay upon you the burden of asking the conference, or any council of men, whether you shall use your means as you see fit to advance the work of God.»– Special Testimonies to Battle Creek, pp. 41, 42.

Traducción: “El Señor nos ha hecho individualmente sus mayordomos. Cada uno de nosotros tenemos la solemne responsabilidad de invertir nuestros bienes nosotros mismos. Dios no te dejó la carga de estar preguntando a la conferencia, o ninguna junta de hombres, si puedes usar tus bienes, de la manera que tu veas conveniente para el avance del trabajo de Dios”– Special Testimonies to Battle Creek, pp. 41, 42.

Hay otra declaración de Elena de White que se encuentra en “Manuscritos y Testimonios no Publicados de Elena de White” Página 177, y dice así:

Unpublished Manuscript

Testimonies of Ellen G. White,

Original: “God grant that the voices which have been so quickly raised to say that all the money invested in the work must go through the appointed channel at Battle Creek (the church headquarters at the time), shall not be heard. The people to whom God has given His means are amenable to Him alone. It is their privilege to give direct aid and assistance to missions.” (Ibid. Pg. 177) (Signed) Ellen G. White. {SpM 177. 3} Neglect of the Southern Field. Oakland, Ca., July 8, 1901.

Traducción: “Dios permita que las voces que prontamente se han levantado para decir que todo el dinero que se invierte en la obra tiene que ser canalizada por medio de Battle Creek (Las oficinas mundiales de esos días) no sean escuchadas. A la gente a quien Dios les ha dado bienes son responsables solamente a El (a Dios). Es privilegio de ellos que den directamente su ayuda y asistencia a las misiones*” (Ibid Página 177) (Firmado) Elena G White. {SpM 177.3} Negligencia del Campo del Sur. Oakland, California, Julio 8, 1901

Cuando las Iglesias Adventistas comenzaron a colectar los diezmos, la pregunta grande era: ¿Qué se haría con ese dinero? El pastor James White contestó esa pregunta en una publicación de la revista “Review” en marzo 5 de 1859 y él escribió:

Original: «We suggest that each church keep at least $5 in the treasury to help those preachers who occasionally visit them, and labor among them. This seems necessary. Such is the scarcity of money that our good brethren very seldom are prepared to help a messenger on his journey. Let there be a few dollars in every church treasury.”

Traducción: “Sugerimos que cada iglesia mantenga por los menos 5 dólares en su tesorería para ayudar a esos predicadores que ocasionalmente los visitan y trabajan entre ellos. Esto parece necesario. Es tanta la escases de dinero que hay, que nuestros buenos hermanos casi nunca están preparados para ayudar a un mensajero en su viaje. Permitamos que haya unos cuantos dólares en cada tesorería de la iglesia”

Dos años mas tarde, el pastor James White da un reporte de los diezmos de su iglesia, la iglesia de Battle Creek (BC)

Original: «As the result of strictly carrying out Heaven’s plan, there is now in our treasury (B.C.) $150 waiting for some worthy object which will really advance the cause of truth.»–RH January 29, 1861.

Traducción: “Como resultado de llevar el estricto plan del cielo, ahora en nuestra tesorería tenemos (B.C.) 150 dólares esperando por algún objetivo que valga la pena, que realmente adelante la causa de la Verdad”—RH enero 29, 1861

¿QUE DIJO Y QUE HIZO ELENA DE WHITE ANTE EL MISMO PROBLEMA DE LA PERDIDA DE CONFIANZA EN LA ADMINISTRACION DE LA IGLESIA?

Esta es una carta escrita por Elena de White, al presidente de la conferencia del estado de Colorado, en enero 22 de 1905

Los hermanos adventistas negros del sur habían sido descuidados y abandonados por la Conferencia General, muchos de ellos habían trabajado en la obra sin ser pagados por muchos meses, y estaban sufriendo de pobrezas, tanto los pastores como sus familias.

Cierto día, la “Sociedad Misionera del Sur” como se llamaban en esos días los hermanos negros del Sur de los Estados Unidos, tuvieron la oportunidad de viajar al estado de Colorado, y después de exponer su precaria situación financiera a los hermanos de una iglesia determinada en ese estado, la iglesia decidió tomar de su tesorería 400 dólares que eran diezmos y se los donó a la “Sociedad Misionera del Sur”

Cuando el presidente de la conferencia de Colorado se dio cuenta de esto, condenó públicamente la acción de los hermanos del sur, hizo un escándalo terrible y exigió a la “Sociedad Misionera del Sur” que devolvieran esos 400 dólares que eran diezmos.

Al darse cuenta Elena de White, de este escándalo, escribió la siguiente carta al presidente, y esto es lo que ella le dijo:

Original: «My brother, I wish to say to you, Be careful how you move. You are not moving wisely. The least you have to speak about the tithe that has been appropriated to the most needy and the most discouraging field in the world, the more sensible you will be.

Traducción: Mi hermano, deseo decirte, que seas cuidadoso con tu manera de actuar. Tú no estás actuando sabiamente. Entre menos hables acerca de los diezmos que han sido posesionados por los más necesitados y por el campo más desalentador del mundo, más sensible serás.

Original: «It has been presented to me for years that my tithe was to be appropriated by myself to aid the white and colored ministers who were neglected and did not receive sufficient properly to support their families. When my attention was called to aged ministers, white or black, it was my special duty to investigate into their necessities and supply their needs. This was to be my special work, and I have done this in a number of cases. No man should give notoriety to the fact that in special cases the tithe is used in that way.

Traducción: Me ha pasado que, por muchos años, yo me halla apropiado de mis propios diezmos, para ayudar a ministros blancos y negros quienes han sido abandonados y no han recibido propiamente lo suficiente para ayudar a sus familias. Cuando mi atención ha sido llevada a los ministros de edad avanzada, ya sean blancos o negros, es mi obligación especial de investigar sus necesidades y suplirlas. Este fue mi trabajo especial, y lo he hecho en muchas ocasiones. Ningún hombre tendría que dar tanto énfasis al asunto que en casos especiales el diezmo sea usado de esa manera.

Original: «In regard to the colored work in the South, that field has been and is still being robbed of the means that should come to the workers in that field. If there have been cases where our sisters have appropriated their tithe to the support of the ministers working for the colored people in the South, let every man, if he is wise, hold his peace.

Traducción: Con respecto al trabajo de los negros en el sur, ese campo ha sido robado y aún sigue siendo robado de los medios que tendrían que llegar a los trabajadores en ese campo. Han habido casos donde nuestras hermanas se han apropiado de los diezmos para ayudar a los ministros que trabajan para la gente negra del sur, deja a todo hombre, que, si es sabio, se mantendrá en paz.

Original: «I have myself appropriated my tithe to the most needy cases brought to my notice. I have been instructed to do this; and as the money is not withheld from the Lord’s treasury, it is not a matter that should be commented upon, for it will necessitate my making known these matters, which I do not desire to do, because it is not best.

Traducción: Yo me he apropiado de mis propios diezmos para ayudar a los casos más necesitados que me han hecho saber. Yo he sido instruida para hacer esto, y el dinero no se ha retenido de los tesoros de Dios. Este es un asunto que no debería ser comentado, para esto necesitaría dar a conocer mis obras en este asunto, y es cosa que no deseo hacer, porque no es lo mejor.

Original: «Some cases have been kept before me for years, and I have supplied their needs from the tithe, as God has instructed me to do. And if any person shall say to me, Sister White, will you appropriate my tithe where you know it is most needed, I shall say Yes, I will; and I have done so. I commend those sisters who have placed their tithe where it is most needed to help to do a work that is being left undone. If this matter is given publicity, it will create a knowledge which would better be left as it is. I do not care to give publicity to this work which the Lord has appointed me to do, and others to do.

Traducción: En algunos casos los he mantenido (el diezmo) por años, y he suplido las necesidades con los diezmos, como Dios me ha instruido hacerlo. Y si alguna persona me dijera: Hermana White, tomarías mis diezmos para repartirlos donde más se necesiten, yo les diría que sí, y así lo he hecho. Yo recomiendo a esas hermanas quienes han puesto sus diezmos donde más se necesitan, a que ayuden a hacer un trabajo que se ha quedado sin terminar. Si a este asunto se le diera publicidad, crearía un conocimiento que sería mejor dejarlo como está. No deseo darle publicidad al trabajo que Dios me ha designado para hacer, y que también les ha designado a otros a hacer.

Original: «I send this matter to you so that you shall not make a mistake. Circumstances alter cases. I would not advise that anyone should make a practice of gathering up tithe money. But for years there have now and then been persons who have lost confidence in the appropriation of the tithe, who have placed their tithe in my hands and said that if I did not take it they would themselves appropriate it to the families of the most needy ministers they could find. I have taken the money, given a receipt for it, and told them how it was appropriated.

Traducción: Yo te envío este asunto para que tu no cometas un error. Las circunstancias alteran los casos. Yo no recomiendo a nadie que haga la práctica de recoger (o alzar) el dinero de los diezmos. Pero por años hay y han habido personas que han perdido su confianza en la distribución de los diezmos, estas personas han puesto sus diezmos en mis manos y han dicho que, si yo no los tomo, ellos repartirán a las familias de los ministros más necesitadas que puedan encontrar. Yo he tomado el dinero, les he dado recibo de ese dinero, y les he dicho como se repartió ese diezmo.

Original: «I write this to you so that you shall keep cool and not become stirred up and give publicity to this matter, lest many more shall follow their example.»– Letter 267, 1905.

Traducción: Yo te escribo para que te mantengas tranquilo, y no te vuelvas agitado y le des publicidad este asunto, así menos van a seguir el ejemplo de ellos” – Carta 267, 1905

¿QUE SE PUEDE HACER SI HAY MALA ADMINISTRACION EN LA IGLESIA?

“Aquellos que están laborando en esta obra, ven que no hay dinero para pagar a los ministros. Ellos (los Administradores) están retirando el dinero para cubrir otros gastos. Dios no ha sido glorificado con este tipo de obra. Tenemos que levantar nuestra voz, contra este tipo de administración” Manuscrito 17, 14 de Marzo de 1897

El diezmo es sagrado y ha sido reservado por Dios para sí mismo. Hay que traerlo a su tesorería para que se use en el sostén de los obreros evangélicos. Se ha robado al Señor durante mucho tiempo, porque hay quienes no comprenden que el diezmo es la porción que Dios se ha reservado.

Algunos no han estado satisfechos y han dicho: “No seguiré pagando el diezmo, porque no tengo confianza en la forma como se administran las cosas en el corazón de la obra. ¿Pero robaréis a Dios porque pensáis que la dirección de la obra no es adecuada? Presentad vuestras quejas claramente y con franqueza, con el espíritu debido y a las personas responsables. Pedid que se hagan los ajustes necesarios; pero no retengáis lo que le corresponde a la obra de Dios, y no seáis infieles, porque otras personas no están obrando correctamente (Testimonios para la iglesia, tomo 9, p. 200).

“Ahora, desde la luz que tengo, como se me presentó en figuras: había un recinto estrecho aquí; Allí dentro de ese estrecho hay un poder gobernante monárquico y de realeza. Aquí las salidas están bloqueadas. Y el trabajo en todo nuestro campo exige un curso de acción completamente diferente al que hemos tenido. Ya hemos escuchado suficiente, en abundancia, sobre eso de: «Todo debe pasar por las líneas regulares». Cuando vemos que las líneas regulares están transformadas, purificadas y refinadas, y el molde de Dios de los cielos está en las líneas regulares, entonces es nuestro deber establecer las líneas regulares. Pero cuando vemos el mensaje tras el mensaje que Dios ha dado ha sido aceptado, pero no ha habido cambios, y todo permanece como antes, entonces es evidente que sangre nueva debe ser llevada a las líneas regulares. Los líderes de las líneas regulares, deben tener un cambio completo, una organización completamente nueva, y tener un comité que albergará no solo media docena, es decir, ser un poder manipulador y controlador, sino que tenga representantes de entre aquellos que han sido puestos en responsabilidad dentro nuestros intereses educativos, en nuestros Sanitarios, que están trabajando; y la vida en ellos, constantemente en el trabajo, agregando constantemente, constantemente dando al campo el talento que proviene de él.” SPM 163.1

«El Señor ha bendecido la obra que J.E.White ha tratado de hacer en el Sur. Quiera Dios que las voces que se han levantado tan rápidamente para decir que todo el dinero ha invertirse en la obra debe pasar por los canales señalados de Battle Creek, no sean oídas. El pueblo a quien Dios ha otorgado sus bienes estén sujetos solo a Él. Es su privilegio el dar ayuda directa y asistencia a las misiones. Es por causa de las malversaciones de los recursos que los campos del Sur no han tenido una mejor proyección de la que han tenido hoy.» SpM 176.7

Original: “God calls for a revival and a reformation”

Original: “El llamado de Dios a un reavivamiento y una reforma”

Original: “For years the same routine, the same ‘regular way’ of working has been followed, and God’s work has been greatly hindered. The narrow plans that have been followed by those who did not have clear, sanctified judgment have resulted in a showing that is not approved by God.

Traducción: “Por años se ha seguido la misma rutina, se ha seguido la misma “Manera Regular”, y la obra de Dios ha sido grandemente estorbada. El angosto plan que se ha seguido por esos que no tienen un claro ni santificado juicio, ha resultado en una proyección que no es aprobada por Dios.”

Original: The ‘regular lines’ have not done the work which God desires to see accomplished. Let revival [and] reformation make constant changes… Let every yoke be broken. Let men awaken to the realization that they have an individual responsibility.” (Unpublished Manuscript Testimonies of Ellen G. White Pag. Ibid. Pg. 174-176).

(Signed) Ellen G. White. {SpM 177. 3} Neglect of the Southern Field. Oakland, Ca., July 8, 1901.

Traducción: “Dios nos llama a un reavivamiento y una reforma. Las “líneas regulares” no han hecho el trabajo que Dios deseaba completar. Dejemos que el reavivamiento y la reformación hagan cambios constantes… Permitamos que cada yugo sea quebrantado. Permitamos que cada hombre despierte a la realidad que cada uno de ellos tiene una responsabilidad individual” (Manuscritos y Testimonios de Elena de White no Publicados Pág. 174-176 ) (Firmado) Elena G White. {SpM 177.3} Negligencia de el Campo del Sur. Oakland, California, Julio 8, 1901

 

TANTO EL DADOR COMO EL ADMINISTRADOR TIENE QUE SER CUIDADOSO CON LOS BIENES DE DIOS

Los miembros de la iglesia deben contribuir alegremente al sostén del ministerio. Deben practicar la renunciación y la economía, para no quedar atrasados en ningún buen don. Somos peregrinos y advenedizos, que buscan una patria mejor, y cada alma debe hacer un pacto con Dios con sacrificio. Es corto el tiempo que nos queda para salvar almas, y todo lo que no se necesita para suplir necesidades positivas debe ser traído como ofrenda de acción de gracias a Dios.

Y es deber de los que trabajan en palabra y doctrina revelar igual renunciación. Descansa una solemne responsabilidad sobre los que reciben los generosos donativos de la iglesia y administran los recursos de la tesorería de Dios. Deben estudiar cuidadosamente las providencias de Dios, para discernir dónde impera la mayor necesidad. Han de ser colaboradores con Cristo en establecer su reino en la tierra, en armonía con la oración del Salvador: “Venga tu reino. Sea hecha tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra”. Mateo 6:10 (Obreros evangélicos, p. 469).

Si las personas a quienes se ha confiado el dinero de Dios fueran fieles en llevar a la tesorería del Señor los medios que les fueron prestados, su obra avanzaría con rapidez. Mucha gente sería ganada para la causa de la verdad, y el día del regreso de Cristo se apresuraría… (Testimonios para la iglesia, tomo 9, p. 47).

El ministro, por medio de la palabra y el ejemplo, debe enseñar a la gente a considerar el diezmo como algo sagrado. No debe pensar que, por ser ministro, puede retener el diezmo y usarlo siguiendo los dictados de su juicio personal. No le pertenece. No puede tomarse la libertad de dedicar para sí mismo lo que piensa que le corresponde. No debe apoyar ningún plan para desviar de su uso legítimo el uso de los diezmos y las ofrendas que han sido dedicados a Dios. Deben colocarse en su tesorería y destinarse para su servicio, tal como él lo ha establecido. {9TPI 199.2}

 

LAS PROMESAS QUE HAGAMOS A DIOS LAS TENEMOS QUE CUMPLIR

Dios ha dispuesto que la proclamación del evangelio dependa de las labores y dádivas de su pueblo. Las ofrendas voluntarias y el diezmo constituyen los ingresos de la obra del Señor. De los medios confiados al hombre, Dios reclama cierta porción: la décima parte. Los deja libres a todos de decir si han de dar o no más que esto. Pero cuando el corazón se conmueve por la influencia del Espíritu Santo, y se hace un voto de dar cierta cantidad, el que ha hecho el voto no tiene ya ningún derecho a la porción consagrada. Las promesas de esta clase hechas a los hombres serían consideradas como obligación; ¿y no son más obligatorias las que se hacen a Dios? ¿Son las promesas consideradas en el tribunal de la conciencia menos obligatorias que los acuerdos escritos de los hombres? (Los hechos de los apóstoles, p. 61).

Aquellos que han hecho promesas para posibilitar el avance de la obra de Dios no deben arrepentirse de sus votos y retener para sí lo que prometieron. Quienes asumen la responsabilidad de anular una promesa que ha sido hecha a Dios están haciendo algo de lo cual no querrán dar cuenta en el día del ajuste final. —Carta 104, del 19 de marzo de 1907, dirigida “A los que dan grandes donaciones para la causa de la verdad presente”. (Alza tus Ojos – 19 de Marzo).

 

SE PUEDE NEGOCIAR CON LAS RIQUEZAS CON TAL DE TENER MÁS FONDOS PARA LA OBRA

El propósito de Dios es que los medios que se nos han confiado sean empleados para edificar su reino. Se confían sus bienes a sus mayordomos, para que éstos negocien cuidadosamente con ellos, y le produzcan réditos en la salvación de almas para la vida eterna. Y estas almas a su vez se convertirán en mayordomos de la verdad, para cooperar con los intereses del reino de Dios (Cada día con Dios, p. 301)

 

EL DIEZMO NO ES OBLIGATORIO

Esta cita la encontramos en “Joyas de los Testimonios” tomo 1, página 374:

“Dios no obliga a los hombres a dar. Todo lo que ellos dan debe ser voluntario. El no quiere que afluyan a su tesorería ofrendas que no se presenten con buena voluntad…

En cuanto a la cantidad requerida, Dios ha especificado que sea la décima parte de los ingresos. Esto queda a cargo de la conciencia y generosidad de los hombres, cuyo juicio debe ejercerse libremente en este asunto del diezmo. Y aunque quede librado a la conciencia, se ha trazado un plan bastante definido para todos. No se requiere compulsión alguna”

En este texto se da a entender que el asunto de los diezmos es un asunto de conciencia y no un asunto de obligación.

Hay otro texto muy interesante, que lo encontramos en el libro “Estudios Escogidos de los Testimonios” en la lección 45 que es “El Diezmo” Página 392 leemos lo siguiente:

“Lo que Dios requiere: En cuanto a la cantidad requerida, Dios ha especificado la décima parte del rédito. Esto se deja a la conciencia y a la benevolencia de los hombres, cuyo juicio en este sistema del diezmo debería de tener libre acción. Pero mientras se deja librado a la conciencia, un plan bastante definido ha sido sancionado para todos, aunque no se exija su cumplimiento”

En estos textos encontramos que ningún hombre, ni pastor, ni anciano, ni tesorero, ni junta de iglesia puede ejercer autoridad o emitir juicio a favor o en contra de ningún hermano cuando se refiere al tema de los diezmos y las ofrendas. Es muy común encontrar en las juntas de nombramientos la elección de hermanos para cargos de iglesia basándose en la fidelidad de estos. Este error se tiene que evitar en nuestra iglesia, el diezmar y ofrendar es un asunto de libertad de conciencia entre Dios y el hombre y no es un asunto compulsorio entre el hombre y el hombre.

EL DIEZMO SE PUEDE USA PARA LA CONTRUCCIÓN DE TEMPLOS:

Elena de White dijo que, en casos de pobrezas extremas, el diezmo podría ser tomado para la construcción de una iglesia:

Original: While making clear that well established churches such as those in Oakland and Battle Creek should not use tithe funds for church expense, Ellen White did at the same time (1897) recognize that there were circumstances where tithe funds might be used for church buildings: (HUT 11.1)

Traducción: Cuando hizo claro que las iglesias bien establecidas como las iglesias en Oakland, California y Battle Creek en Michigan no deberían usar los diezmos para los gastos de iglesia, Elena de White al mismo tiempo (18797) reconoció que hay ciertas circunstancias donde el dinero de los diezmos pudiera ser usado para la construcción de templos. {HUT 11.1 The History and use of the tithe – La Historia y uso de los diezmos (panfleto)}

Original: “There are exceptional cases, where poverty is so deep that in order to secure the humblest place of worship, it may be necessary to appropriate the tithes.” Ms 24, 1897. {HUT 12.1 The History and use of the tithe – La Historia y uso de los diezmos (panfleto)}

Traducción: “Hay casos excepcionales, donde la pobreza es tan profunda que la única manera para asegurar un humilde lugar de adoración tendría que ser necesario apropiarse de los diezmos” 4T 464 {Testimonios tomo 4}

También Elena de White dijo que a parte de la construcción de iglesias, el diezmo también se podía usar para la construcción de otros edificios.

Original: «Institutions that are God’s instruments to carry forward His work on the earth must be sustained. Churches must be erected, schools established, and publishing houses furnished with facilities for doing a great work in the publication of the truth to be sent to all parts of the world. These institutions are ordained of God and should be sustained by tithes and liberal offerings. As the work enlarges, means will be needed to carry it forward in all its branches.»– 4T 464.

Traducción: “Las instituciones que son los instrumentos de Dios para llevar adelante su trabajo en esta tierra, tienen que ser sostenidas. Iglesias tiene que ser construidas, escuelas tienen que ser establecidas, y casas publicadoras tiene que ser provistas con facilidades para hacer un gran trabajo de la publicación de la Verdad, para ser enviadas a todas las partes del mundo. Estas instituciones son ordenes de Dios y deben ser sostenidas por los diezmos y las ofrendas liberales. A medida el trabajo se engranda, medios serán necesarios para llevar adelante todas estas ramificaciones.” 4T 464

Debemos tener en consideración que todos los edificios administrativos, las oficinas, las universidades y escuelas, los hospitales y clínicas, y los campos de retiro o campamentos, entre otros, son adquiridos y construidos con los diezmos y ofrendas de las iglesias: ¿Por qué entonces cuesta tanto conseguir dinero para la construcción de una iglesia local? ¿Por qué se tienen que hacer préstamos con intereses para la construcción de una iglesia local cuando son los diezmos de la misma iglesia?

LOS DIEZMOS Y LAS PUBLICACIONES

Original: “In commissioning His disciples to go ‘into all the world, and preach the gospel to every creature,’ Christ assigned to men the work of spreading the gospel. But while some go forth to preach, He calls upon others to answer to His claims upon them for tithes and offerings with which to support the ministry and to spread the printed truth all over the land. This is God’s means of exalting man. .”—Testimonies for the Church 4:472.

Traducción: «Al comisionar a sus discípulos a ir «por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura» Cristo asignó al hombre el trabajo de propagar el evangelio. Pero mientras algunos van adelante con la predicación del evangelio, El (Cristo) llama a otros a que respondan a su pedido de diezmos y ofrendas con la cual se sostendrá el ministerio y se propagará la verdad impresa sobre toda la tierra. Esta es la manera de Dios de exaltar al hombre.» Testimonios para la Iglesia 4: 472

SALARIOS PAGADOS CON LOS DIEZMOS A OTROS TRABAJADORES  DE LA OBRA QUE NO SON MINISTROS

Original: “Until within a few years past, the tithe has been used almost wholly for sustaining ministers of the gospel, those who preach from the stand. In some way it seemed to be universally understood that no others were entitled to any of the tithe. But more recently it has become customary to pay our Tract and Missionary State Secretaries from the tithe, and our auditing committees have settled with them the same as ministers. It has taken, in many cases, considerable argument to bring this about.

Traducción: Hasta hace algunos años atrás, el diezmo ha sido usado casi todo para sostener a los ministros del evangelio, esos que predican desde el púlpito. De alguna manera parece ser universal la idea que ninguna otra persona tiene derecho a ninguna parte de los diezmos. Pero recientemente sea ha hecho una costumbre  pagar a nuestro personal y a las secretarias de las oficinas misioneras de los diezmos, y también los comites de auditoría han sido pagados de la misma manera que los ministros. Esta acción ha tomado, en muchos casos, considerable discusiones al respecto

Original: “With the last year or two another class has also been laboring in the cause, and the question has been raised, How shall these be paid? We refer to the colporteurs and missionary workers of different classes, laboring in field or in city missions. These have in many cases been paid from the tithe. But in several instances it has been a heavy strain upon the treasury, and in some cases the ministry have not had a reasonable support because of this. The question has come to the front in a manner so forcible that it must be met and settled.

Traducción: En los últimos dos años, otra clase de trabajadores se ha unido a la causa, y la pregunta se ha levantado, ¿cómo estos serán pagados? Nos referimos a los colportores y a los trabajadores misioneros de diferentes clases, que trabajan en los campos, o en las misiones de las ciudades. En muchos casos estos han sido pagados de los diezmos. Pero en muchas circunstancias estos pagos han sido una pesada carga sobre la tesorería y en algunos casos los ministros no han tenido un pago razonable debido a estos gasto. La pregunta ha venido al frente de una manera muy fuerte, y tiene que ser contestada y solucionada.

Original: “Many can labor as effectively in the missionary work as colporteurs and laborers as those who preach from the desk. Many, no doubt, will canvass, and pay their way by the profits on sales, but there are many others who cannot be supported in this way, whose labors are necessary to carry the truth. How shall these be sustained?

Traducción: Muchos pueden trabajar en el campo misioneros como colportores y obreros y se pueden comparar en efectividad a los ministros que predican desde el pulpito. Otros, sin duda alguna, pueden ir de casa en casa, y pagarse con la ganancias de sus ventas, pero hay otros que no pueden se pagados de esta manera, estos son los obreros necesarios para llevar la verdad, ¿cómo ellos serán sostenidos?

Original: “After giving the matter much reflection we have settled the question in our own mind. We believe that tithing is designed of God for the support, as far as it will go, of all laborers who are called by the cause of God to give their time to this work. We know of no other special system for this purpose.”—G. I. Butler in An Examination of the Tithing System From a Bible Standpoint, pp. 71, 72.

Traducción: Después de dar mucha reflexión a este asunto nosotros hemos resuelto esta pregunta en nuestras mentes. Nosotros creemos que los diezmos han sido diseñados por Dios para ayudar, hasta donde se necesite, todos los obreros que son llamados por la causa de Dios a dar su tiempo en este trabajo. Nosotros no conocemos otro sistema especial para este próposito. G.I. Butler en «Una examinación al sistema de los diezmos desde el punto de vista bíblico, pp. 71,72»

Original: “The tithe should go to those who labor in word and doctrine be they men or women.”—Evangelism, 492.

Traducción: El diezmo tendría que ir a aquellos que trabajan en la Palabra y la doctrina ya sean hombres o mujeres.  -Evangelismo, 492

ALGUNOS TRABAJADORES DE LA OBRA TIENEN QUE SER PAGADO CON LOS DIEZMOS

En los años 1890 Elena de White habló de pagar a las mujeres que trabajaban para el evangelio ya sea desde el “escritorio sagrado” o las que llevaban el evangelio de puerta en puerta, ella dijo:

Original: «A great work is to be done in our world, and every talent is to be used in accordance with righteous principles. If a woman is appointed by the Lord to do a certain work, her work is to be estimated according to its value. Every laborer is to receive his or her just due…

Traducción: “Un gran trabajo debe ser terminado en nuestro mundo, y todo talento debe ser usado con los principios correctos. Si una mujer es designada por el Señor para hacer un determinado trabajo, su trabajo tiene que ser calculado de acuerdo con su valor. Cada trabajador debe recibir lo que se le debe, ya sea hombre o mujer…

Original: «Those who work earnestly and unselfishly, be they men or women, bring sheaves to the Master; and the souls converted by their labor will bring their tithes to the treasury.»–Ev 491, 492.

Traducción: Esos que trabajan honestamente y desinteresadamente, ya sea hombre o mujer, ellos traen gavillas al Maestro, y esas almas que se han convertido por su trabajo, traerán los diezmos al tesoro”– Ev 491-492

O sea que es una inversión para el evangelio, mientras más se invierte en obreros bíblicos, más almas se convertirán al evangelio y como consecuencia, más diezmos entrarán a los tesoros de la iglesia, gracias a los nuevos conversos.

De acuerdo con el consejo de Elena de White. Estos son los trabajadores que tienen derecho a ser pagados con los diezmos de la iglesia:

1- Los Ministros

“Let each regularly examine his income, which is all a blessing from God, and set apart the tithe as a separate fund, to be sacredly the Lord’s. This fund should not in any case be devoted to any other use; it is to be devoted solely to support the ministry of the gospel.”—The Review and Herald, May 9, 1893; Counsels on Stewardship, 81.

“The tithe is to be used for one purpose—to sustain the ministers whom the Lord has appointed to do His work. It is to be used to support those who speak the words of life to the people, and carry the burden of the flock of God…. When a man enters the ministry, he is to be paid from the tithe enough to sustain his family. He is not to feel that he is a beggar.”—Ms 82, 1904.

2-Los Instructores Bíblicos

“The tithe should go to those who labor in word and doctrine, be they men or women.”—Evangelism, 492.

“There are ministers’ wives—Sisters Starr, Haskell, Wilson, and Robinson—who have been devoted, earnest whole-souled workers, giving Bible readings and praying with families, helping along by personal efforts just as successfully as their husbands. These women give their whole time, and are told that they receive nothing for their labors because their husbands receive wages. I tell them to go forward and all such decisions will be revised. The Word says, ‘The laborer is worthy of his hire.’ When any such decision as this is made, I will in the name of the Lord protest. I will feel it my duty to create a fund from my tithe money to pay these women who are accomplishing just as essential work as the ministers are doing.”—Letter 137, 1898; MR 959.

3-Los Maestros de la Biblia (solamente), que trabajan en las escuelas enseñando solamente la materia de Biblia

“Some women are now teaching young women to work successfully as visitors and Bible readers…. Should not such labor be looked upon as being as rich in results as the work of the ordained ministers? Should it not command the hire of the laborers? Would not such workers be defrauded if they were not paid?… “In many respects a woman can impart knowledge to her sisters that a man cannot. The cause would suffer great loss without this kind of labor. Again and again the Lord has shown me that women teachers are just as greatly needed to do the work to which He has appointed them as are men.”—Ms 43a, 1898; MR 330.

“The best ministerial talent should be employed to lead and direct in the teaching of the Bible in our schools. Those chosen for this work need to be thorough Bible students; they should be men who have a deep Christian experience, and their salary should be paid from the tithe.”—Counsels to Parents, Teachers, and Students, 431 (1913).

4-Los misioneros tanto locales como internacionales

“In some of the larger conferences the tithe may be more than sufficient to sustain the laborers now in the field. But this does not sanction its use for any other purpose. If the conferences were doing the work that God desires them to do, there would be many more laborers in the field, and the demand for funds would be greatly increased. The conferences should feel a burden for the regions beyond their own borders. There are missions to be sustained in fields where there are no churches and no tithes, and also where the believers are new and the tithe limited. If you have means that is not needed after settling with your ministers in a liberal manner, send the Lord’s money to these destitute places.”—Ms 139, 1898; Manuscript Releases 1:182, 184.

“More and more we must come to realize that the means that come into the conference in the tithes and gifts of our people should be used for the support of the work not only in the American cities, but also in foreign fields. Let the means so zealously collected be unselfishly distributed. Those who realize the needs of mission fields will not be tempted to use the tithe for that which is not necessary.”—Ms 11, 1908; Manuscript Releases 1:192.

5-Los directores de departamentos de publicaciones

W. C. White wrote W. S. Lowry on May 10, 1912: “In many conferences in past years the question has arisen as to whether it was lawful and expedient to pay the State canvassing agent from the tithe. This matter has been discussed in Union and in General Conference councils, and our brethren feel clear in supporting the State agent from the tithe because the books are very effective preachers. Whenever this question has been brought to Mother, she has given her approval of the plan generally adopted by our people.”

6-Medicos misioneros (ministros y doctores)

“Some, who do not see the advantage of educating the youth to be physicians both of the mind and of the body, say that the tithe should not be used to support medical missionaries, who devote their time to treating the sick. In response to such statements as these, I am instructed to say that the mind must not become so narrowed down that it cannot take in the truth of the situation. A minister of the gospel, who is also a medical missionary, who can cure physical ailments, is a much more efficient worker than one who cannot do this. His work as a minister of the gospel is much more complete.”—Medical Ministry, 245.

7-Beneficios a Pastores retirados y sus familias

“Many workers have gone into the grave heartbroken, because they had grown old, and could see that they were looked upon as a burden. But had they been retained in the work, and given an easy place, with a whole or part of their wages, they might have accomplished much good. During their term of labor, these men have done double labor. They felt so heavy a burden for souls that they had no desire to be relieved of overwork. The heavy burdens borne shortened their lives. The widows of these ministers are never to be forgotten, but should, if necessary, be paid from the tithe.”—Ms 82, 1904; Manuscript Releases 1:189.

On February 24, 1911, E. R. Palmer wrote Ellen White describing the details of the newly adopted sustentation plan. He stated, “Each of our conferences contributes five percent of its tithes to the Sustentation Fund.” Ellen White responded:

“I was pleased to receive a letter from you, as one who has been appointed to act a part in the distribution of the sustentation fund…. It is right that sure plans be laid for the support of our aged workers, or the younger workers who are suffering because of overwork.”—Letter 10, 1911; MR 193.

8-Salario parcial para algunos colportores.

According to W. C. White, some colporteurs were provided a partial salary in Australia while Sister White was there. On June 11, 1902, he wrote the publishing director of the Lake Union Conference:

“I see no light whatever in any wholesale move for placing canvassers on the payroll, and taking their commissions. I have studied the proposition many times, and I see nothing in it but financial ruin to the conference, and demoralization to the canvassers.

“There are many places, however, where our canvassers ought to be, but which are too difficult to work; and I believe it would be greatly to the advantage of our work if faithful men and women were selected to go into our cities and other fields that are especially difficult, with the promise of two to three dollars per week to assist them in their living expenses during those times in their work when their commissions do not give them ample support. I have seen this plan followed with excellent results, and I believe in it most heartily.

“In the Australian Colonies we could not afford to support Bible workers on the old-fashioned plan; but we secured as many colporteurs as we could get to sell the Bible Echo, the Health Journal, and our smaller books, in the large cities, and we paid these workers from two to two and a half dollars a week each from the conference tithe to assist them in their expenses. I believe that it will be necessary to follow a plan similar to this in many difficult fields.”—W. C. White to J. B. Blosser, June 11, 1902.

9-Secretari@s y tesor@s de congregaciones grandes

C. F. McVagh, president of the Southern Union Conference, wrote W. C. White on October 24, 1912:

“Brethren Nicola, Hart, and others of the older brethren tell me that they distinctly remember that years ago Sister White said that the tithe collector and clerk of the Battle Creek church should be paid out of the tithe, and up to the time of the Haughey administration, I guess it is a fact that the Battle Creek church paid its clerk and treasurer out of the tithe, and then turned the balance over to the conference.”

In responding, W. C. White said his recollections were the same:

“My memory of the matter is in full harmony with the statements of Brother Nicola, Hart, and others. In the olden days, when the Battle Creek church was growing, it was found that unless the work of collecting the tithe was followed up regularly that the amount received was very much less than if the matter were followed up in a businesslike way by a collector who made the work his regular duty. We also found that this work demanded more time than it was right for us to ask any one, two, or three of the deacons to give to the matter, and it was thought by the church council that it would be good policy, and for the best interests of the tithe payers, and for the best interests of the conference, to have a good collector chosen and employed and paid a reasonable amount for his time.

“This plan, with the reasons therefore, was placed before Father

and Mother, and received their hearty approval. I cannot name the time or the place, nor can I repeat the words, but I am very positive that Mother gave her hearty approval to this plan, and it seems to me that the wisdom of the plan can be clearly discerned from the business standpoint, and that it should be maintained even though we may not find a written testimony bearing upon the subject.

“In years past there was no effort made to conceal from other churches the fact that Battle Creek managed its affairs in this way. Our brethren largely recognized that different methods must be followed in churches of different circumstances. I am glad to tell you that the St. Helena Sanitarium church employs a faithful tithe collector and pays for actual service done from the tithe. Should this plan be discontinued, I think the conference would lose from five to ten times as much as it paid to the collector. But we do not find that our smaller churches need to follow this plan or that they are brought into perplexity because this plan is followed in our very large churches.”—W. C. White to C. F. McVagh, October 31, 1912.

¿CITAS CONTRADICTORIAS?

“El diezmo ha sido puesto aparte con un propósito especial. No debe considerarse como un fondo para pobres. Debe dedicarse especialmente al sostén de los que predican el mensaje de Dios al mundo; y no hay que desviarlo de este propósito” (CMC 108).

Definitivamente el diezmo no es un fondo para pobres, si así fuera, todo el dinero se usara para los pobres y siempre tuviéramos pobres, nosotros quedaríamos barridos económicamente por tanta pobreza, y nuestra iglesia no tuviera fondos. Si todos los ricos compartieran su dinero con los pobres, la pobreza no se eliminaría y todos llegáramos a ser pobres. Esta nota no es contradictoria, el propósito primordial de los diezmos no son los pobres, sino la predicación del evangelio.

A pesar de que el propósito primordial de los diezmos no son los pobres, Dios hizo provisión para ellos con el tercer diezmo, éste es al tercer año y al sexto del ciclo de siete años:

28Al fin de cada tres años sacarás todo el diezmo de tus productos de aquel año, y lo guardarás en tus ciudades. 29Y vendrá el levita, que no tiene parte ni heredad contigo, y el extranjero, el huérfano y la viuda que hubiere en tus poblaciones, y comerán y serán saciados; para que Jehová tu Dios te bendiga en toda obra que tus manos hicieren. Deuteronomio 14

Dios ha dado instrucciones especiales para el uso del diezmo. No quiere que su obra se vea estorbada por la falta de recursos. Para evitar que la obra se haga en forma descuidada y se cometan errores, ha presentado claramente cuál es nuestro deber en relación con estos puntos. La porción que Dios se ha reservado no debe desviarse para ningún otro propósito que no sea el que él ha especificado. Que nadie se sienta con derecho a retener el diezmo para usarlo de acuerdo con su propio juicio. No deben usarlo con fines personales en caso de una emergencia, ni dedicarlo a un fin específico, aun en lo que consideren que es la obra del Señor. TPI 199.1

El diezmo tiene como propósito primordial la predicación del evangelio, según el libro de números capítulo 18, el diezmo es de los levitas, que son los laicos de la actualidad. El texto dice que no se tiene que desviar el diezmo a ningún otro propósito que no sea el especificado por Dios.

Lo que Dios especifico es lo siguiente:

21Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo de reunión.

26Hablarás a los levitas y les dirás: Cuando toméis los diezmos de los hijos de Israel que os he dado como vuestra heredad, vosotros presentaréis de ellos, como ofrenda mecida a Jehová, el diezmo de los diezmos… 28Así presentaréis también vuestra ofrenda a Jehová de todos los diezmos que recibáis de los hijos de Israel; se la daréis al sacerdote Aarón como ofrenda reservada a Jehová. Números 18

Dios desea que sus mayordomos sigan con exactitud las disposiciones divinas. No deben desvirtuar los planes de Dios efectuando alguna obra de caridad, haciendo una donación o dando una ofrenda cuando ellos, los agentes humanos, lo vean conveniente. Es un procedimiento muy pobre intentar mejorar los planes de Dios e inventar un substituto, y luego promediar las donaciones hechas como resultado de buenos impulsos ocasionales y compararlas con los requerimientos del Señor. Dios pide que todos respeten sus disposiciones. Ha dado a conocer su plan, y todos los que colaboran con él deben promover ese plan en lugar de atreverse a tratar de mejorarlo. TPI 199.3

Impresionante mensaje, si todos siguiéramos el consejo de la Biblia en dar los diezmos a los laicos estrictamente para la predicación del evangelio y todas las ofrendas para los sacerdotes, no existieran las discusiones que existen en día en cuanto al uso de los diezmos y las ofrendas.

El Señor instruyó a Moisés: “Y mandarás a los hijos de Israel que te traigan aceite puro de olivas machacadas, para el alumbrado, para hacer arder continuamente las lámparas”. Éxodo 27:20. Esta debía ser una ofrenda continua, para que la casa de Dios estuviera debidamente provista con lo que se necesitaba para su servicio. Su pueblo de la actualidad debe recordar que la casa de culto es propiedad del Señor y que se debe cuidar escrupulosamente. Pero los fondos para este fin no deben proceder del diezmo. TPI 199.4

Los diezmos no se usan para el mantenimiento de las iglesias, este mismo texto que es correcto en su esencia de debería de aplicar a todos los edificios administrativos de nuestra iglesia alrededor del mundo. De la misma manera que las iglesias dan una ofrenda extra para el mantenimiento de los templos, todos los trabajadores administrativos deberían de dar una ofrenda extra para mantener los edificios administrativos y no tocar los diezmos.

Si se siguiera la orden bíblica de entregar todas las ofrendas a los sacerdotes más el 1% de los diezmos no existiera el problema que existe ahora, ellos estarían en toda su libertad de usar esas ofrendas en todas las construcciones de los edificios administrativos, escuelas, hospitales, clínicas e iglesias, sin ningún problema.

Se me ha dado un mensaje muy claro y definido para nuestro pueblo. Se me ha pedido que les diga que están cometiendo un error al aplicar el diezmo a diversos objetivos que, aunque son buenos en sí mismos, no son los objetivos a los cuales el Señor ha dicho que debe dedicarse el diezmo. Quienes dedican el diezmo a esos fines, se están apartando de las disposiciones de Dios. El Señor juzgará esas cosas. TPI 200.1

Nuevamente, el diezmo tiene su destino, y es para pagar el trabajo religioso hecho por los levitas.

Alguien puede pensar que el diezmo se puede aplicar al sostenimiento de una escuela de iglesia. Otros pueden decir que los colportores debieran sostenerse con el diezmo. Pero se comete un grave error cuando se desvía el diezmo del objetivo para el cual se ha establecido, que es el sostén de los ministros. Debiera haber en la actualidad en el campo cien obreros bien capacitados donde ahora hay uno solo. TPI 200.2

Este texto posiblemente sea el texto cumbre, la última parte dice: Debiera haber en la actualidad en el campo cien obreros bien capacitados donde ahora hay uno solo. Estos obreros que menciona la hermana Elena son laicos 100%.

Para sus días, la iglesia no tenía ni escuelas, ni universidades para pastores, como las tenemos ahora. Todos los predicadores y encargados de iglesias eran laicos.

Si un hermano tenía capacidad espiritual y tomaban la responsabilidad de dirigir una iglesia, se les daba el título de ministro.

Por eso ella habla de capacitar, son los laicos los que se capacitan para que lleguen a ser obreros bíblicos, tienen el trabajo de diseminar el evangelio de puerta en puerta, parecido a lo que hacían los levitas del tiempo de Israel.

Al final, ni la Biblia, ni el espíritu de profecía se contradicen, la discusión de este tema brota como un resultado de hacer las cosas al revés de lo que Dios mandó. Dios ordenó para los levitas el diezmo y a los sacerdotes todas las ofrendas más el 1 % de los diezmos.

Con el 1% de los diezmos fácilmente pueden cubrir los salarios de los pastores y con las ofrendas todo tipo de gasto para el avance de la obra.

Si donde hay un obrero bíblico hubieran 100 la obra avanzara como Dios quiere que se haga.

LA BIBLIA NOS HABLA DE TRES DIEZMOS, UN DIEZMO POR AÑO REPETIDO EN SEIS AÑOS

EL PRIMER DIEZMO

SIRVE PARA PAGAR A LOS LEVITAS

21Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo de reunión.

26Hablarás a los levitas y les dirás: Cuando toméis los diezmos de los hijos de Israel que os he dado como vuestra heredad, vosotros presentaréis de ellos, como ofrenda mecida a Jehová, el diezmo de los diezmos… 28Así presentaréis también vuestra ofrenda a Jehová de todos los diezmos que recibáis de los hijos de Israel; se la daréis al sacerdote Aarón como ofrenda reservada a Jehová. Números 18

  

EL SEGUNDO DIEZMO

SIRVE PARA LA CELEBRACIÓN DE LAS FIESTAS RELIGIOSAS

17Ni comerás en tus poblaciones el diezmo de tu grano, de tu vino o de tu aceite, ni las primicias de tus vacas, ni de tus ovejas, ni los votos que prometieres, ni las ofrendas voluntarias, ni las ofrendas elevadas de tus manos; 18sino que delante de Jehová tu Dios las comerás, en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, y el levita que habita en tus poblaciones; te alegrarás delante de Jehová tu Dios de toda la obra de tus manos. 19Ten cuidado de no desamparar al levita en todos tus días sobre la tierra. Deuteronomio 12

EL TERCER DIEZMO

 SIRVE PARA AYUDAR A LOS MENESTEROSOS

28Al fin de cada tres años sacarás todo el diezmo de tus productos de aquel año, y lo guardarás en tus ciudades. 29Y vendrá el levita, que no tiene parte ni heredad contigo, y el extranjero, el huérfano y la viuda que hubiere en tus poblaciones, y comerán y serán saciados; para que Jehová tu Dios te bendiga en toda obra que tus manos hicieren. Deuteronomio 14

En nuestra iglesia, hay algunas personas que enseñan que el segundo y tercer diezmo eran diezmos temporales. Sostienen que estos dos diezmos cesaron cuando el pueblo de Israel fue llevado en cautiverio. A mi manera de ver, los diezmos no eran temporales, cesaron para con un pueblo que decidió no seguir a Dios y sus ordenanzas.

¿EL SEGUNDO Y TERCER DIEZMO ERAN DIEZMOS TEMPORALES?

La mayoría de las cosas espirituales en esta tierra son temporales: la oración, la confesión, el perdón de los pecados, el bautismo, la fe, la esperanza, entre otros, incluyendo los diezmos y las ofrendas. Cuando lleguemos al cielo ya no habrá necesidad de todos estos dones que usamos y necesitamos en la tierra.

La Biblia no dice si el segundo y el tercer diezmo eran temporales para el pueblo de Israel, si sabemos que cesaron cuando el pueblo de Israel fue llevado cautivo. Pero encontramos en el libro de Nehemias y Malaquias que hay una continuación del segundo y tercer diezmo. Es más, Malaquías es un mensaje de retribución a los sacerdotes de Israel por ser infiel al segundo y el tercer diezmo.

En la actualidad los judíos no devuelven sus diezmos, ellos sostienen que debido a que los levitas no existen más y no se saben quiénes son (Adolfo Hitler destruyó toda su historia y registros) el diezmo no se da más, ya que Dios estipuló los diezmos para los levitas.

La mayoría de ellos dan un diezmo parecido al diezmo del tercer año, un diezmo de caridad para ayudar a los necesitados, quedando libres a qué lugar donar esa ayuda, y sin ser supervisados por nadie en cuanto a esta devolución.

 

LOS DIEZMOS Y LAS OFRENDAS SON DEJADAS PARA QUE NOSOTROS RECIBAMOS PROSPERIDAD Y BENDICION, CUANDO LAS DEVOLVEMOS FIELMENTE.

Sobre todos los que se han consagrado a Dios como colaboradores con El, descansa la responsabilidad de custodiar los intereses de su causa y de su obra. Deben vivir la verdad que pretenden creer. Deben mantener constantemente a Cristo delante de sí como su modelo, y mediante sus buenas obras deben hacer que fluya la alabanza de los corazones hambrientos y sedientos del Pan de Vida. No solamente deben ministrar la necesidad espiritual de aquellos a quienes están tratando de ganar para Cristo, sino que deben suplir también sus necesidades temporales. Esta obra de misericordia y amor se presenta constantemente, y cumpliéndola fielmente los siervos de Dios han de mostrar lo que la verdad ha hecho por ellos. Deben ser fieles mayordomos, no solamente de la verdad del Evangelio sino de todas las bendiciones que Dios les ha dado. No solamente deben hablar palabras de simpatía, sino que con sus obras deben mostrar la realidad de su bondad y amor. Manuscrito 20, del 22 de abril de 1894, sin título. (Alza tus Ojos – 22 de Abril).

 Las contribuciones que se les exigían a los hebreos para fines religiosos y de caridad representaban por lo menos la cuarta parte de su renta o entradas. Parecería que tan ingente leva de los recursos del pueblo hubiera de empobrecerlo; pero, muy al contrario, la fiel observancia de estos reglamentos era uno de los requisitos que se les imponía para tener prosperidad.”Historia de los Patriarcas y Profetas, 566.

“Dios prueba a los hombres, a algunos de una manera, a otros de otra. Prueba a algunos derramando sobre ellos sus bienes en abundancia, y a otros retirándoles sus favores. Prueba a los ricos para ver si amarán a Dios, el Dador, y a su prójimo como a sí mismos. Cuando el hombre hace buen uso de estos bienes Dios queda complacido; puede confiarles luego mayores responsabilidades….  FV 172.2

Los que cultivan la benevolencia no solo están haciendo una buena obra para otros, y bendiciendo a los que reciben su buena acción, sino que también se están beneficiando a sí mismos, al abrir sus corazones a la benigna influencia de la verdadera benevolencia.

Cada rayo de luz que brilla sobre otros será reflejado sobre nuestros propios corazones. Cada palabra bondadosa y llena de compasión que se dirija a los dolientes, cada acción que tienda a producir alivio a los oprimidos, y cada don que supla las necesidades de nuestros prójimos, dado y realizado para la gloria de Dios, resultará en bendiciones para el dador. Los que trabajan de esta manera están obedeciendo una ley del cielo, y recibirán la aprobación de Dios. El placer que se siente al hacer bien a otros, imparte un resplandor a los sentimientos que se irradia por los nervios, estimula la circulación de la sangre e induce salud mental y física (Testimonios para la iglesia, t. 4, p. 60). 

 

UNA DE LAS MAS HERMOSAS CITAS DEL ESPÍRITU DE PROFECÍA

La dadivosidad es uno de los planes divinos para el crecimiento. El cristiano ha de ganar fortaleza fortaleciendo a otros. “El alma generosa será prosperada; y el que saciare, él también será saciado”. Proverbios 11:25. Esta no es meramente una promesa. Es una ley divina, una ley por la cual Dios establece que los arroyos de benevolencia fluyan continuamente de vuelta hacia su fuente, como las aguas de lo profundo se mantienen en constante circulación. En el cumplimiento de esta ley encontramos el secreto del crecimiento espiritual… (Dios nos Cuida – 26 de Agosto).

COMPRENDIENDO MALAQUIAS 3: 10

Malaquías no es nombre, es un titulo

Esta palabra “Malaquías” viene del hebreo malak (malaj) que significa mensajero, mal-’ā-ḵî. (malaji) significa -mi mensajero- La traducción de Malaki aterriza en el español como Malaquías.

Debido a que en la historia no existe nadie con este nombre se cree que la palabra es un título que se le da en este caso al mensajero que Dios ha escogido para entregar esta “carga” -profecía o encomienda- a los sacerdotes levitas de Israel.

Este párrafo se ha usado por muchas religiones casi como un texto de exigencia de los diezmos a la congregación, pero estudiándolo cuidadosamente nos damos cuenta de que la mayoría de veces se aplica este texto, fuera de su contexto.

¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas. Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado. 10 Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.  Malaquías 3

El libro de Malaquías no fue escrito para la congregación de ninguna iglesia, sino que fue escrita para los sacerdotes de Israel. La carta se dirige a Israel, a los levitas y a los sacerdotes, está dando la pauta para que no haya ninguna equivocación a quien es dirigida la misiva, dicho en otras palabras, es dirigida a los sacerdotes que son levitas, del pueblo de Israel.

El hijo honra al padre, y el siervo a su señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra? Y si soy señor, ¿dónde está mi temor? dice Jehová de los ejércitos a vosotros, oh sacerdotes, que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre? Malaquías 1

El capítulo 2 vuelve a recalcar que esta carga, o encomienda es para los sacerdotes de Israel

1 Ahora, pues, oh sacerdotes, para vosotros es este mandamiento. Si no oyereis, y si no decidís de corazón dar gloria a mi nombre, ha dicho Jehová de los ejércitos, enviaré maldición sobre vosotros, y maldeciré vuestras bendiciones; y aun las he maldecido, porque no os habéis decidido de corazón. Malaquías 2

Porque los labios del sacerdote han de guardar la sabiduría, y de su boca el pueblo buscará la ley; porque mensajero es de Jehová de los ejércitos. Mas vosotros os habéis apartado del camino; habéis hecho tropezar a muchos en la ley; habéis corrompido el pacto de Leví, dice Jehová de los ejércitos. Por tanto, yo también os he hecho viles y bajos ante todo el pueblo, así como vosotros no habéis guardado mis caminos, y en la ley hacéis acepción de personas. Malaquías 2

Los sacerdotes estaban haciendo varias cosas malas ante los ojos de Jehová, se estaban quedando con la mejor tajada de las ofrendas y los diezmos para ellos, y daban a Dios la parte inservible.

El hijo honra al padre, y el siervo a su señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra? Y si soy señor, ¿dónde está mi temor? dice Jehová de los ejércitos a vosotros, oh sacerdotes, que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre? En que ofrecéis sobre mi altar pan inmundo. Y dijisteis: ¿En qué te hemos deshonrado? En que pensáis que la mesa de Jehová es despreciable. Y cuando ofrecéis el animal ciego para el sacrificio, ¿no es malo? Asimismo cuando ofrecéis el cojo o el enfermo, ¿no es malo? Preséntalo, pues, a tu príncipe; ¿acaso se agradará de ti, o le serás acepto? dice Jehová de los ejércitos. Malaquías 1

Los sacerdotes recibían dos porciones, la primera era la décima parte de los diezmos (1%) que era entregado a ellos por los levitas, y la segunda porción eran las primicias, que era el primer fruto de la cosecha y los primogénitos de los animales.

La amonestación de Dios para los sacerdotes era que ellos estaban tomando el mejor ganado para ellos y el ganado inservible lo ofrecían a Dios en sacrificio.

En el libro de Levítico 27 encontramos una explicación de como se seleccionaban los animales que eran para  diezmos y ofrendas del templo:

32 Y todo diezmo de vacas o de ovejas, de todo lo que pasa bajo la vara, el diezmo será consagrado a Jehová. 33 No mirará si es bueno o malo, ni lo cambiará; y si lo cambiare, tanto él como el que se dio en cambio serán cosas sagradas; no podrán ser rescatados.34 Estos son los mandamientos que ordenó Jehová a Moisés para los hijos de Israel, en el monte de Sinaí.

Se contaba todo animal que pasaba bajo el cayado del pastor y todo número 10 le pertenecía al Señor. Ese animal no se cambiaba, y si era algún animal hermoso que el dueño lo cambiaba por otro de menor calidad, entonces los dos animales le pertenecían al Señor. Por este proceso de seleccionar animales, los sacerdotes recibían toda calidad de animales. De todos esos animales, ellos escogían los mejores para ellos, y los animales enfermos, ciegos y cojos eran ofrecidos a Dios en sacrificio, haciendo de esa manera despreciable la mesa del Señor.

Este pecado de los sacerdotes de Israel es el quebrantamiento del segundo diezmo de los Israelitas, éste era el diezmo que se daba el año segundo y quinto del ciclo de siete años:

17Ni comerás en tus poblaciones el diezmo de tu grano, de tu vino o de tu aceite, ni las primicias de tus vacas, ni de tus ovejas, ni los votos que prometieres, ni las ofrendas voluntarias, ni las ofrendas elevadas de tus manos; 18sino que delante de Jehová tu Dios las comerás, en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, y el levita que habita en tus poblaciones; te alegrarás delante de Jehová tu Dios de toda la obra de tus manos. 19Ten cuidado de no desamparar al levita en todos tus días sobre la tierra. Deuteronomio 12

Además de entregar lo inservible a Dios en sacrificio, tenían un segundo problema y era que se habían vuelto asalariados, ellos no hacían ningún trabajo para Dios, sino eran debidamente remunerados.

10 ¿Quién también hay de vosotros que cierre las puertas o alumbre mi altar de balde? Yo no tengo complacencia en vosotros, dice Jehová de los ejércitos, ni de vuestra mano aceptaré ofrenda.  Malaquías 1

Pero los acompañaba un tercer problema y era que estaban fastidiados con el trabajo del sacerdocio:

13 Habéis además dicho: ¡Oh, qué fastidio es esto! y me despreciáis, dice Jehová de los ejércitos; y trajisteis lo hurtado, o cojo, o enfermo, y presentasteis ofrenda. ¿Aceptaré yo eso de vuestra mano? dice Jehová. 14 Maldito el que engaña, el que teniendo machos en su rebaño, promete, y sacrifica a Jehová lo dañado. Porque yo soy Gran Rey, dice Jehová de los ejércitos, y mi nombre es temible entre las naciones. Malaquías 1

El capítulo 1 de Malaquías relata el problema de los sacerdotes, que en realidad consistía en quebrantar el segundo diezmo que se daba en el pueblo de Israel

El segundo capítulo de Malaquías se concentra en explicar las consecuencias que enfrentarán los sacerdotes si no escuchaban las amonestaciones del libro de Malaquías.

El tercer capítulo comenta la primera venida de Cristo a esta tierra y el quebrantamiento del tercer diezmo de parte de los sacerdotes.

Y el cuarto capítulo nos comenta la segunda venida de Cristo a esta tierra

A parte de quebrantar el segundo diezmo, los sacerdotes también quebrantaban el tercer diezmo:

¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas. Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado. 10 Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde. Malaquías 3

Este texto para comprenderlo bien lo compararemos a su original en hebreo y usaremos algunas versiones diferentes de Biblias.

Brenton’s Septuagint Translation

8Will a man insult God? for ye insult me. But ye say, Wherein have we insulted thee? In that the tithes and first-fruits are with you still. 9And ye do surely look off from me, and ye insult me. 10The year is completed, and ye have brought all the produce into the storehouses; but there shall be the plunder thereof in its house: open to you the torrents of heaven, and pour out my blessing upon you, until ye are satisfied.

8-¿Puede un hombre insultar a Dios? Ustedes me han insultado ¿En qué te hemos insultado? En que los diezmos y las primicias de los frutos aún están con ustedes. 9-y con firmeza apartan su mirada de mi y me insultan. 10-El año se ha completado, y aún no han traído todos los productos a los almacenes, por lo mismo habra saqueo en esta casa…

 Malaquías 3 – Biblia Kadosh Israelita Mesiánica

8 ‘¿Puede una persona insultar a Elohim? ° Sin embargo, ustedes me insultan. ° Pero preguntan: ¿Cómo te hemos insultado? En la décima parte y en los primeros frutos aun están con ustedes.

9 Ustedes ciertamente vuelven la vista de Mí, y me insultan.

10 El año ha terminado, y ustedes han traído todo el producto a los almacenes [18] pero habrá saqueo en esta casa, regresen ahora en Su Nombre,’ dice YAHWEH-HaElyon. ‘Miren si no abriré para ustedes las ventanas de inundación de los cielos ° y derramaré para ustedes una bendición ° hasta que estén satisfechos. °

En esta traducción, el número [18] que está después de la palabra -almacenes- en el versículo 10, se refiere a otros lugares de almacenamiento que no pertenecen al templo donde se tienen que traer los diezmos y las primicias.

Malaquías 3 – La Biblia Textual 3a Edición

8 ¿Robará el hombre a ’Elohim? ¡Pues vosotros me habéis robado! Pero decís: ¿En qué te hemos robado? ¡En los diezmos y en las ofrendas!°

9 ¡Me habéis maldecido con maldición,° porque vosotros, la nación toda, me estáis robando!

10 ¡Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento° en mi Casa! Y probadme luego en esto, dice YHVH Sebaot, si no os abro las ventanas de los cielos y derramo sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.

¿Por qué esta diferencia en las traducciones?

Reina Valera

Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado.

La Biblia Textual

9 ¡Me habéis maldecido con maldición,° porque vosotros, la nación toda, me estáis robando!

La versión de la -Biblia Textual- es la que da una explicación al pie de la página del porqué de la diferencia en la traducción del versículo 9 y esto es lo que ellos explican:

Ellos explican que los sorefim o escribas hicieron un cambio del original porque consideraron demasiada ofensiva la expresión “me habéis maldecido con maldición” pusieron una nota de la enmienda del porqué del cambio al pie de la traducción y es así como se descubre esta mala traducción.

Desde el siglo sexto hasta el décimo después de Cristo, aparece el texto masorético, fue un monumental trabajo hecho tanto en Babilonia como en Palestina por los escribas conocidos desde este entonces hasta acá como los escribas masoretas. Este trabajo consistió en agregar vocales a la escritura hebrea, que hasta estos días no poseía vocales sino solo consonantes.

Entonces el texto de Malaquías 3:9 ha recibido dos cambios, el primero fue por los escribas que consideraron demasiada ofensiva la expresión, y el segundo cambio fue hecho por los escribas masoretas que hicieron un ligero cambio en las consonantes (ne en vez de me) convirtiendo en activa la palabra “malditos” que estaba en forma pasiva “maldecidos”  De los textos masoréticos es donde han sido traducidas el 99% las versiones modernas de la Biblia

La Biblia de los setenta fue traducida del original hebreo al griego alrededor del año 250 antes de Cristo y ellos conservaron el original.

Para la traducción de la versión de los Setenta, o Septuaginta se reunieron 72 escribas y cada uno de ellos hizo su propia traducción. Al final se compararon las 72 traducciones y se escogieron las palabras o frases más comunes que usaron los traductores.  

La versión de la -Biblia Textual- termina su explicación con la siguiente nota textual:

«Ahora bien, observando cómo este y otros pasajes que tocan el tema del diezmo están siendo utilizados en la perversa comercialización del evangelio, y en consideración a las circunstancias por las cuales actualmente transita la iglesia de Dios, hemos sentido la urgencia de explicar este sencillo, pero incomprensible pasaje de la escritura.»

Malaquías 3: 9 y 10 se aplica usualmente a la congregación, pero realmente se tiene que aplicar a los sacerdotes que están transgrediendo el tercer diezmo, ¿De dónde sacamos esta conclusión? De Malaquías 3: 5 que dice:

Versión Biblia Textual 5 ‘Entonces me acercaré a ti en juicio; ° y seré un testigo que tamiza ° contra hechiceros, ° y contra la adúltera, ° y contra aquellos que juran falsamente por Mi Nombre; ° contra aquellos que retienen los jornales; ° y aquellos que oprimen a la viuda y afligen al huérfano; ° contra aquellos que le roban al extranjero de sus derechos ° y no me temen a mí,’ dice YAHWEH-HaElyon. °

 

EL TERCER DIEZMO

SIRVE PARA AYUDAR A LOS MENESTEROSOS

28Al fin de cada tres años sacarás todo el diezmo de tus productos de aquel año, y lo guardarás en tus ciudades. 29Y vendrá el levita, que no tiene parte ni heredad contigo, y el extranjero, el huérfano y la viuda que hubiere en tus poblaciones, y comerán y serán saciados; para que Jehová tu Dios te bendiga en toda obra que tus manos hicieren. Deuteronomio 14

En resumen: Dios enjuiciará de acuerdo con Malaquías 3 a los sacerdotes que no han traído al templo el diezmo que pertenece a los huérfanos, a las viudas y a los extranjeros. Cuando Dios dice que tiene que haber alimentos en su casa es para que coman los pobres de Israel y no los sacerdotes, la condenación para ellos es que ya termino ese año (el tercero o el sexto) y ellos mantienen en sus almacenes lo que tendría que estar en el templo para alimentar a los pobres. Debido a la escases, les anuncia que la gente saqueará las cámaras del templo para obtener un poco de alimento.

Esta es la explicación de Malaquías visto desde el punto de vista de su idioma original.  

El libro de Malaquías se calcula que fue escrito en el año 450 antes de Cristo, alrededor de 100 años después que los judíos regresaron del exilio de babilonia.

INFORME FINANCIERO MUNDIAL DEL AÑO 2020

DIEZMOS MUNDIAL

$2, 398, 079, 593

2 BILLONES 398 MILLONES CON 79, 503 DOLLARES

OFRENDAS DE MISIONES INCLUYENDO ESCUELA SABÁTICA

$66, 544, 458.

66 MILLONES Y MEDIO

OTROS FONDOS GENERALES

$16,932

FONDOS DE LAS INTRADIVISIONES

$65, 583,757

65 MILLONES Y MEDIO

RECOLECCIÓN

$5, 606,696

MÁS DE 5 MILLONES Y MEDIO

FONDO PROVENIENTE DE LAS OFRENDAS DE LA IGLESIA

$729, 824, 572.

CASI LOS 730 MILLONES

TOTAL DE DINERO RECIBIDO EN EL AÑO 2020

$3, 273, 571,110

3 BILLONES CON 273 MILLONES Y 571,110 DOLARES

DICHO EN OTRAS PALABRAS 3,273 MILLONES Y MEDIO

ESTE ES EL ENLACE DONDE USTED PUEDE VER TODAS LAS ESTADISTICAS MUNDIALES DE NUESTRA IGLESIA HASTA EL ANO 2021 -ESTÁ EN INGLES, PERO ES FÁCIL DE ENTENDER-

Haz clic para acceder a ASR2021.pdf

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