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LECCIÓN 5 – JESÚS LLEGA A LA COMUNIDAD – PARA EL 30 DE JULIO DE 2016

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«El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; A predicar el año agradable del Señor» Autor Desconocido.


Los pensamientos pertenecientes a “Escuela Sabática para Maestros” no representan la postura oficial de la Iglesia Adventista del Séptimo Día local, regional o mundial. Este es el trabajo,  esfuerzo y pensamiento de un hermano laico de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, cuyo principal objetivo es proveer extra información a la Lección de Escuela Sabática, para que le sea de ayuda al maestro para poder entender y explicar de una manera mas clara y nutrida la lección de Escuela Sabática. Tratamos de no presentar temas controversia-les, ni polémicos y evitamos las ideas que promueven el fanatismo y el extremismo en nuestra iglesia. Si nuestro comentario no es de su ayuda o de su agrado, le pedimos por favor, que sencillamente lo descarte. Cualquier comentario, pregunta o sugerencia, por favor escriba a elhermanotony@gmail.com


Letra Negra: Lección de Escuela Sabática

Letra Ocre: Lección de Escuela Sabática 

Letra Roja: La Biblia

Letra Café: Nuestro comentario

Letra Azul: Espíritu de profecía


Lección 5: Para el 30 de julio de 2016

JESÚS LLEGA A LA COMUNIDAD

Sábado 23 de julio___________________________________

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Lucas 4:16-18; 10:25-37; Mateo 5:13; Isaías 2:8; Juan 4:35-38; Mateo 13:3-9.

PARA MEMORIZAR:

“Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo” (Mat. 4:23).

ROBERT L. STEVENSON, autor de La isla del tesoro, fue un muchacho enfermizo que no asistió mucho a la escuela. Sus padres contrataron a un maestro y a una nodriza para que lo ayudaran. Una noche, cuando su nodriza se asomó a su dormitorio, lo encontró mirando por la ventana, y lo mandó a la cama.

Robert le dijo: “Venga, y mire lo que estoy viendo”.

La nodriza se acercó a la ventana. Allí abajo, en la calle, había un farolero que encendía las luces de la calle. “Mire”, dijo Robert, “¡un hombre está haciendo agujeros en la oscuridad!”−Margaret Davis, Fear Not! Is There Anything Too Hard for God?, p. 332.

Hemos aprendido lo que dice el Antiguo Testamento acerca de ayudar a los necesitados. Ahora veremos que su enseñanza es que debemos ser “la luz del mundo” (Mat. 5:14), y así reflejar a Jesús, la verdadera Luz (Juan 8:12). Las enseñanzas de Jesús en su ministerio dan instrucciones poderosas acerca de cómo nosotros, por medio de él, podemos hacer agujeros en la oscuridad.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Cristo recorría “toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el Evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo” (Mateo 4:23). Predicaba en las sinagogas porque así podía llegar hasta las muchedumbres que se reunían en ellas. Luego salía y predicaba junto al mar y en las grandes vías por donde viajaba la gente. Las verdades preciosas que él tenía que proclamar no debían limitarse únicamente a las sinagogas…

Cristo podía ocupar el lugar más encumbrado entre los maestros más destacados de la nación judía. Pero él prefirió llevar el Evangelio a los pobres. Fue de un lugar a otro a fin de que los que estaban en los caminos y en los vallados pudieran oír el Evangelio de la verdad. Trabajó en la forma en que desea que trabajen sus obreros de la actualidad. Junto al mar, en la ladera de la montaña y en las calles de la ciudad, se oía su voz que explicaba las Escrituras del Antiguo Testamento. Sus explicaciones eran tan diferentes de las explicaciones de los escribas y los fariseos, que atraían la atención de la gente. Enseñaba como uno que tenía autoridad, y no como los escribas. Proclamaba el Evangelio con claridad y poder (El evangelismo, {Ev}, pp. 44, 45).

Este mundo es un vasto lazareto, pero Cristo vino para sanar a los enfermos y proclamar liberación a los cautivos de Satanás. El era en sí mismo la salud y la fuerza. Impartía vida a los enfermos, a los afligidos, a los poseídos de los demonios. No rechazaba a ninguno que viniese para recibir su poder sanador. Sabía que aquellos que le pedían ayuda habían atraído la enfermedad sobre sí mismos; sin embargo no se negaba a sanarlos. Y cuando la virtud de Cristo penetraba en estas pobres almas, quedaban convencidas de pecado, y muchos eran sanados de su enfermedad espiritual tanto como de sus dolencias físicas. El Evangelio posee todavía el mismo poder, y ¿por qué no habríamos de presenciar hoy los mismos resultados?

Cristo siente los males de todo doliente. Cuando los malos espíritus desgarran un cuerpo humano, Cristo siente la maldición. Cuando la fiebre consume la corriente vital, él siente la agonía. Y está tan dispuesto a sanar a los enfermos ahora como cuando estaba personalmente en la tierra. Los siervos de Cristo son sus representantes, los conductos por los cuales ha de obrar. El desea ejercer por ellos su poder curativo (Exaltad a Jesús, {EJ}, p. 252).

Todos debemos llegar a ser testigos de Jesús. El poder social, santificado por la gracia de Cristo, debe ser aprovechado para ganar almas para el Salvador. Vea el mundo que no estamos egoístamente absortos en nuestros propios intereses, sino que deseamos que otros participen de nuestras bendiciones y privilegios. Dejémosle ver que nuestra religión no nos hace faltos de simpatía ni exigentes. Sirvan como Cristo sirvió, para beneficio de los hombres, todos aquellos que profesan haberle hallado. Nunca debemos dar al mundo la impresión falsa de que los cristianos son un pueblo lóbrego y carente de dicha.

Si somos corteses y amables en casa, nos acompañará el sabor de una disposición placentera cuando nos ausentemos del hogar. Si manifestamos tolerancia, paciencia, mansedumbre y fortaleza en el hogar, podremos ser una luz para el mundo (El hogar cristiano, {HC}, p. 389).

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Lección 5 // Domingo 24 de julio_________________________

LA DECLARACIÓN DE MISIÓN DE JESÚS

Jesús, el joven rabí de Nazaret, había llegado a ser muy popular en la región de Galilea (Luc. 4:15). Cuando hablaba, “la gente se admiraba de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas” (Mat. 7:28, 29). Un sábado, cuando le dieron el rollo de Isaías para leer, Jesús se concentró en los primeros dos versículos de Isaías 61, y se detuvo en mitad de la oración antes de la frase “y el día de venganza del Dios nuestro” (Isa. 61:2).

Lee Lucas 4:16 al 19. ¿Dónde escuchamos esas palabras antes? (Ver Isa. 61:1, 2). ¿Qué proclamaba Jesús al leer estos textos?

Lucas 4:16-19

16 Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer. 17 Y se le dio el libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito: 18 El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; 19 A predicar el año agradable del Señor.

Isaías 61:1-2

1 El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados;

Como ya vimos, la frase “el año de la buena voluntad [del favor del Señor, NVI] de Jehová” identifica el año del jubileo (ver Lev. 25). En esta visita a Nazaret, Jesús lee un pasaje mesiánico de la Escritura y asegura a sus oyentes que “hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros” (Luc. 4:21). En este sermón se revela cómo el Ungido predica buenas noticias a los pobres, libera a los prisioneros, da vista a los ciegos, suelta a los oprimidos y restaura el jubileo. Esta lista describe bien su ministerio terrenal, que se concentró en enseñar, sanar y ministrar, especialmente a los necesitados.

¿Por qué Jesús no completó la lectura de la oración de Isaías 61:2 que estaba leyendo?

a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados;

Tal vez Jesús se detuvo antes de la frase “el día de venganza del Dios nuestro” porque no quería que su ministerio estuviera asociado con el concepto corriente de que el Mesías vendría para dirigir los ejércitos que vencerían a los opresores de Israel. Había un falso concepto que impedía que muchos de sus conciudadanos lo vieran a él, y su ministerio, por lo que realmente era. En lugar de ello, Jesús se concentró en lo que haría por los necesitados sin importar la situación política de su tiempo.

¿Qué revela que Jesús anunciara su ministerio de ese modo? Es decir, ¿qué nos dice el énfasis que puso en la obra práctica que haría?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

En el capítulo 4 de Lucas encontramos a Jesús predicando en dos sinagogas diferentes, en dos sábados diferentes, con dos experiencias totalmente diferentes. En el versículo 16 lo encontramos en la sinagoga de Nazareth, donde después de su sermón fue tomado airadamente por los feligreses y fue llevado al monte de la precipitación para ser despeñado. Al siguiente sábado lo encontramos en la sinagoga de Capernaúm obrando milagros en día Sábado.

Los dos sábados son totalmente diferentes; en Nazareth la congregación se quería deshacer de él a través del asesinato y en Capernaum encontramos una congregación que ruega a Jesús a que no los abandone, ruegan a Jesús para que él se quede allí con ellos en Capernaum: 43Pero él les dijo: Es necesario que también a otras ciudades anuncie el evangelio del reino de Dios; porque para esto he sido enviado.

Vamos a hablar del primer sábado de Jesús de éste capítulo16 de Lucas

Todos estaban en la sinagoga en ese día Sábado; desde el más alto dirigente hasta el más humilde adorador, estaban reunidos para el servicio de «Escuela Sabática» y «el culto divino», el predicador de ese día era Jesús. 

Estaban admirados por la elocuencia de Jesús, estaban impresionados por su conocimiento acerca de Dios y de las Sagradas Escrituras y estaban extasiados por la hermosa exposición del sermón. Era un servicio religioso solemne y muy hermoso de escuchar y participar de el.

Pero el sermón de Jesús tomó una dirección equivocada a los ojos de ellos, Jesús dijo en su sermón que uno de los profetas más grandes de Israel como lo fue Elías no fue mandado a ninguna viuda de Israel, sino a la viuda de Sarepta, que era de otra nación, en pocas palabras la viuda era gentil.

También hablo de Elíseo en el sermón: Elíseo no curó los miles de  leprosos que habían en Israel, sino a un gentil de Siria, que era leproso, y su nombre era Naamán. Los de Nazareth percibieron que estaban siendo comparados con los abominables israelitas que vivieron en el tiempo del pecaminoso rey Acab y la reina Jesabel. 

Jesús acababa de perforar el orgullo de ellos, además las credenciales que presentó de su ministerio, no fueron del agrado de ellos, cuando Jesús les dijo: «El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos;»

Este sermón casi le cuesta la vida a Jesús: 28Al oír estas cosas, todos en la sinagoga se llenaron de ira; 29y levantándose, le echaron fuera de la ciudad, y le llevaron hasta la cumbre del monte sobre el cual estaba edificada la ciudad de ellos, para despeñarle. Lucas 4

Los humildes y quebrantados de corazón serían los que podrían recibir al Maestro.

Los judíos que estaban ese sábado en la sinagoga, habían entendido la conclusión del sermón de Jesús, ellos no podían ser alimentados espiritualmente y tampoco podían recibir sanación tanto espiritual como física, si no se humillaban y aceptaba a Jesús como hijo de Dios y se sometían a El.

La región de Nazaret era montañosa, realmente la ciudad de Nazaret estaba situada en medio de dos montañas. El lugar donde intentaron despeñar a Jesús, aún se conoce y se identifica el día de hoy, se ha convertido en un lugar turístico para el mundo cristiano, y es llamado: «El Monte de la Precipitación.» Se encuentra localizado a una corta distancia del sur de Nazaret.

Los judíos no tenían derecho a tomar la vida de nadie bajo ninguna circunstancia u ocasión, y mucho menos de una manera irregular ó furiosamente. Quitarle la vida a una persona a través del despeñamiento, no estaba contemplado en las reglas, estatutos y leyes de la sociedad judía.

Las cuatro maneras legales para el mundo judío de castigar a una persona con la pena capital era: 1-Apedreamiento, 2-Estrangulamiento, 3-Fuego (quemado), 4-Con la espada.

La única vez, que registra la Biblia, que los judíos usaron éste método de muerte, lo encontramos en 2 de Crónicas 25: 11 “Y Amasías se fortaleció, y al frente de su pueblo fue al valle de la Sal y mató a diez mil de los hijos de Seir. 12 También los hijos de Judá capturaron vivos a diez mil y los llevaron a la cumbre de la peña, los echaron abajo desde la cumbre de la peña y todos fueron despedazados.…” El despeñamiento era una costumbre muy practicada por los pueblos paganos vecinos de Israel, pero nunca por la nación hebrea.

Hay que tomar en cuenta que ningún tipo de castigo ó sentencia se llevaba a cabo ó se ejecutaba en día sábado.

Olvidando la santidad del día sábado, llenos de odio, tomaron a Jesús fuera de la sinagoga con la idea de asesinarlo. Estos eran sus amigos, persona respetables de la ciudad, fieles y activos miembros de la iglesia: ¿Quién podía creer esto? Recientemente los pudimos contemplar a todos ellos en la sinagoga cantando las dulces alabanzas de Sión, y estudiando la Sagradas Escrituras; ¿A quién se le pudo imaginar que detrás de los hermosos ropajes especiales que la congregación usaba para el día sábado, se encontraba una congregación con corazones asesinos?

¿Qué aprendemos de esto?

a-El aplauso popular tiene muy poco valor, por no decir nada.

b- Que la mejor persona que nos profesa su amistad, se puede volver en nuestro peor enemigo por cualquier circunstancia.

c- Que la gente, alocadamente pierden la razón y la cordura, cuando se les presenta una verdad contundente.

d- Que nos podemos convertir en una agente de Satanás, si no permitimos que la gracia de Jesús nos transforme y nos alcance.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Jesús estaba delante de la gente como exponente vivo de las profecías concernientes a él mismo. Explicando las palabras que había leído, habló del Mesías como del que había de aliviar a los oprimidos, libertar a los cautivos, sanar a los afligidos, devolver la vista a los ciegos y revelar al mundo la luz de la verdad. Su actitud impresionante y el maravilloso significado de sus palabras conmovieron a los oyentes con un poder que nunca antes habían sentido. El flujo de la influencia divina quebrantó toda barrera; como Moisés, contemplaban al Invisible. Mientras sus corazones estaban movidos por el Espíritu Santo, respondieron con fervientes amenes y alabaron al Señor.

Pero cuando Jesús anunció: “Hoy se ha cumplido esta Escritura en vuestros oídos,” se sintieron inducidos repentinamente a pensar en sí mismos y en los asertos de quien les dirigía la palabra. Ellos, israelitas, hijos de Abrahán, habían sido representados como estando en servidumbre. Se les hablaba como a presos que debían ser librados del poder del mal; como si habitasen en tinieblas, necesitados de la luz de la verdad. Su orgullo se ofendió, y sus recelos se despertaron. Las palabras de Jesús indicaban que la obra que iba a hacer en su favor era completamente diferente de lo que ellos deseaban. Tal vez iba a investigar sus acciones con demasiado detenimiento. A pesar de su meticulosidad en las ceremonias externas, rehuían la inspección de aquellos ojos claros y escrutadores (El Deseado de todas la gentes, {DTG}, p. 204).

La separación del mundo, en obediencia a la orden divina, ¿nos inhabilitará para la obra que el Señor nos ha dejado? ¿Nos impedirá hacer el bien a los que nos rodean? No.

Cuanto más firme sea nuestro asidero en el cielo, tanto mayor será nuestro poder para ser útiles. Debemos estudiar el Modelo, para que el espíritu que habitó en Cristo pueda morar en nosotros. Al Salvador no se lo halló entre los eminentes y honorables del mundo. No empleó su tiempo entre los que buscaban su propia comodidad y deleite. Trabajó para ayudar a los que necesitaban ayuda, para salvar a los perdidos y a los que perecían, para levantar a los caídos, para romper el yugo de opresión de los que estaban en cautiverio, para sanar a los afligidos y hablar palabras de simpatía y consolación a los angustiados y tristes. Se nos pide que sigamos este ejemplo. Cuanto más participemos del espíritu de Cristo, tanto más buscaremos hacer por nuestros semejantes. Bendeciremos al necesitado y confortaremos al afligido (En lugares celestiales, {ELC}, p. 312).

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Lunes 25 de julio // Lección 5___________________________

AMA A TU PRÓJIMO

“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente, y a tu prójimo como a ti mismo” (Luc. 10:27).

Lee Lucas 10:25 al 37. ¿Qué mensaje se nos da aquí con respecto al tema de ayudar a los necesitados?

25 Y he aquí un intérprete de la ley se levantó y dijo, para probarle: Maestro, ¿haciendo qué cosa heredaré la vida eterna? 26 Él le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo lees? 27 Aquél, respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo. 28 Y le dijo: Bien has respondido; haz esto, y vivirás. 29 Pero él, queriendo justificarse a sí mismo, dijo a Jesús: ¿Y quién es mi prójimo? 30 Respondiendo Jesús, dijo: Un hombre descendía de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de ladrones, los cuales le despojaron; e hiriéndole, se fueron, dejándole medio muerto. 31 Aconteció que descendió un sacerdote por aquel camino, y viéndole, pasó de largo. 32 Asimismo un levita, llegando cerca de aquel lugar, y viéndole, pasó de largo. 33 Pero un samaritano, que iba de camino, vino cerca de él, y viéndole, fue movido a misericordia; 34 y acercándose, vendó sus heridas, echándoles aceite y vino; y poniéndole en su cabalgadura, lo llevó al mesón, y cuidó de él. 35 Otro día al partir, sacó dos denarios, y los dio al mesonero, y le dijo: Cuídamele; y todo lo que gastes de más, yo te lo pagaré cuando regrese. 36 ¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo del que cayó en manos de los ladrones? 37 Él dijo: El que usó de misericordia con él. Entonces Jesús le dijo: Ve, y haz tú lo mismo.

El experto en la Ley comprendió que todos los Mandamientos giran alrededor de amar a Dios con todo lo que tienes, y amar a tu prójimo como a ti mismo. Queda la pregunta que debemos contestar: “¿Quién es mi prójimo?”

En el tiempo de Cristo, el pensamiento generalizado era que había que favorecer a los propios como prójimos, y relegar a todos los demás como extraños. Este experto en la Ley buscó que Jesús clarificara el tema. La parábola que contó Jesús revela una perspectiva totalmente distinta. Nuestro prójimo es cualquiera que encontremos con necesidades. Ser un prójimo es atender las necesidades de un prójimo. El sacerdote y el levita estaban demasiado preocupados por no contaminarse y por proteger sus piadosos deberes de ser contaminados. Era una manera conveniente el usar su religión como una excusa para no tener que morir al yo a fin de ayudar a alguien que, muy probablemente, nunca podría devolverles el servicio.

En contraste, el samaritano vio a este herido “extraño” y “enemigo” como su prójimo, y atendió misericordiosamente sus necesidades en vez de las propias. El punto es que, en lugar de preguntar: “¿Quién es mi prójimo?”, debemos preguntar: “¿Quién será un prójimo para los oprimidos y pisoteados?” No importa quién sea esa persona: debemos ayudar al necesitado, y punto.

“Dios no reconoce ninguna distinción por causa de la nacionalidad, la raza o la casta. Es el Hacedor de toda la humanidad. Todos los hombres son una familia por la creación, y todos son uno por la redención. Cristo vino para demoler todo muro de separación, para abrir todo departamento del Templo, para que cada alma pudiese tener libre acceso a Dios. Su amor es tan amplio, tan profundo, tan completo que penetra por doquiera” (PVGM 318).

¿Qué prejuicios podrían estorbarte para que puedas ser el prójimo que debes ser?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

Aquí encontramos una relación entre el amor y la ley de Dios. Los dos grandes mandamiento de la Biblia, requieren amor, amor para Dios y amor para el hombre; y la manera en que podemos poner en práctica el amor es obedeciendo los mandamientos de Dios; el premio que Dios ofrece en éste pedido y promesa, es la vida eterna

Todos los hombres en todas sus variedades y estados, tiene que ser reconocido como nuestro «prójimo» y «hermano». Los prejuicios de nacionalidad, color, lengua, y religión, tienen que ser hechos a un lado para dar cabida a la caridad.

Así como es nuestra relación con Dios, así será nuestra relación con nuestro prójimo; ese es un termómetro que no se equivoca. El propósito de ésta parábola es mostrarnos como trabaja el verdadero amor.

En la parábola del buen samaritano; Dios nos recuerda que vivimos en un mundo lleno de aflicciones y desgracias, encontramos pobrezas, dolor y aflicciones y muchas veces el que los padece no es responsable directamente por su situación, hay muchas aflicciones causadas por la pecaminosidad de otros.

Otra de las cosas que tenemos que recordar es que hay muchas personas que por diversas circunstancias, sus vidas están expuestas al sufrimiento y a la muerte más que otros. Por ejemplo, as personas que trabajan en el mar y en las minas, están más expuestas a los sufrimientos y a la muerte, que otros.

Si pensamos como humanos, llegamos a la conclusión que no es conveniente ser buenos. Una manera libre y fácil de vivir es evitando las buenas obras, cada vez que somos buenos, va en contra de nuestra propia conveniencia y cada vez que nos toca hacer el bien, siempre somos llevado al auto sacrificio.

Las manos de aquel que cuida un rosal, son constantemente laceradas y heridas por las espinas de la planta. En la vida espiritual, todos somos llamados al servicio de nuestro prójimo, aunque éste trabajo no sea de nuestra predilección. El verdadero amor, no pregunta, no duda, no tiene miedo, no se tarda y siempre está dispuesto al sacrificio.

Otra cosa importante para hacer notar en ésta parábola es la diferencia entre el doctor de la ley y el buen samaritano. El doctor de la ley era un Israelita ortodoxo, conocía y aplicaba la ley con mucha precisión y certeza, pero le faltaba la práctica. Hay muchos de nosotros que aprobamos, conocemos la ley y la enseñamos muy bien, pero no la guardamos. En pocas palabras tenemos la verdad pero no vivimos la verdad como tendríamos que hacerlo.

El doctor de la ley necesitaba el amor que caracterizaba al buen samaritano, para ser completo en la piedad y la bondad. La verdad sin amor, no sirve para nada, pero la verdad revestida del amor llena los requerimientos de la ley, y es una vida cristiana práctica.

El levita y el sacerdote pudieron encontrar buenas escusas para no ayudar al herido;

-El sol se ocultaría pronto

-El camino era solitario y peligroso aún de día

-No estudiaron medicina para curar las heridas de una persona

-El hombre estaba medio muerto

-Si el herido moría en sus manos pudieran ser culpados de asesinato

-Los ladrones pudieran regresar a cualquier momento

Todas éstas son buenas escusas, y mientras encontramos buenas escusas, el mundo que sufre no es socorrido, los errores del mundo no son corregidos y el pecador que perece no es rescatado.

Por el otro lado encontramos a un samaritano, que no tiene nada que ver con la religión judía, en otras palabras, posiblemente es una persona ignorante de las normas y conducta de la vida cristiana, el buen samaritano era una persona que no tenía la verdad en su esencia, pero tenía una vida llena de rectitud y amor.

El buen samaritano es un modelo para aquellos que ayudan a su prójimo: El ayudó sin esperar recibir una recompensa ó ser repagado por lo que gastó; ayudó a un verdadero extraño, ayudó a un enemigo y ayudó a uno que no era de su religión.

Oberlin nació en el año 1740 y fue un pastor de una iglesia protestante en Waldbach,  Alemania. Era un pastor que vivía una vida  espiritual práctica; entre sus obras estaban las de construir puentes, hacer caminos a través de los valles, mejorar las viviendas, ayudar la ciencia y el arte, fundar bibliotecas, mejorar el sistema de agricultura, fundar escuelas primarias, encima practicaba la medicina, fundó un banco de ahorro y préstamos, e introdujo la manufactura del algodón en la comunidad donde él vivía. Solía predicar sus sermones en francés y alemán. A su muerte en 1826, fue enterrado con muchos honores y con mucho afecto por aquellos que lo conocieron,

Cuenta la historia que en cierta ocasión Orbelin estaba viajando de Strabourg, era invierno, el suelo se encontraba completamente cubierto de nieve y los caminos eran casi impasables. Orbelin había alcanzado la mitad de su camino, pero ya no podía más, estaba extremadamente cansado y no podía avanzar más. Se arrodilló y encomendó su vida a Dios, y esperó a sentir el sueño de la muerte. El sueño es el primer síntomas de aquellos que muere de hipotermia ó frío.

No supo cuanto tiempo había transcurrido, despertó cuando un fornido hombre lo arrastraba en los brazos hasta su carreta para darle atención. Después que le dio alimentos y un poco de vino, la vida le volvió a Oberlin lentamente. El carretero lo llevó a la villa más cercana para que continuara recibiendo ayuda.

Orbelin estaba profundamente agradecido con el carretero, por la obra que había hecho con él, y no paraba de agradecer al carretero por su obra.

Llegó el momento en que Orbelin le ofreció dinero, y el carretero le dijo: -Es deber de los humanos ayudar a nuestro prójimo- y -además- le dijo el carretero, -es casi una ofensa ofrecer dinero a una persona que ha hecho una obra de ésta naturaleza- Orbelin asintió con la cabeza y le dijo al carretero: -al menos dime tu nombre, para que cuando ore, te pueda llevar en oraciones de agradecimiento a Dios.- 

El carretero le respondió -Ya veo que eres ministro del evangelio- ¿Me podrías decir cual era el nombre del buen samaritano? preguntó el carretero a Orbelín; -no lo dice la Biblia- replicó Orbelin.

-Mientras no me puedas decir cual fue el nombre del buen samaritano, déjame mantener mi nombre en secreto-  mientras le decía éstas palabras, arreaba sus bestias y desaparecía por la foresta con la sonrisa de la satisfacción en su rostro.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Mediante la historia del buen samaritano, Jesús pintó un cuadro de sí mismo y de su misión. El hombre había sido engañado, estropeado, robado y arruinado por Satanás, y abandonado para que pereciese; pero el Salvador se compadeció de nuestra condición desesperada. Dejó su gloria, para venir a redimirnos. Nos halló a punto de morir, y se hizo cargo de nuestro caso. Sanó nuestras heridas. Nos cubrió con su manto de justicia. Nos proveyó un refugio seguro e hizo completa provisión para nosotros a sus propias expensas. Murió para redimirnos. Señalando su propio ejemplo, dice a sus seguidores: “Esto os mando: Que os améis los unos a los otros.” “Como os he amado, que también os améis los unos a los otros.”

La pregunta del doctor de la ley a Jesús había sido: “¿Haciendo qué cosa poseeré la vida eterna?” Y Jesús, reconociendo el amor a Dios y al hombre como la esencia de la justicia, le había dicho: “Haz esto, y vivirás.” El samaritano había obedecido los dictados de un corazón bondadoso y amante, y con esto había dado pruebas de ser observador de la ley. Cristo le ordenó al doctor de la ley: “Ve, y haz tú lo mismo.” Se espera que los hijos de Dios hagan, y no meramente digan. “El que dice que está en él, debe andar como él anduvo.”

La lección no se necesita menos hoy en el mundo que cuando salió de los labios de Jesús. El egoísmo y la fría formalidad casi han extinguido el fuego del amor y disipado las gracias que podrían hacer fragante el carácter. Muchos de los que profesan su nombre han perdido de vista el hecho de que los cristianos deben representar a Cristo. A menos que practiquemos el sacrificio personal para bien de otros, en el círculo familiar, en el vecindario, en la iglesia, y en dondequiera que podamos, cualquiera sea nuestra profesión, no somos cristianos (El Deseado de todas la gentes, {DTG}, pp. 464, 465).

Cualquier ser humano que necesita nuestra simpatía y nuestros buenos servicios es nuestro prójimo. Los dolientes e indigentes de todas clases son nuestros prójimos; y cuando llegamos a conocer sus necesidades, es nuestro deber aliviarlas en cuanto sea posible.

Quien ama a Dios no sólo amará a sus prójimos, sino considerará con tierna compasión a las criaturas que Dios hizo. Cuando el Espíritu de Dios está en el hombre, lo conduce a aliviar el dolor en vez de producirlo…

Acércate a tus vecinos, uno por uno, hasta que sus corazones sean entibiados por tu interés y amor abnegados. Simpatiza con ellos, ora por ellos, busca oportunidades para hacerles el bien, y en cuanto puedas, reúne a algunos para abrir la Palabra de Dios ante sus mentes entenebrecidas. Vela como quien ha de rendir cuenta de las almas de los hombres, y aprovecha los privilegios que Dios te da de trabajar con El en su viña (Reflejemos a Jesús, {RJ}, p. 221).

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Lección 5 // Martes 26 de julio___________________________

LA RECETA COMPLETA

“Vosotros sois la sal de la tierra” (Mat. 5:13).

En este pasaje, Jesús llama a sus seguidores a ser “sal”, que es un agente transformador. La iglesia es el “salero” que contiene la “sal de la tierra”. ¿Con quiénes debemos mezclarnos nosotros, esta “sal”? ¿Solamente con nosotros mismos o con ingredientes diferentes de nosotros?

Podemos comprender mejor esta respuesta si llenamos un molde de pan con solo sal, y otro molde con pan que tiene sal como uno de sus ingredientes. En el primero, la sal es toda la receta; no puede ser sabroso y, mucho menos, comestible. En el segundo molde, la sal es parte de la receta que está mezclada con ingredientes distintos que ella misma. Y como tal, transforma el pan de insípido en delicioso. La sal hace el mayor bien cuando se mezcla con elementos diferentes de sí misma. Lo mismo es cierto con los cristianos. Pero, no ocurrirá si nos mantenemos en el “salero” de la iglesia.

Por ello, hay un punto que no debemos pasar por alto. Podemos ser morales: no fumamos ni tomamos bebidas alcohólicas, no nos enredamos en juegos de azar ni cometemos crímenes. Todo eso es importante. Sin embargo, el asunto crucial no es solo lo que no hacemos. Más bien, es ¿qué hacemos? Es decir, ¿qué hacemos para ayudar a nuestra comunidad y a quienes tienen necesidades?

Lee Mateo 5:13 otra vez. ¿Cómo puede la sal perder su sabor?

13 Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.

“Pero si la sal ha perdido su sabor; si no hay más que una profesión de piedad, sin el amor de Cristo, no hay poder para lo bueno. La vida no puede ejercer influencia salvadora sobre el mundo” (DTG 407).

Volvamos al símbolo de la receta. Si todo lo que tenemos es sal, no sirve. De hecho, demasiada sal en la alimentación puede ser tóxica. La sal debe estar mezclada con lo que es distinto de ella; si somos iguales o muy parecidos al mundo, no marcaremos una diferencia en él; la sal llega a ser buena para nada. Y ¿qué dice Jesús que ocurrirá con ella, entonces?

Pero, saturados con el amor de Cristo, desearemos llegar a ser “de adentro” con los “de afuera”, mezclándonos con otros a fin de ser agentes transformadores, que producirán una diferencia positiva en sus vidas y, por extensión, llevarán a otros a lo que realmente importa en la vida: la salvación en Jesús.

Lee Deuteronomio 12:30 y 31:20; e Isaías 2:8. ¿De qué peligros nos advierten estos textos, y cómo podemos ser cuidadosos para no caer en esa trampa?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

13Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.

La sal que común-mente han usado los Israelitas por muchas generaciones hasta el día presente, proviene de un lugar llamado “Jebel-Usdum” que se encuentra en las playas del mar muerto, a ésta sal, se le llama “la sal de Sodoma”. La sal que nosotros conocemos en nuestros días es un compuesto químico, por lo tanto cuando es expuesta a la humedad, se disuelve pero no pierde su sabor, es decir, que el ingrediente donde se disolvió la sal, quedo completamente salado.

Esto no sucede con la “sal de Sodoma” ésta sal es un tipo de sal delicada, cuando ésta sal es expuesta a la intemperie o a la humedad, pierde su sabor, y se convierte en una roca cristalina muy dura, que realmente no sirve para nada.

Ha sido la costumbre de los comerciantes de sal en el medio oriente, que cuando la “sal de Sodoma” se hecha a perder, entonces la echaban a la calle, y con el caminar de las gentes y de las bestias, ésta sal se esparcía por la calle, dejando un calle muy anivelada y pareja, convirtiéndose así en un excelente material para suavizar los caminos de esos días.

Esto mismo ocurría con la sal que se guardaba en el templo para los sacrificios, cuando ésta se arruinaba, se guardaba en un lugar diferente, para su uso en el invierno. Cuando el invierno llegaba, tanto las gradas como las cunetas del templo se volvían lisas, entonces la sal era esparcida para que los sacerdotes no se resbalaran, de ésta manera la sal que se arruinaba, no era buena para nada, “sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.”

Esta información es para que entendamos las palabras de Jesús en el versículo de estudio de éste día.

Entre los trabajos mas importantes de la sal, sobresalen dos: El primero es el de darle sabor a la comida, y el segundo es el de preservar la comida de putrefacción.

El cristianismo al igual que la sal, también tiene esos dos trabajos primordiales para hacer en éste mundo; el primero es de darle sabor a la vida del hombre, por medio de las bendiciones que se consiguen del cielo a través de la oración, y el segundo es de preservar al mundo de la corrupción del pecado, de los crímenes y de los vicios.

Recordemos que la sal también tiene poder, la sal tiene filo, la sal muerde y es agresiva. La sal en los ojos o en las heridas del hombre, causa mucho dolor. Lo mismo sucede con el evangelio, cuando el evangelio hace su obra en la vida del hombre, causa dolor, molestia y mucha incomodidad, pero los resultados son para vida, y vida eterna.

¿De que sirve la sal si perdiera su poder? No sirve para nada, solo sirve para ser tirada en la calle y ser hollada por el hombre.

¿De que sirve la iglesia, si pierde su poder? No sirve para nada, solo para ser tirada y ser eliminada totalmente.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Se aprecia la sal por sus propiedades preservadoras; y cuando Dios llama sal a sus hijos, quiere enseñarles que se propone hacerlos súbditos de su gracia para que contribuyan a salvar a otros. Dios escogió a un pueblo ante todo el mundo, no únicamente para adoptar a sus hombres y mujeres como hijos suyos, sino para que el mundo recibiese por ellos la gracia que trae salvación. Cuando el Señor eligió a Abrahán, no fue solamente para hacerlo su amigo especial; fue para que transmitiese los privilegios especiales que quería otorgar a las naciones. Dijo Jesús, cuando oraba por última vez con sus discípulos antes de la crucifixión: “Y por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad”. Así también los cristianos que son purificados por la verdad poseerán virtudes salvadoras que preservarán al mundo de la completa corrupción moral.

La sal tiene que unirse con la materia a la cual se la añade; tiene que entrar e infiltrarse para preservar. Así, por el trato personal llega hasta los hombres el poder salvador del Evangelio. No se salvan en grupos, sino individualmente. La influencia personal es un poder. Tenemos que acercarnos a los que queremos mejorar.

El sabor de la sal representa la fuerza vital del cristiano, el amor de Jesús en el corazón, la justicia de Cristo que compenetra la vida. El amor de Cristo es difusivo y agresivo. Si está en nosotros, se extenderá a los demás. Nos acercaremos a ellos hasta que su corazón sea enternecido por nuestro amor y nuestra simpatía desinteresada. De los creyentes sinceros mana una energía vital y penetrante que infunde un nuevo poder moral a las almas por las cuales ellos trabajan. No es la fuerza del hombre mismo, sino el poder del Espíritu Santo, lo que realiza la obra transformadora (El discurso maestro de Jesucristo, {DMJ}, pp. 33, 34).

Dios prueba a su pueblo en este mundo. Este es el lugar donde hay que prepararse para comparecer ante él. Aquí, en este mundo, en estos últimos días, las personas pondrán en evidencia cuál es el poder que acepta sus corazones y controla sus acciones. Si es el poder de la verdad divina, conducirá a las buenas obras. Elevará al que lo recibe y lo transformará en una persona de corazón noble y generoso como su divino Señor (Exaltad a Jesús, {EJ}, p. 369).

Cuando Cristo mora en el corazón, el alma está tan llena de su amor, del gozo de su comunión, que se une a él, y pensando en él, se olvida de sí misma. El amor de Cristo en el móvil de la acción. Aquellos que sienten el constructivo amor de Dios no preguntan cuánto es lo menos que pueden darle para satisfacer los requerimientos de Dios; no preguntan cuál es la más baja norma aceptada, sino que aspiran a una vida de completa conformidad con la voluntad de su Salvador. Con ardiente deseo entregan todo, y manifiestan un interés proporcionado al valor del objeto que buscan. El profesar pertenecer a Cristo sin sentir amor profundo, es mera charla, árido formalismo, gravosa y vil tarea (El camino a Cristo, {CC}, p. 44).

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Miércoles 27 de julio // Lección 5_________________________

EL TRABAJO DEL AGRICULTOR

Lee Juan 4:35 al 38. ¿Cuáles pasos dice Jesús que son necesarios para alcanzar a las almas?

35 ¿No decís vosotros: Aún faltan cuatro meses para que llegue la siega? He aquí os digo: Alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega. 36 Y el que siega recibe salario, y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra goce juntamente con el que siega. 37 Porque en esto es verdadero el dicho: Uno es el que siembra, y otro es el que siega. 38 Yo os he enviado a segar lo que vosotros no labrasteis; otros labraron, y vosotros habéis entrado en sus labores.

La tarea de un agricultor es multifacética. Algunas tareas agrícolas deben hacerse antes de que la cosecha pueda ser abundante (Mat. 9:35-38). No solo se necesitan segadores en el campo de cultivo de Dios. ¿Puedes imaginarte a un agricultor en tiempo de cosecha que les diga a sus peones: “Estamos en tiempo de cosecha, así que tenemos que comenzar a sembrar las semillas”? La cosecha se realiza después de haber estado cultivando durante un buen tiempo antes.

La agricultura incluye la preparación del suelo, pues no todo suelo es bueno al principio. (Lee Mat. 13:3-9.) ¿Qué puede hacer tu iglesia en tu comunidad para ablandar “el suelo duro”, y quitar las “piedras” y las “espinas”?

Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar. Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron. Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra;pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno. El que tiene oídos para oír, oiga.

No siempre los peones de campo que realizan las duras tareas agrícolas de sembrado y cultivo son los mismos que, luego, recogen la cosecha, el beneficio del trabajo de otros. Algunas veces, las estrategias evangelizadoras han enfatizado más la cosecha que el cultivo preparatorio. Pero no debe ser así. El suelo tiene que prepararse antes de que el evangelista comience a predicar para realizar una cosecha.

Debemos mirar el trabajo en el campo de cultivo como un proceso: analizar el suelo y prepararlo, plantar las semillas y fertilizar la tierra; regar los cultivos y luchar contra las plagas; esperar; cosechar y conservar el producto.

Realizar la siega es solo una parte del proceso. En la iglesia, el proceso del “cultivo” debe incluir actividades de análisis y preparación: encuestas sobre necesidades de la comunidad, estudios demográficos, entrevistas a líderes de la comunidad y, luego, atender necesidades que fueron reveladas al hacer la evaluación. También debemos realizar actividades de siembra, como seminarios, estudios bíblicos y Grupos pequeños. Y es importante orar por la lluvia del Espíritu Santo. Pocas personas se ganan para Cristo con solo una serie de predicaciones. Necesitamos alimentarlas con múltiples exposiciones al mensaje, a fin de que estén listas para la cosecha. Si dependemos solo de eventos esporádicos, las plantas nuevas no sobrevivirán hasta la siega.

¿Qué papel deberías desempeñar en este proceso de ganar almas, a diferencia del que ahora tienes?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar. 4Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron. 5Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra; 6pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó. 7Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron. 8Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.

En esta parábola encontramos 4 tipos de siembra que representan a 4 tipos de creyentes:

1-La semilla que cayó junto al camino, y que fue comida por las aves

2-La semilla que cayó en los pedregales, y fue muerta por el calor del sol

3-La semilla que cayó entre los espinos y murió ahogada

4-La semilla que cayó en buena tierra

Cuatro diferentes clases de suelo:

1-El suelo impenetrable – junto al camino

2-El superficial – el del pedregal

3-El preocupado – entre los espinos

4-El suelo preparado – buena tierra

Cuatro diferentes clases de escuchadores:

1-El descuidado – la semilla junto al camino

2-El temporal – la semilla del pedregal

3-El mundanal –la semilla entre los espinos

4- El sincero: Ellos comprenden, reciben, retienen y practican

El sembrador era la misma persona, y la semilla era de la misma calidad; aquí el problema reside en la tierra

La interpretación de la parábola del sembrador, es dada en la parábola del trigo y la cizaña; dicho sea de paso el trigo y la cizaña son dos plantas muy difíciles de distinguir. El trigo y la cizaña pertenecen a la familia de la grama, y también las dos pertenecen al grupo especial de gramas llamadas “TRITITICINOE” que en otras palabras sería: “Gramas que parecen trigo”

La estructura de las dos plantas, sus condiciones y sus formas de crecer son idénticas, cuando las plantas están maduras su apariencia es tan similar, que ni mas experimentado agricultor judío, puede diferenciar la una de la otra. La única manera de reconocer a las dos plantas es cuando dan sus frutos, el fruto de la cizaña es muy pequeño, es de color negro, y es vano, es decir es solo la envoltura, es hueco y sin fruto; al final la planta impostora se ha descubierto.

“…parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron…”

La semilla que cayó en el camino y fue comida por las aves, son todos aquellos que tiene una mente pecaminosa, les cuesta concentrarse en las cosas divinas, no comprenden, no acatan las órdenes de Dios. El enemigo que en éste caso es representado por las aves, no pierde ninguna oportunidad para robar la preciosa semilla puesta en la mente de los hombres. El enemigo trabaja incesantemente para borrar de la mente del hombre, los pensamientos y las impresiones que la Palabra de Dios logra hacer en la mente de nosotros. El suelo es impenetrable, y el oidor es descuidado.

Las aves de ésta parábola, representa a Satanás: 15 Y éstos son los de junto al camino: en quienes se siembra la palabra, pero después que la oyen, en seguida viene Satanás, y quita la palabra que se sembró en sus corazones. Marcos 5

“…Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra…”

Este tipo de persona es aquella que es rápida para actuar bajo las emociones, muchas veces basta solo un sermón y la persona demuestra las señales de una conversión.

Pero toda conversión que se hace con rapidez tiene como resultado la apostasía, en su mayoría de veces.

Mientras todo está bien en la iglesia y en la vida de este tipo de conversos, todo marcha bien, pero al nomas aparecer las pruebas y las dificultades, la muerte espiritual es segura.

Así como entró a la iglesia por una emoción, solo es necesario para que se marche; una decepción.

Estas personas no tienen raíces, no son verdaderos cristianos, sus corazones no han sido cambiados, no han logrado descubrir su culpabilidad, no han comprendido la excelencia de Cristo, estas personas no están completamente arraigadas al evangelio. Cuando esta personas son examinadas a través de las pruebas y persecución, siempre sucumben. La semilla muere, ante el ardiente sol del mediodía. El suelo es superficial, el oidor es temporal.

7 “…Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron…”

Este es el grupo de personas que escucha la Palabra de Dios, pero los quehaceres, de éste mundo lo ahogan, se vuelven infructíferos y perecen. Esta semilla no cayó en pedregales, cayó en tierra profunda; demostrando que estas personas no son personas de carácter débil, ellos tiene carácter con fundamento. La maldad de ellos, consiste en que tiene un pensamiento dividido, parte es para la Palabra de Dios, y la otra parte está dedicada a los afanes del mundo. “No se puede servir a dos señores…” El deseo de las deslumbrantes riquezas de éste mundo, siempre termina ahogando la vida espiritual.

Este tipo de persona, nunca están satisfechos con lo que tienen, aprovechan cada ocasión, para ser deshonestos, para hacer trampas, para tomar ventajas, para oprimir a otros, para sacar hasta la última gota de sudor al trabajador, toda pasión es alimentada por el amor al dinero. Uno de los pecados peculiares de éste tipo de persona es el robo.

El robo tiene muchas caras, entre ellas podemos decir lo siguiente:

-Roba el que adultera un producto volviéndolo de calidad inferior y manteniendo el mismo precio.

-Roba el que usa medidas y pesas falsas en sus transacciones.

-Roba el que oculta defectos.

-Roba el que presenta una calidad tramposa.

-Roba aquel que ha encontrado algo y sabiendo quien es su dueño, lo mantiene para sí.

-Roban los que reciben comisión a espaldas de sus jefes.

-Roban aquellos que se posesionan de algo que no está detallado en un contrato.

-Roba todo trabajador que no hace el trabajo para el cual fue contratado.

-Roban aquellos que hacen trabajos descuidados, sin el esmero con que tendría que hacerse dicho trabajo.

-Roban aquellos que no cuidan los bienes del propietario, derrochando y menoscabando los bienes que no le pertenecen.

-Roban los empleadores cuando retienen los salarios.

-Roban los empleadores cuando no cumplen sus promesas con los beneficios prometidos.

-Roban los empleadores cuando hacen trabajar a los trabajadores horas extras sin el debido pago.

-Roban los empleadores cuando privan a sus trabajadores de algo que ellos merecen.

-Todos aquellos viajeros que no declaran, ó desfiguran y ocultan sus propiedades al inspector de aduanas; ellos también son ladrones.

-Roban todos aquellos que se meten a deudas que saben que les será imposibles pagar.

-Roban aquellos que antes de una bancarrota transfieren todos sus bienes a alguien con el convenio de serles devueltas mas tarde.

-Roba el que acepta el reconocimiento de trabajo ó la idea de otro.

-Roba aquel que usa lo ajeno sin permiso de su propietario.

-Es ladrón al que se aprovecha de su prójimo en cualquier forma.

-Roba aquel que no entrega a su dueño lo escrito en una herencia.

-Roba el que encuentra algo y no lo reporta al centro de objetos perdidos.

-Roba él que le compra a un ladrón.

-Se puede robar a otros quitándoles las FE mediante las dudas y las críticas.

-Se roba a Dios con los diezmos y las ofrendas.

-Se roba el buen nombre de una persona a través de chismes calumniosos y perniciosos.

8 “…Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.

El grupo de personas que escuchan la Palabra de Dios, la comprenden, la retienen y la obedecen. Este proceso, no es un proceso que es intelectual solamente, es el proceso de tomar la Palabra de Dios, escudriñarla y descubrir los grandes tesoros que se encuentran ocultos en la Palabra de Dios. Este tipo de personas son las que llevan frutos, unos al cien, otros al sesenta y otros al treinta, de acuerdo a las oportunidades y a las capacidades de cada uno de ellos.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

“Uno es el que siembra y otro es el que siega.” El Salvador dijo estas palabras antes de la ordenación y envío de sus discípulos. Por toda Judea, Cristo había estado sembrando las semillas de verdad. Clara y distintamente, había bosquejado el plan de salvación; porque la verdad no languidecía nunca en sus labios. La obra terrena del gran Maestro iba a acabar pronto. Los discípulos habían de seguir después, segando donde él había sembrado, para que el Sembrador y los segadores se regocijasen juntos.

Hoy día, en el gran campo de la mies, Dios necesita sembradores y segadores. Recuerden los que salen a trabajar, algunos para sembrar y otros para segar, que nunca han de atribuirse la gloria y el éxito de su obra. Los agentes de Dios han estado antes que ellos preparando el camino para la siembra de la simiente y la siega de la mies. “Yo os he enviado a segar lo que vosotros no labrasteis—dijo Cristo:—otros labraron, y vosotros habéis entrado en sus labores” (Obreros evangélicos, {OE}, p. 425).

A través de la parábola del sembrador, Cristo presenta el hecho de que los diferentes resultados dependen del terreno. En todos los casos, el sembrador y la semilla son los mismos. Así él enseña que si la palabra de Dios deja de cumplir su obra en nuestro corazón y en nuestra vida, la razón estriba en nosotros mismos. Pero el resultado no se halla fuera de nuestro dominio. En verdad, nosotros no podemos cambiarnos a nosotros mismos; pero tenemos la facultad de elegir y de determinar qué llegaremos a ser. Los oyentes representados por la vera del camino, el terreno pedregoso y el de espinas, no necesitan permanecer en esa condición. El Espíritu de Dios está siempre tratando de romper el hechizo de la infatuación que mantiene a los hombres absortos en las cosas mundanas, y de despertar el deseo de poseer el tesoro imperecedero. Es resistiendo a! Espíritu como los hombres llegan a desatender y descuidar la palabra de Dios. Ellos mismos son responsables de la dureza de corazón que impide que la buena simiente eche raíces, y de los malos crecimientos que detienen su desarrollo..

Los sembradores de la semilla tienen una obra que hacer en cuanto a preparar los corazones para que reciban el Evangelio. Se presenta la palabra con demasiado sermoneo y con muy poca obra de corazón a corazón. Se necesita un trabajo personal en favor de las almas de los perdidos. Debemos acercarnos a los hombres individualmente; y con la simpatía de Cristo hemos de tratar de despertar su interés en los grandes asuntos de la vida eterna. Quizá su corazón parezca tan duro como el camino transitado, y tal vez sea aparentemente un esfuerzo inútil presentarles al Salvador; pero aun cuando la lógica pueda no conmover, y los argumentos puedan resultar inútiles para convencer, el amor de Cristo, revelado en el ministerio personal, puede ablandar un corazón pétreo, de manera que la semilla de la verdad pueda arraigarse.

De modo que los sembradores tienen algo que hacer para que la semilla no sea ahogada por las espinas o perezca debido a la poca profundidad del terreno. En el mismo comienzo de la vida cristiana deben enseñarse a cada creyente los principios fundamentales. Debe enseñársele que no ha de ser meramente salvado por el sacrificio de Cristo, sino que ha de hacer que la vida de Cristo sea su vida, y el carácter de Cristo su carácter (Palabras de vida del gran Maestro, {PVGM}, pp. 36-38).

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Lección 5 // Jueves 28 de julio___________________________

PLANTACIÓN DE IGLESIAS

Lee Mateo 10:5 al 10. ¿Por qué enviaba Jesús a sus discípulos a los pueblos y las aldeas circundantes sin ningún recurso?

A estos doce envió Jesús, y les dio instrucciones, diciendo: Por camino de gentiles no vayáis, y en ciudad de samaritanos no entréis, sino id antes a las ovejas perdidas de la casa de Israel. Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia. No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos; 10 ni de alforja para el camino, ni de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento.

Parece extraño que los discípulos tuvieran órdenes de salir con poco para sostenerse. Da la impresión de que Jesús quería enseñarles a depender de Dios, y a crear amistades mediante el servicio a los residentes locales. Ellos valorarían sus servicios lo suficiente como para apoyarlos en el ministerio.

La Asociación le pidió al pastor Francis que plantara una iglesia en un barrio de la ciudad que no tenía presencia adventista, pero no le entregó los fondos para hacerlo. El pastor Francis consultó un mapa, determinó los límites de esa sección de la ciudad y estudió la demografía de sus habitantes. Fue a la zona más transitada del vecindario y comenzó a hablar con los comerciantes haciendo preguntas sobre la vida en ese vecindario. Conversó con dirigentes políticos, dueños y empleados de negocios, y agencias sociales, y preguntó por las necesidades de esa comunidad. Se hizo amigo de residentes locales, que lo invitaron a unirse a un club cívico. Allí encontró a otros dirigentes que lo ayudaron a alquilar un anexo de una iglesia presbiteriana local. Los miembros del club cívico le dieron dinero para comprar pintura y elementos de limpieza para renovar el anexo y usarlo para servicios a la comunidad. Esos líderes le indicaron que la salud era una necesidad importante allí. El pastor Francis reunió a voluntarios para realizar programas de control de salud y reuniones para los vecinos. Los que se beneficiaban de esos programas pagaban una tarifa mínima, que ayudaba a cubrir los gastos. Pronto comenzó una Escuela Sabática filial y algunos empezaron a asistir.

El pastor Francis encontró que una de las mejores maneras de plantar una iglesia es plantar primero un ministerio que atienda las necesidades de la comunidad; y luego, iniciar una iglesia. Ahora, esta iglesia local tiene unos 140 miembros.

La historia del pastor Francis ilustra lo que puede suceder cuando seguimos las enseñanzas de Jesús acerca de extendernos a nuestra comunidad. ¿De qué modo vivió Jesús sus propias enseñanzas acerca del ministerio? Comencemos a explorar el método del ministerio de Cristo, que “dará éxito para llegar a la gente” (MC 102).

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

5A estos doce envió Jesús, y les dio instrucciones, diciendo: Por camino de gentiles no vayáis, y en ciudad de samaritanos no entréis, 6sino id antes a las ovejas perdidas de la casa de Israel. 7Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. 8Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia. 9No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos; 10ni de alforja para el camino, ni de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento.

La historia del pastor Francis es una historia muy interesante y además es muy común en nuestra iglesia.

Yo haría varias preguntas a la asociación y entre ellas están: ¿Por qué mandaron al pastor Francis a fundar una iglesia sin darle los fondos económicos necesarios para ésta obra?; ¿Es la iglesia un canal de bendición para el mundo, o es la iglesia una carga para el mundo?; ¿No son acaso los diezmos y las ofrendas para el impulso la obra de Dios en éste mundo? Si la respuesta es si, entonces: ¿Porqué no emplear los diezmos y las ofrendas para lo cual se ha destinado?; ¿Porqué pedir al mundo, cuando la iglesia tiene los fondos suficientes para hacer la obra de Dios?

Hay dos característica por las cuales el mundo reconoce inmediatamente a nuestra iglesia, la primera es por que no hacemos nada en el día sábado y la segunda es por pedir.

Pedimos todo el tiempo, pedimos a los miembros de nuestras iglesia y también le pedimos a los que nos son miembros de nuestras iglesias. Posiblemente no hay otra iglesia en el mundo, que pida tanto como pedimos los Adventistas del Séptimo Día.

A través de toda la historia de la Biblia, encontramos que los verdaderos hombres de Dios, nunca tuvieron nada en la vida, Moisés decidió tomar parte con su pueblo y pudiendo tener todo, nuca tuvo nada, él solo tuvo un arduo trabajo y una vida abnegada, la misma suerte fue para el profeta Samuel.

Elías solo tenía un manto, el famoso manto que heredó a Eliseo, mientras él subía al cielo; Elías no se preocupaba ni por sus alimentos, pero el cielo si, Elías fue alimentado por cuervos y también por ángeles.

Eliseo repite la misma historia. Despreciando las riquezas de éste mundo, Eliseo castigó a su siervo Giesi con la misma lepra que afligía a Naamán, por haber tomado los regalos que Naamán trató de dar al profeta, después de su sanación de lepra.

Todos los profetas y jueces del Antiguo Testamento, vivieron de la misma manera, con su vestido y con el alimento del día. Aquellos que alguna vez fueron detrás de las riquezas se la vieron muy mal, tal fue el caso de Balaam.

Cuando el pueblo de Israel se estableció en Canaán, Dios instituye para su servicio a dos distinguidos cuerpos de servidores religiosos como fueron los sacerdotes y los levitas.

También Dios instituyó los diezmos y las ofrendas, oficialmente y por escrito, a través de Moisés; y esto lo hizo Dios para pagar el salario tanto a los sacerdotes, como a los levitas.

Los sacerdotes, que eran los encargados de hacer exclusivamente los trabajos del altar, Dios dejo como pago para ellos la decima parte de los diezmos y los levitas que eran los encargados de todos los trabajos de la iglesia que no fueran del altar, Dios les dejo a ellos el 90% de los diezmos.

Tanto los sacerdotes como los levitas predicaban y enseñaban al pueblo, la diferencia era que los sacerdotes lo hacían desde el altar y los levitas predicaban y enseñaban en cualquier otro lugar, con tal que no fuera el altar; a parte de esto, los levitas eran los encargados de todo el mantenimiento de la iglesia, en todas sus formas.

26«Hablarás a los levitas y les dirás: Cuando toméis los diezmos de los hijos de Israel que os he dado como vuestra heredad, vosotros presentaréis de ellos, como ofrenda mecida a Jehová, el diezmo de los diezmos… 28Así presentaréis también vuestra ofrenda a Jehová de todos los diezmos que recibáis de los hijos de Israel; se la daréis al sacerdote Aarón como ofrenda reservada a Jehová. Números 18

Dios dejó para a los sacerdotes el 10% de los diezmo, y Dios dejo a los levitas el 90% de los diezmos.

21Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo de reunión. Números 18

24Porque a los levitas he dado por heredad los diezmos de los hijos de Israel, que ofrecerán a Jehová en ofrenda; por lo cual les he dicho: Entre los hijos de Israel no poseerán heredad. Números 18

Además del 10% de los diezmos, Dios les deja a los sacerdotes las ofrendas del pueblo:

3Y este será el derecho de los sacerdotes de parte del pueblo, de los que ofrecieren en sacrificio buey o cordero: darán al sacerdote la espaldilla, las quijadas y el cuajar. 4Las primicias de tu grano, de tu vino y de tu aceite, y las primicias de la lana de tus ovejas le darás; Deuteronomio 18

8Jehová dijo a Aarón: «Yo te he dado también el cuidado de mis ofrendas. Todas las cosas consagradas de los hijos de Israel te las he dado a ti y a tus hijos en virtud de la unción, por estatuto perpetuo. Esto será tuyo de la ofrenda de las cosas santas, reservadas del fuego: todas las ofrendas que me han de presentar, todo presente suyo, toda expiación por su pecado y toda expiación por su culpa, será cosa muy santa para ti y para tus hijos. 10 En el santuario la comerás; todo varón comerá de ella. Cosa santa será para ti.

11»Esto también será tuyo: la ofrenda elevada de sus dones y todas las ofrendas mecidas de los hijos de Israel; te las he dado a ti, a tus hijos y a tus hijas por estatuto perpetuo. Cualquiera que esté limpio en tu casa, comerá de ellas. 12 De aceite, de mosto y de trigo, todo lo más escogido, las primicias de ello, que presentarán a Jehová, para ti las he dado. 13 Las primicias de todas las cosas de su tierra, las cuales traerán a Jehová, serán tuyas. Cualquiera que esté limpio en tu casa, comerá de ellas. 14 Todo lo consagrado por voto en Israel será tuyo. Número 18

Pero Dios deja otro mandamiento muy interesante;

28Al fin de cada tres años sacarás todo el diezmo de tus productos de aquel año, y lo guardarás en tus ciudades. 29Y vendrá el levita, que no tiene parte ni heredad contigo, y el extranjero, el huérfano y la viuda que hubiere en tus poblaciones, y comerán y serán saciados; para que Jehová tu Dios te bendiga en toda obra que tus manos hicieren. Deuteronomio 14

Este mandamiento maravilloso que dio Dios, tiene como fin varias cosas importantes, y entre ellas podemos mencionar:

1-Que las riquezas no sean almacenadas

2-Que no se vuelva rico cierto grupo o cierto sector de la iglesia

3-Que el fin de los diezmos y las ofrendas cumpla su objetivo de aliviar las necesidades del mundo

4-Que los pobres y los necesitados sean bendecidos con los diezmos que se le traen al Señor

Se da cuenta, hoy en día hacemos todo lo contrario, los sacerdotes se llevan el diezmo en su totalidad mas parte de la ofrenda, y hay algunas asociaciones que mandatoriamente se llevan hasta el 20% de las ofrendas y después de todo eso, mandan al pobre pastor Francis a abrir una iglesia sin un centavo.

El pastor Francis, tiene que usar la caridad y la ayuda del mundo pagano, para llevar adelante la obra de Dios ¿Cómo lo ve usted? Todo lo que hizo el pastor Francis de ponerse en contacto con la comunidad, lo hubiera podido hacer de una manera mas excelente, si hubiera sido apoyado económicamente por su asociación.

Si usted posee un terreno y desea construir un templo, tiene que tener “suerte”, “contactos” y mucha “insistencia” para conseguir que la asociación le haga un préstamo. Este dinero que la asociación le prestará con intereses y a corto plazo, son los mismos diezmos que la iglesia dio para adelantar el evangelio aquí en la tierra. Al final la escritura de la propiedad del templo se tiene que entregar a la asociación.

Si algún día la iglesia local desea vender su templo, la asociación está obligada a devolver la escritura de propiedad a dicha congregación, pero eso rara vez sucede. Por lo general los templos Adventistas nunca de venden, son propiedades que quedan para la iglesia hasta que Cristo venga. Por lo tanto la asociación se queda con los diezmo, recupera el préstamo que hizo a la iglesia, le gana intereses al préstamo y se queda con el título de la propiedad del nuevo templo. ¿Qué le parece?

Siguiendo con la línea de los siervos de Dios, nos damos cuenta que profetas como Jeremías, Isaías, Ezequiel, y todos los profetas menores del Antiguo Testamento, fueron hombres que no tuvieron mucho en la vida, se preocuparon por tener su mudada y su comida.

En el Nuevo Testamento, encontramos a Juan el bautista y a Jesús, que fueron otro ejemplo del actuar de un ministro del evangelio.

Antes de irse Jesús, él dio las últimas indicaciones a sus discípulos de cómo proceder en los asuntos financieros de la predicación del evangelio y él dijo: «9No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos; 10ni de alforja para el camino, ni de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento.» Dando a entender que el pago de ellos por la predicación del evangelio eran sus alimentos, algo parecidos a los sacerdotes que recibían las ofrendas y la mayoría de esa ofrendas eran alimento de origen vegetal y animal.

Teniendo esto en consideración, las asociaciones deberían de volver al sistema que dejó Dios de los diezmos y de las ofrendas. Si ellos no usan los diezmos para adelantar la obra de Dios, y mandan al pastor Francis a abrir una iglesia sin un centavo, entonces para que quieren los diezmos, sería mejor que ese 90% de los diezmos, queden en las iglesias, tal como Dios lo ordenó.

Las iglesias sabrán usarlo para suplir las necesidades que se presentan en la predicación del evangelio, ese dinero se usaría para suplir las necesidades de los pobres de la iglesia y también de aquellas personas necesitadas a quienes se les está presentando el evangelio, sería un evangelio no solo con una doctrina bonita y verdadera, sino un evangelio de acción, de amor y de misericordia.

Comparto un testimonio que escuche:

La iglesia Adventista del Séptimo Día “Ignite Fellowship” es una iglesia localizada en la ciudad de Miami, estado de Florida, en los Estados Unidos. La mayoría de miembros de ésta iglesia son personas de origen hispano, pero en la iglesia se desarrollan todos los servicios en el idioma Ingles.

Hace aproximadamente un año, el pastor Kendall Turcios llegó a ésta iglesia para trabajar como pastor de la iglesia, él provenía de una iglesia en el estado de Texas.

Cuando el pastor llegó a la iglesia, se dio cuenta que los hermanos tenían una suma de dinero ahorrada para comprar un templo, ese dinero eran 100 % ofrendas que los hermanos habían dado.

Comprar un templo en los Estados Unidos, es realmente un sueño, que la mayoría de veces se queda en eso, ya que es algo muy difícil de lograr.

El pastor Turcios, se dio cuenta que ese dinero realmente no era suficiente para comprar un templo, y también se dio cuenta que no lo sería prontamente, así que sugirió a la iglesia no tener ese dinero almacenado, sino que ponerlo a trabajar en la predicación del evangelio.

El dinero que la iglesia tenia ahorrado para Pro-Templo, se comenzó a invertir directamente en las personas necesitadas, tanto en la iglesia como en la comunidad, solventando sus necesidades directas, materialmente hablando.

Además se pidió a los doctores que habían en la iglesia, que donaran un día de trabajo al mes, para trabajar para la iglesia y la comunidad.

Cuando se comenzó con ésta ministerio la iglesia tenía 25 miembros aproximadamente estables, mas las visitas. Un año mas tarde la iglesia tiene alrededor de 200 miembros de planta, mas todas las visitas. La Iglesia “Ignited Fellowship” está creciendo cada día mas y los pasos que da, son cada días mas grandes.

Si ésta iglesia ha podido hacer una gran obra y ha tenido un crecimiento gigante solamente usando las ofrendas de la iglesia, podría hacer mucho mas si se siguiera la orden bíblica de dejar el 90% de los diezmos para la iglesia.

Usted se imagina la obra que las iglesias pudieran hacer, si practicáramos el sistema de diezmos y ofrendas que dejó el Señor originalmente para su pueblo, no fuéramos 17 millones de Adventistas, fuéramos 100, 200 0 300 millones de miembros alrededor del mundo. Eso significara muchos mas diezmos y mucho mas ofrendas, pero lo mas importante sería la predicación y finalización del evangelio en la tierra.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Durante su ministerio, Jesús había mantenido constantemente ante los discípulos el hecho de que ellos habrían de ser uno con él en su obra de rescatar al mundo de la esclavitud del pecado. Cuando envió a los doce y más tarde a los setenta, a proclamar el reino de Dios, les estaba enseñando su deber de impartir a otros lo que él les había hecho conocer. En toda su obra, los estaba preparando para una labor individual, que se extendería a medida que el número de ellos creciese, y finalmente alcanzaría a las más apartadas regiones de la tierra. La última lección que dió a sus seguidores era que se les habían encomendado para el mundo las alegres nuevas de la salvación (Los hechos de los apóstoles, {HAp}, p. 26).

El Señor está llamando a su pueblo a emprender diferentes líneas de obra misionera. Quienes transitan por caminos y vallados han de escuchar el salvador mensaje evangélico. Los miembros de iglesia han de hacer obra evangelizadora en los hogares de quienes entre sus amigos y vecinos todavía no han recibido la evidencia completa de la verdad…

Que quienes se dediquen a esta obra hagan de la vida de Cristo su estudio constante. Sean intensamente fervientes, usando toda capacidad en el servicio del Señor. Preciosos resultados premiarán los esfuerzos sinceros y abnegados. Los obreros recibirán del gran Maestro la más alta educación de todas…

La presentación de la verdad, con amor y sencillez, de casa en casa, está en armonía con la instrucción que Cristo dio a sus discípulos cuando los envió en su primer viaje misionero. Por medio de cantos de alabanza a Dios, oraciones humildes y sinceras, y una presentación sencilla de la verdad bíblica en el círculo familiar, muchos serán alcanzados. El Obrero divino estará presente para infundir convicción en los corazones. “Yo estoy con vosotros todos los días” (Mateo 28:20), es la promesa. Con la seguridad de la permanente presencia de tal Ayudador, podremos trabajar con fe, esperanza y valor.

Esta monotonía en nuestro servicio para Dios necesita ser quebrantada. Cada miembro de iglesia debería comprometerse en alguna línea de trabajo para Dios. Quienes están bien establecidos en la verdad vayan a lugares vecinos, y realicen reuniones, extendiendo una cordial invitación a todos. Haya en esas reuniones cantos melodiosos, oraciones fervientes y la lectura de la Palabra de Dios…

Hay otros que pueden visitar los hogares de la gente, leyendo a los miembros de la familia sobre algún solemne y sencillo tema de la verdad bíblica…

Hay quienes, por causa de los intensos deberes en el hogar… piensan que no pueden hacer nada para ayudar. Pero pueden animar a los que salen, y pueden dar de sus medios para ayudar a sostenerlos (Reflejemos a Jesús, {RJ}, p. 194).

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Viernes 29 de julio // Lección 5__________________________

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR: Lee otras enseñanzas de Jesús que informan sobre tu papel y el de tu iglesia en la comunidad: Mateo 7:12; 23:23; 25:31-46; Marcos 4:1-34; 6:1-13; Lucas 6:36; 11:42; 12:13-21; 14:16-24; 16:13; 18:18-27; 19:1-10; Juan 10:10; 12:8; 17:13-18. Lee “Estos mis hermanos pequeñitos”, El Deseado de todas las gentes, pp. 592-597; y “The Missionary’s Pattern”, Signs of the Times, 19 de marzo de 1894.

“A menos que la iglesia sea la luz del mundo, es oscuridad” (ST, 11 de septiembre de 1893). Ese es un pensamiento profundo. Nos recuerda las palabras de Jesús: “El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, desparrama” (Mat. 12:30). Jesús lo deja claro: no hay territorio neutral en el Gran Conflicto. O estamos del lado de Cristo o estamos del lado del diablo. Haber recibido gran luz y no hacer nada con ella es realmente actuar en contra de ella. Hemos sido llamados a ser luces en el mundo; si no somos luces, entonces somos oscuridad. Aunque el contexto inmediato es diferente, el principio es el mismo: “Si la luz que en ti hay es tinieblas, ¿cuántas no serán las mismas tinieblas?” (Mat. 6:23). Tal vez todo esto puede resumirse con las palabras: “Porque a todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le haya confiado, más se le pedirá” (Luc. 12:48).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

  1. Analiza cómo debemos mezclarnos con el mundo para alcanzar a otros. ¿De qué forma establecemos el equilibrio correcto? Es decir, ¿de qué modo nos mezclamos con el mundo para poder hacer bien a otros y, al mismo tiempo, no ser arrastrados a llegar a ser parte del problema y no de la solución?
  2. A menudo, si estamos involucrados con nuestra comunidad, surge el problema de la política. Después de todo, muchos de los problemas que requieren nuestra ayuda –pobreza, educación, cuidado de la salud, etc.− son parte del debate político. ¿De qué manera podemos ser cuidadosos para no permitir que la inevitable polarización de la política contamine lo que queremos hacer? Alguna participación en la política parece inevitable; entonces, ¿de qué forma podemos mantenernos fuera de la contienda política tanto como sea posible?
  3. Por otro lado, ¿existen situaciones en las que necesitamos estar en la arena política a fin de servir mejor a la comunidad? Si es así, ¿cuáles son esas situaciones, y cómo debemos actuar de tal modo que no comprometa nuestra comisión evangélica?

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Escrito por: Tony García.
Este documento es una cortesía de 7day Media Group.
“One World – One Dream”
http://www.sevendayradio.com
http://www.escuelasabaticamaestros.com
Madrid, España 2015

4 pensamientos en “LECCIÓN 5 – JESÚS LLEGA A LA COMUNIDAD – PARA EL 30 DE JULIO DE 2016

  1. HermanoToni: Es muy directo ,al descubrir como se gestiona los diezmos y las ofrendas de la iglesia,mi pregunta ,usted le ha comentado ala direccion,estos errores,lo logico seria que le escucharan y le atendieran ,si no que cree usted que los hermanos haran con esta imformacion gracias

    • Estimada hermana Tere: Esta información de los diezmos y las ofrendas es una información muy antigua, que ha estado disponible ya hace miles de años atrás. En la conferencia general de nuestra iglesia, se encuentran los mejores teólogos del mundo, tanto de nuestra iglesia, como de todas las religiones, por lo tanto yo estoy casi 100% seguro, que ésta nueva información, no es una nueva luz para ellos.

      ¿Qué harán los hermanos con ésta información? Yo no lo se hermana, solo Dios lo sabe.
      Lo único que yo se, es que antes de publicar temas tan ardorosos como éste, que levantan llagas y causan mucho malestar, yo paso horas de rodillas, consultando al Señor en oración.
      Leo lo que escrito muchas veces, por ejemplo hace quince días que publique éste tema por primera vez, lo leí y lo corregí como 15 veces, hasta que mi conciencia y mi espíritu quedó en paz conmigo mismo y con Dios.
      Por mi fragilísima salud, no puedo darme el lujo de estar empleitado con mi iglesia, con mis hermanos, con mis dirigentes, mucho menos con Dios, que es de él de quien depende mi salud y mi vida aquí en la tierra.
      ¿Por qué publico estos temas, cuando soy una persona pacificadora y 100% de la línea conservadora? Creo que Dios me enseña lo que debo escribir.

      Mi trabajo es solamente tratar de dar mas luz, cada quien hará de acuerdo a su conciencia: “En Asuntos de conciencia no hay mayoría”

      Un abrazo en Cristo

      Tony Garcia

  2. Hno Toni, estoy de acuerdo en la mayoría de sus conceptos, menos en eso de que somos la iglesia que mas plata pide. Al menos no donde yo vivo y tambien depende mucho del pastor que nos toque en su momento, le aseguro que aca es reconocida por pedir la iglesia pare de sufrir, ni hablar. Que Dios lo bendiga.

  3. Magnifica lección de escuela sabatica gracias Dios bendiga a este equipo por tanta generosidad y trabajo para los demas.Me gustaria saber si se puede oir de que forma sobre estos temas.gracias

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