Escuela Sabatica Para Maestros

Material Auxiliar Para Maestros de Escuela Sabatica

LECCIÓN 8 – ADORAD AL CREADOR – PARA EL 26 DE MAYO DE 2018

6 comentarios


** SI NECESITA ESTE DOCUMENTO EN FORMATO PDF, POR FAVOR HAGA UN CLICK AQUÍ MISMO SOBRE ESTE ANUNCIO Y LUEGO DESCARGUELO EN SU TELÉFONO, TABLETA, O COMPUTADORA. **


Si usted desea estudiar las lecciones anteriores, esto es lo que tiene que hacer:

1-Entre a la página central de Escuela Sabática Maestros, y a su lado derecho encontrará una barra llamada «CATEGORÍA». Allí por favor elija el trimestre del año que desea estudiar.

2-Una vez usted haya elegido el trimestre del año que desea estudiar, el sistema automáticamente le proveerá la última lección del trimestre que usted escogió, que es la lección 13.

3-Si usted desea estudiar las lecciones anteriores a la lección 13, al final de la lección encontrará una barra llamada «ENTRADAS ANTIGUAS». Si usted está en la lección 13, ésta barra lo llevará a la lección anterior que es la 12. Si usted está en la lección 12, ésta barra lo llevará a la lección anterior que es la 11, y así puede repetir éste proceso hasta que llegue a la lección que usted, desea estudiar.

Tenemos la lecciones disponibles para su estudio, desde el segundo trimestre del año 2014.


Si usted desea dejar su comentario, por favor vaya al final de ésta página, y allí encontrará el lugar para hacerlo. Si usted hace una pregunta, se le responderá por el mismo medio, en la misma lección donde usted deje su pregunta.


 Related image

Los pensamientos pertenecientes a la GUÍA DE ESTUDIO DE LA BIBLIA – EDICIÓN PARA MAESTROS de la Escuela Sabática no representan la postura oficial de la Iglesia Adventista del Séptimo Día local, regional ni mundial. Más bien, es el trabajo,  esfuerzo y pensamiento de un hermano laico de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, cuyo principal objetivo es proveer información adicional para quien estudia la lección de Escuela Sabática. Provee una ayuda extra para el maestro, a fin de entenderla mejor, y explicar de una manera más clara y nutrida la lección de Escuela Sabática. Tratamos de no presentar temas controversiales, ni polémicos y evitamos las ideas que promueven el fanatismo y el extremismo en nuestra iglesia. Si nuestro comentario no es de ayuda o de agrado para usted, se le pide que, por favor, lo descarte. Cualquier comentario, pregunta o sugerencia, por favor escriba a elhermanotony@gmail.com


Letra Negra: Lección de Escuela Sabática

Letra Ocre: Lección de Escuela Sabática 

Letra Roja: La Biblia

Letra Café: Nuestro comentario

Letra Azul: Espíritu de profecía


Lección 8: Para el 26 de mayo de 2018

ADORAD AL CREADOR

Sábado 19 de mayo_________________________________________________________________

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Apocalipsis 14:6, 7; Mateo 24:14; Gálatas 3:22; Lucas 23:32-43; Génesis 22:12; Apocalipsis 14:8-12.

PARA MEMORIZAR:

“Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo” (Apoc. 14:6).

Como cristianos y adventistas del séptimo día, creemos en el concepto bíblico de “la verdad presente” (2 Ped. 1:12). Es básicamente la idea de que Dios revela la verdad a la humanidad en el momento en que se necesita y que a lo largo de las edades el Señor da cada vez más luz. La primera promesa del evangelio, en Génesis 3:15, le reveló a la pareja caída que la esperanza vendría a través de la simiente de la mujer. La promesa de que llegaría a “ser Abraham una nación grande y fuerte, y [de que] hab[rían] de ser benditas en él todas las naciones de la tierra” (Gén. 18:18), es una revelación más completa de la promesa del evangelio. La venida de Jesús, que proclamó que “el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos” (Mar. 10:45) es, por supuesto, una revelación aún mayor de la verdad del evangelio.

Hoy creemos que el mensaje de los tres ángeles, de Apocalipsis 14:6 al 12, es “la verdad presente” para los que viven en los últimos días antes del regreso de Cristo y el cumplimiento de todas nuestras esperanzas como cristianos.

Esta semana, nos centraremos particularmente en el mensaje del primer ángel, ya que contiene verdades fundamentales para aquellos que tratan de mantenerse fieles en medio de los peligros del tiempo del fin.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Por esto, yo no dejaré de amonestaros siempre de estas cosas, aunque vosotros las sepáis, y estéis confirmados en la verdad presente. 2 Pedro 1:12.

Creemos sin duda alguna que Cristo va a venir pronto. Esto no es una tabula para nosotros; es una realidad. No tenemos la menor duda, ni la hemos tenido durante años, de que las doctrinas que sostenemos son la verdad presente, y que nos estamos acercando al juicio. Nos estamos preparando para encontrar a Aquel que aparecerá en las nubes de los cielos escoltado por una hueste de santos ángeles, para dar a los fieles y justos el toque final de la inmortalidad…

“Dios está ahora probando a su pueblo. Está desarrollando su carácter. Los ángeles están pesando el valor moral, y llevando un registro fiel de todos los actos de los hijos de los hombres” (La fe por la cual vivo, p. 220).

Las personas honradas lograrán percibir la recta cadena de la verdad presente. Verán sus conexiones armoniosas, eslabón tras eslabón, que conforman un grandioso panorama, y se aferrarán a ella. La verdad presente no es difícil de entender, y el pueblo que Dios guía está unido en esta amplia y fume plataforma. Dios no usará personas de fe, opinión y conceptos diferentes para esparcir y dividir. El cielo y los santos ángeles están trabajando para unir, para producir unidad de fe, en un solo cuerpo. Satanás se opone a esto, y está decidido a esparcir, a dividir y a introducir diferentes sentimientos, para que la oración de Cristo quede sin contestar: “Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste”. Juan 17:20, 21. Jesús estableció que la fe de su pueblo debía ser una sola (Testimonios para la iglesia, tomo 1, p. 293).

Necesitamos escudriñar diariamente las Escrituras para que podamos conocer el camino del Señor y para que no seamos engañados por imposturas religiosas. El mundo está lleno de falsas teorías e ideas espiritualistas seductoras que tienden a destruir la clara percepción espiritual y a descarriar de la verdad y de la santidad. Especialmente en este tiempo, necesitamos mucho prestar atención a la amonestación: “Nadie os engañe con palabras vanas”. Efesios 5:6.

Debemos ser cuidadosos, no sea que interpretemos mal las Escrituras. Las claras enseñanzas de la Palabra de Dios no han de ser tan espiritualizadas que se pierda de vista la realidad. No se tuerce el sentido de las declaraciones de la Biblia en un esfuerzo por presentar algo raro a fin de agradar la fantasía. Entended las Escrituras tales como son. Evitad especulaciones ociosas acerca de lo que habrá en el reino de los cielos (Mensajes selectos, tomo 1. p. 200).

54

 

 

NOTA:

SI LA NUEVA LECCIÓN NO APARECE EL DÍA SÁBADO A LAS 3 DE LA TARDE HORA DEL ESTE DE LOS ESTADOS UNIDOS, ES PORQUE NO HEMOS PUBLICADO LA NUEVA LECCIÓN, POR FAVOR TENGA PACIENCIA, MIENTRAS SUBIMOS A LA RED LA NUEVA LECCIÓN PARA ESA SEMANA.

SI USTED PUEDE VER QUE YA PUBLICAMOS LA NUEVA LECCIÓN PERO NO PUEDE DESCARGAR EL SISTEMA PDF, ES PORQUE LA LECCIÓN NO ESTA TERMINADA. DE NUEVO POR FAVOR TENGA PACIENCIA, POR QUE AUN ESTAMOS TRABAJANDO EN LA LECCIÓN Y SE LES ESTAN HACIENDO CAMBIOS.

NOTA CURIOSA: ¿SABÍA USTED CUAL ES EL DÍA Y CUÁL ES LA HORA MAS CONCURRIDA DE PERSONAS VISITANDO NUESTRA SITIO DE LA LECCIÓN PARA MAESTROS?

RESPUESTAS: LOS DÍAS SÁBADOS A LAS 5 DE LA MAÑANA.

PARECE SER QUE HAY MUCHOS HERMANOS QUE NO ESTUDIAN DURANTE LA SEMANA Y A LA ULTIMA HORA SE ESTAN PREPARANDO PARA DAR LA LECCIÓN A SU CLASE.  ES UNA PENA EN VERDAD, QUE  ESTOS HERMANOS TARDISTAS DEL 7mo DÍA, SOLAMENTE ESTUDIAN LA LECCIÓN PARA SALIR DE UN COMPROMISO, Y NO ESTUDIAN LA LECCION PARA EDIFICACION ESPIRITUAL.

SI USTED ES PARTE DE ESE GRAN GRUPO QUE A ÚLTIMA HORA ESTÁ ESTUDIANDO, LE INVITAMOS A QUE PIENSE EN LAS SIGUIENTES DOS OPCIONES:

1-(LA MENOS INDICADA) QUE PONGA SU CARGO, YA QUE NO ES UN MAESTRO POR CONVICCIÓN SINO QUE ES UN MAESTRO POR OBLIGACIÓN. ESTO NO SIRVE NI UN CENTAVO EN LA VIDA CRISTIANA.

2-QUE CAMBIE SU MANERA DE PROCEDER. TODAS LAS PERSONAS QUE TIENEN EXITOS EN LA VIDA, SON TODAS AQUELLAS PERSONAS  QUE AMAN LO QUE HACEN, Y ESTO INCLUYE EL SANTO EVANGELIO DE DIOS.

NO PONEMOS A DIOS EN PRIMER LUGAR EN NUESTRAS VIDAS, Y DESPUÉS NOS ANDAMOS PREGUNTANDO PORQUÉ NOS VA MAL EN LA VIDA Y PORQUÉ NO SOMOS BENDECIDOS.

 


Domingo 20 de mayo | Lección 8___________________________________________________

LA UNIVERSALIDAD DEL EVANGELIO

Lee Apocalipsis 14:6; y Mateo 24:14 y 28:19. ¿Qué tema en común se encuentra en estos versículos? ¿De qué manera estos versículos en conjunto nos ayudan a entender cuán importante es el alcance y el testimonio de nuestro propósito como iglesia?

Apocalipsis 14:6

Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo,

Mateo 24:14

14 Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.

Mateo 28:19

19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;

En cierto sentido, se puede decir que el mensaje del primer ángel es la Gran Comisión (Mat. 28:19) dada ahora en el contexto de los últimos días. De hecho, es “la verdad presente”.

Observa que los tres pasajes enfatizan el hecho de alcanzar a todo el mundo, a “todas las naciones”, y a “a toda nación, tribu, lengua y pueblo”. En otras palabras, este mensaje es de alcance universal. Todos deben oírlo.

Lee Gálatas 3:22. ¿Qué dice este versículo que nos ayuda a comprender por qué todo el mundo necesita oír el evangelio?

Gálatas 3:22

22 Mas la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que es por la fe en Jesucristo fuese dada a los creyentes.

La universalidad del pecado explica la universalidad de nuestra misión y llamado. “Toda nación, tribu, lengua y pueblo” ha cometido un error, ha violado la Ley de Dios, que “lo encerró todo bajo pecado”. La caída de Adán en el Edén ha impactado en cada ser humano; ninguna nación, tribu o pueblo ha sido inmune. Todos afrontamos las consecuencias inmediatas del pecado y, a menos que se proveyera un remedio, todos enfrentaríamos la consecuencia final: la muerte eterna.

Sin duda, se proveyó ese remedio: la vida, la muerte, la resurrección y el ministerio en el Santuario celestial de Jesús, que es la única solución al problema del pecado. Todo el mundo necesita conocer la gran esperanza de lo que Dios les ha ofrecido en Jesucristo. Por eso, los adventistas del séptimo día han ido por todo el mundo, tratando de llevar el mensaje de Jesús a los que aún no lo han oído.

¿Por qué la difusión del mensaje evangélico a los demás es tan beneficioso espiritualmente para quienes lo esparcen? Es decir, ¿por qué ayudar a los demás es una de las mejores formas de estar preparados para la venida de Jesús?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

Los mensajes de los tres ángeles deben ser predicados a “toda nación, tribu, lengua y pueblo” (Apoc. 14:6). De este modo, dondequiera que viva la gente, el mensaje tiene que llegar a ella. Y, como tantos viven ahora en ciudades, a las ciudades tenemos que ir.

En realidad, la urgencia por la predicación en las ciudades se intensificó en 2007, cuando los expertos en estadística de las Naciones Unidas declararon que, por primera vez en la historia, la mayoría de la población del mundo vive en áreas metropolitanas. Hoy, el ministerio urbano ha llegado a ser el problema central para la misión de nuestra Iglesia.

En muchas naciones, la tarea de extender el evangelio se ha logrado más en los pueblos pequeños y las regiones rurales que en las ciudades. Las encuestas han mostrado que en algunos de los complejos urbanos principales, la mayoría de la gente nunca oyó hablar de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, y no saben nada de los “mensajes de los tres ángeles”.

Por eso, es claro que para alcanzar al mundo tenemos que extendernos hacia las ciudades.

Las ciudades reúnen muchas culturas, grupos étnicos, lenguas y religiones diferentes. Tradicionalmente, las personas siempre han tenido “barrio” o territorio específico, pero eso está cambiando en la actualidad: toda clase de gente vive al lado de otros en todas las regiones metropolitanas.

Esta realidad multicultural crea riesgos y complejidades, pero también provee grandes oportunidades para el evangelio.

En las grandes ciudades hay mayor tolerancia a las ideas nuevas, una mayor disposición a escuchar acerca de enseñanzas religiosas nuevas.

La ciudad puede proveer acceso a muchas personas que de otro modo nunca podrían haberse encontrado cerca del mensaje adventista del séptimo día.

En la ciudad, hay de todo: más personas, más edificios, más tránsito, y más problemas. Esto presenta un desafío para las iglesias.

Los que comparten el evangelio no pueden ignorar las enormes necesidades humanas que los rodean y concentrarse sólo en el mensaje, porque eso desacreditaría el mensaje.

Si nuestras acciones no demuestran la compasión, la gracia y la esperanza de las que hablamos, entonces lo que hablemos no tendrá poder. Será como una voz más que compite por los oídos de las masas.

Por causa del gran tamaño de las poblaciones urbanas, es fácil olvidar que la fe es personal. El resultado final de alcanzar las ciudades y otros lugares es que muchas personas encuentran una relación personal con Cristo.

La investigación ha demostrado que la gran mayoría de los conversos a la Iglesia Adventista dicen que se unieron por tener una relación con un adventista que conocían. El alcanzar a otros involucra el tener una relación de amistad con aquellos que estamos procurando alcanzar.

Arar la tierra, plantar las semillas, nutrir las plantas hasta la cosecha y conservar la cosecha resultan mejor si hay una sólida relación.

Necesitamos aprender cómo hacernos amigos de la gente, cómo escucharla, y cómo apreciarla. Estos elementos son esenciales en el trabajo de extensión, pero más en el ministerio urbano, en el que los individuos se sienten perdidos y solos, y creen que nadie se interesa en ellos entre tanta población.

Nadie dice que la tarea de alcanzar a otros y la tarea de la predicación son cosas fáciles. La verdad es que no lo son. Los seres humanos son caídos, corruptos, y no son naturalmente espirituales. Como Pablo dijo de sí mismo: “Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado” (Rom. 7:14). Si Pablo dijo eso, ¿qué pasará con los que no conocen al Señor, o que nunca tuvieron una transformación con Jesús?

Muchas veces encontramos personas de nuestra iglesia que salen de vivir en las ciudades a vivir en el campo, siguiendo los consejos divinos. Esto crea un poquito de confusión.

Cierto experto adventista del séptimo día en ministerios urbanos hizo un estudio en gran cantidad de los artículos de periódicos de Elena de White, con respecto a su consejo de salir  de las ciudades, o entrar en ellas.

De 107 artículos disponibles en este tema, 24 daban instrucción acerca de salir de las ciudades o establecer instituciones fuera de las ciudades.

Sin embargo, 75 artículos daban instrucciones específicas para mudarse a las ciudades a fin de alcanzar a sus habitantes.

Los otros 8 artículos eran neutrales.

El consejo de Elena de White acerca de la obra en las ciudades, se puede definir de la siguiente manera: ella defendía que las instituciones de la Iglesia hicieran su trabajo desde fuera de la ciudad, o tuvieran sus bases afuera de la ciudad; y cuando trataba de la obra de la iglesia local, abogaba por trabajar desde dentro de la ciudad.

Las ciudades son conocidas por su mala influencia sobre la gente. Las personas afrontan muchas tentaciones que el enemigo usa para mantenerlas vinculadas con el pecado. Por eso, no es extraño que alcanzar las ciudades no sea una tarea sencilla; sin embargo, es una tarea que hay que hacer, y que nosotros, como iglesia, tenemos que hacerla.
Sí, mi hermano que me lees: Cerca hay un alma agobiada… Vé y ayúdala… nos ordena el Señor (Himnario adventista, 494).
 
Cerca un alma agobiada está, vé y ayúdala hoy; 
hazle algún acto de pura amistad, vé y ayúdala hoy.
Coro: Vé y ayúdale hoy. No tardes, mas dí: «Ya voy». Al débil sé escudo y viste al desnudo. ¡Oh vé y ayúdale hoy! ¿Ves a un vecino sin fuerza y valor? Vé y ayúdale hoy; habla a su oído palabras de amor, vé y ayúdale hoy.
¿Otro confronta una cruel tentación? Vé y ayúdale hoy; 
clama al Señor en ferviente oración; vé y ayúdale hoy.
Vé y ayúdale hoy; dí con la Esposa y Espíritu: «Ven». 
Vé y ayúdale hoy.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Las últimas palabras de Cristo a sus discípulos muestran la importancia que tiene la obra de diseminar la verdad. Justamente antes de su ascensión les dio esta orden: “Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado: y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”…

Qué bueno sería que todos los que tienen la luz de la verdad siguieran el ejemplo dado por Cristo, y no emplearan el tiempo, los talentos y los medios que Dios les ha dado en solo uno o dos lugares, cuando la luz de la verdad debe ir a todo el mundo. La maravillosa manifestación de la gracia revelada en el mensaje evangélico debe ir a todo lugar (Cada día con Dios, p. 105).

El único modo de crecer en la gracia consiste en hacer desinteresadamente la obra que Cristo nos ordenó hacer: dedicarnos, en la medida de nuestra capacidad, a auxiliar y beneficiar a los que necesitan la ayuda que podemos darles. La fuerza se desarrolla con el ejercicio: la actividad es la condición misma de la vida…

La iglesia de Cristo es la intermediaria elegida por Dios para salvar a los hombres. Su misión es llevar el evangelio al mundo. Esta obligación recae sobre todos los cristianos. Cada uno de nosotros, hasta donde lo permitan sus talentos y oportunidades, tiene que cumplir el mandato del Salvador. El amor de Cristo que nos ha sido revelado nos hace deudores de cuantos no lo conocen. Dios nos dio luz, no solo para nosotros, sino para que la derramemos sobre ellos.

Si los discípulos de Cristo comprendiesen su deber, habría mil heraldos proclamando el evangelio a los paganos donde hoy hay uno… Y se trabajaría con más ardor en favor de las almas en los países cristianos (El camino a Cristo, pp. 80. 81).

La misericordia implica la imperfección de aquel sobre quien se la confiere. La misericordia comenzó su existencia activa debido a la imperfección del hombre. El pecado no es objeto del amor de Dios, sino de su odio. Sin embargo, se compadece del pecador porque el culpable lleva la imagen del Creador y ha recibido de él las facultades que hacen posible que llegue a ser un hijo de Dios, no por sus propios méritos sino por los méritos imputados de Jesucristo, por el gran sacrificio que el Salvador ha hecho en su favor (A fin de conocerle, p. 47).

Tomad vuestras Biblias e id a Dios en ferviente oración. Pedidle que os enseñe a conoceros a vosotros mismos, a comprender vuestras debilidades, vuestros pecados e inconsecuencias, a la luz de la eternidad. Pedidle que os muestre cómo aparecéis a la vista del Cielo. Esto es una obra individual… En humildad enviad vuestra petición a Dios y no descanséis día y noche hasta que podáis decir: Oye lo que el Señor ha hecho por mí. —hasta que podáis dar un testimonio viviente y hablar de victorias ganadas (En los lugares celestiales, p. 90).

55


Lección 8 | Lunes 21 de mayo______________________________________________________

EL LADRÓN EN LA CRUZ Y EL “EVANGELIO ETERNO”

En Apocalipsis 14:6, el mensaje que debe proclamarse al mundo es “el evangelio eterno”. Es un mensaje de esperanza para las personas de un mundo que, en sí, no ofrece absolutamente ninguna esperanza.

Lee Lucas 23:32 al 43. ¿Cómo revela esta historia la gran esperanza del “evangelio eterno” para todos los pecadores?

Lucas 23:32-43

32 Llevaban también con él a otros dos, que eran malhechores, para ser muertos. 33 Y cuando llegaron al lugar llamado de la Calavera, le crucificaron allí, y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. 34 Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes. 35 Y el pueblo estaba mirando; y aun los gobernantes se burlaban de él, diciendo: A otros salvó; sálvese a sí mismo, si éste es el Cristo, el escogido de Dios. 36 Los soldados también le escarnecían, acercándose y presentándole vinagre, 37 y diciendo: Si tú eres el Rey de los judíos, sálvate a ti mismo. 38 Había también sobre él un título escrito con letras griegas, latinas y hebreas: ESTE ES EL REY DE LOS JUDÍOS. 39 Y uno de los malhechores que estaban colgados le injuriaba, diciendo: Si tú eres el Cristo, sálvate a ti mismo y a nosotros. 40 Respondiendo el otro, le reprendió, diciendo: ¿Ni aun temes tú a Dios, estando en la misma condenación? 41 Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas éste ningún mal hizo. 42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.

Al escribir sobre el ladrón, Elena de White dijo que, aunque no era un criminal empedernido, había estado tratando de “ahogar su convicción acerca de Jesús”, y se había “hundido más y más en el pecado, hasta que fue arrestado, juzgado como criminal y condenado a morir en la cruz” (DTG 697).

No obstante, ¿qué ocurrió con él? Mientras pendía de la cruz, el ladrón tuvo un destello de quién era Jesús, por lo que clamó: “Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino” (Luc. 23:42).

Y, ¿cómo le respondió Jesús? ¿Le dijo: Bueno, amigo, me gustaría ayudarte, pero no deberías haber reprimido tus convicciones hundiéndote cada vez más en el pecado? Jesús ¿citó uno de sus sermones anteriores: “Si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos” (Mat. 5:20)? ¿Acaso Jesús, de alguna manera, trajo a colación los errores pasados del ladrón?

No. Al contrario, Jesús se dirigió a este criminal, este ladrón con un carácter defectuoso que no tenía nada que ofrecer del lado de la justicia y que antes lo había estado maldiciendo (Mat. 27:44). Al verlo como un hombre nuevo, Jesús básicamente le dijo: Te digo, ahora mismo, te doy la seguridad, ahora mismo, de que tu pecado, tus delitos, tus faltas, te son perdonados, y por lo tanto “estarás conmigo en el paraíso” (Luc. 23:43).

Este es el “evangelio eterno”, el fundamento del mensaje del primer ángel. Sin esta verdad, nada de lo que enseñemos acerca de la Ley, el sábado o el estado de los muertos tiene importancia. ¿De qué sirven estas enseñanzas sin que el “evangelio eterno” esté en el corazón de todas ellas?

¿Qué esperanza puedes obtener de esta historia?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

39 Y uno de los malhechores que estaban colgados le injuriaba, diciendo: Si tú eres el Cristo, sálvate a ti mismo y a nosotros. 40 Respondiendo el otro, le reprendió, diciendo: ¿Ni aun temes tú a Dios, estando en la misma condenación? 41 Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas éste ningún mal hizo. 42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.  (Lucas 23)

Probablemente la descripción de este relato hecho por Lucas, es la mejor de los cuatro evangelios. Lucas no describe a los dos hombres que murieron con Jesús, como ladrones; él los llama malhechores, sin especificar el crimen que había llevado a estos hombres a la agonía de la cruz.

 Uno de ellos, en medio de la agonía de la muerte, se convierte en uno de los hombres más grandes que haya vivido en la historia del mundo.

 Si analizamos su conversación, descubrimos una rica filosofía, una audacia de pensamientos, y un amplio sentido del concepto de su conversación.

 Esta es una de las más santas declaraciones hecha por los labios de un ser humano al Dios de los cielos, en la triste condición agónica de la muerte. Esta conversación entre el salvado y el Salvador, no encuentra cabida en las letras y pensamientos de un escritor del género del romanticismo.

 La grandeza intelectual del malhechor de la cruz consiste en descubrir a un Rey en una víctima, en reconocer a Dios en un hombre que estaba agonizando, y contemplar y descubrir la cruz como el único camino al altísimo trono de la gracia divina.

 Él percibió la inmortalidad de Cristo y allí mismo la proclamó; supo que Jesucristo no era una materia destructible, sino que sencillamente estaba entregando por su propia voluntad su tabernáculo de carne y sangre, con tal de salvar al pecador.

 Sin duda alguna después de llegar a tan sublime, noble y elevada concepción de lo divino, no dudó por un momento en formular el más grande y audaz pedido que un hombre puede hacer, que es entrar en el paraíso perdido, ofrecido de nuevo al hombre por medio de la sangre de Jesús, el Redentor del mundo.

 El malhechor de la cruz presentó a Cristo la verdadera moneda de oro de la conversión del hombre; hubo confesión de pecados, hubo espiritualidad en su mente, hubo ansiedad por otros, hubo una fe poderosa, hubo reconocimiento en el poder de Cristo.

 Su pedido atravesó más allá de la línea de la vergüenza, de la desesperación y de la muerte; fue más allá de la distancia y de los tiempos y, en medio de la aparente  derrota al estar colgando de una cruz, aseguró una mansión en el paraíso, aseguró una corona de salvación, un vestido de luz , de gloria y santidad, y una amistad para siempre con el Creador del mundo y del universo.

 La palabra arrepentimiento no es sólo remordimiento. La palabra arrepentimiento constituye un cambio de la mente, una alteración de los pensamientos, sentimientos y conducta.

Cuando un pecador en verdad se arrepiente, no solamente se lamenta por el pasado, no solamente le tiene miedo a las consecuencias del futuro, y no solamente clama por misericordia; sino que comienza a detestar el pecado, y no sólo por sus consecuencias, sino por el hecho de lo repugnante que es el pecado.

Un pecador arrepentido deja de estar en armonía con sus antiguos gustos y placeres. La santidad que antes repudiaba, ahora viene a ser compañera íntima de su alma. Esto es precisamente lo que le pasó al ladrón en la cruz: tuvo un cambio en su corazón y en su carácter, y si su vida se le hubiera prolongado, definitivamente hubiera tenido también un cambio radical en su conducta. 

 En el monte Calvario encontramos tres cruces diferentes, con tres muertes diferentes:

1-La muerte de un pecador

2-La muerte de un Salvador

3-La muerte de un salvado

 Por mala que haya sido la vida de una persona en este mundo, si ésta busca el perdón y la salvación, los consigue, ya que Dios nunca le niega estos dos atributos a aquellos que en un momento de la vida deciden buscar el camino que lleva al cielo.

 En la Biblia encontramos a una prostituta que fue salvada; encontramos asesinos como Moisés, Pablo y David que fueron salvados; encontramos al blasfemo Pedro que fue salvado y al final encontramos a un malhechor (ladrón, quizá) que en el último momento de su vida también alcanzó la salvación.  

Estas son las características del ladrón salvado:

-No era pagano, era judío, técnicamente un creyente en el verdadero Dios

-Creía en la futura recompensa, tanto para el salvado como para el condenado

-Por su mal proceder se había convertido en un criminal sentenciado a muerte

 -Su arrepentimiento era verdadero: estaba consciente de su pecado, reconocía su culpabilidad, y reprobaba su mala conducta

 -Su fe era fuerte: creía que Cristo tenía un reino, creía que Cristo podía escuchar su pedido, creía que podía conseguir de Cristo una bendición.

 

42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. (Lucas 23)

 Su oración:

-Era corta: sólo unas ocho palabras

-Era humilde: sólo pedía ser recordado

-Era objetiva: trascendía mas allá de la tumba

-Era franca y abierta: esta oración no era entregada a una persona admirada ni aplaudida por el mundo, sino a un despreciado, calumniado, y condenado a morir en la cruz. Detrás de todo esto, el ladrón descubría la grandeza, la santidad y la gloria de Cristo.

-Era confiada: recordaba su mala vida pasada, pero reposaba en la gracia salvadora de Cristo

-Era ferviente: eran palabras de un pecador que despierta al borde de la muerte

-Era exaltadora: reconocía a Cristo como Rey y Salvador del mundo

-Era completa: en esta oración se encuentra la base del cristianismo y el propósito de la religión, que es alcanzar la salvación

 

43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.  (Lucas 23)

Conclusiones en la respuesta de Cristo:

-Nos demuestra con cuánta rapidez Cristo nos salva

-La salvación es dada al hombre solamente por gracia, y no por obras ni méritos

-Cristo no sólo puede salvarnos en un tiempo corto, sino que también en poco tiempo nos puede santificar y hacernos 12 …aptos para participar de la herencia de los santos en luz” (Colosense 1)

-“ el uno será tomado, y el otro será dejado” (Mateo 24: 40)

 -Este es el único caso de una conversión en el lecho de muerte que la Biblia ha registrado.

Si algunos son salvados a la hora de la muerte, hay otros que no lo son. En esta historia encontramos un dulce consuelo y esperanza firme, pero también encontramos una seria advertencia. No todos son salvados a la hora de la muerte; para muchos la hora de la muerte no es la hora de la salvación.  Dos seres malhechores pendían de la cruz, los dos estaban en el mismo lugar, los dos contemplaron la misma escena, los dos escucharon las mismas palabras, los dos tuvieron la misma oportunidad de arrepentimiento y salvación. Pero el resultado fue muy diverso: para uno el lecho de la muerte fue el momento de la salvación, para el otro el lecho de la muerte fue el momento do doble condenación. Nosotros ejercemos un dominio sobre las bisagras que abren la puerta a la gloria eterna, o sobre las bisagras que abren las puertas al infierno.

 

Algunos atribuyen a Juan de Ávila este soneto melodioso:
 
No me mueve, mi Dios, para quererte
el Cielo que me tienes prometido
ni me mueve el Infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
Tú me mueves, Señor. Múeveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido;
muéveme el ver tu cuerpo tan herido,
muévenme tus afrentas, y tu muerte.
Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera,
que, aunque no hubiera Cielo, yo te amara,
y, aunque no hubiera Infierno, te temiera.
No me tienes que dar porque te quiera,
pues, aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.

 

 

La cruz de Cristo se convirtió en su íntimo altar; allí Cristo en sus momentos de mayor agonía elevó las plegarias más profundas que un ser puede elevar al Padre celestial.

 Pero la cruz no solamente fue el altar de oración de Cristo, también fue el púlpito de Cristo. Pendiente de la cruz entregó el más corto y más profundo sermón que un ser pueda predicar: De cierto te digo hoy: Estarás conmigo en el paraíso.”

 Probablemente fue en este altar y púlpito de agonía donde Cristo dio la prueba más grande de su poder y de su voluntad salvadora, como nunca antes lo había hecho.

 El día en que Cristo era el ser más débil, moribundo en la cruz, fue el día que mostró el mayor poder de salvación que hay en él.

 La hora en la que Jesucristo era doblegado por el dolor físico, demostró su ternura y cuidado para con todos los que también sufren.

 El momento en que el Dios moría, en ese momento entregaba el regalo de vida eterna a un pecador arrepentido.

 ¡Sublime nuestro Cristo, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo! Digámosle hoy: Mi amor y vida doy a ti (Himnario adventista, 276)

 
Mi amor y vida doy a ti,
Jesús,  pues en la cruz por mi
vertiste sangre carmesí,
mi Dios, mi Salvador.
Coro: Mi amor y vida doy a ti,
pues fuiste a la cruz por mí;
mi ser entero, doylo a ti,
mi Dios,  mí Salvador.
Que tú me salvas, bien lo sé;
he puesto en ti mi humilde fe;
feliz contigo viviré,
mi Dios, mi Salvador.
Tú que moriste en la cruz,
concédeme, Señor Jesús,
que ande en tu brillante luz,
mi Dios, mi Salvador.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Los ladrones que fueron crucificados con Jesús sufrieron la misma tortura física que él. Pero solo uno de ellos se endureció; el dolor lo desesperó y le infundió rebeldía. Se unió a las burlas de los sacerdotes y vilipendió a Jesús diciéndole: “Si tú eres el Cristo, sálvate a ti mismo y a nosotros”. Lucas 23:39. El otro malhechor no era un criminal endurecido. Cuando oyó las diatribas de su compañero de fechorías, “le reprendió, diciendo: ¿Ni aún temes tú a Dios, estando en la misma condenación? Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas éste ningún mal hizo”. Vers. 40, 41. Acto seguido, cuando su corazón sintió la atracción de Cristo, la iluminación celestial invadió su mente. En Jesús, magullado, escarnecido y colgado de una cruz, vio a su Redentor, a su única esperanza, y se dirigió a él con humilde fe (La historia de la redención, p. 231).

Al ser condenado por su crimen, el ladrón se había llenado de desesperación; pero ahora brotaban en su mente pensamientos extraños, impregnados de ternura. Recordaba todo lo que había oído decir acerca de Jesús… El Espíritu Santo iluminó su mente y poco a poco se fue eslabonando la cadena de la evidencia. En Jesús, magullado, escarnecido y colgado de la cruz, vio al Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. La esperanza se mezcló con la angustia en su voz, mientras que su alma desamparada se aferraba de un Salvador moribundo. “Señor, acuérdate de mí —exclamó— cuando vinieres en tu reino”.

Prestamente llegó la respuesta. El tono era suave y melodioso, y las palabras, llenas de amor, compasión y poder: De cierto te digo hoy: estarás conmigo en el paraíso… El ladrón arrepentido sintió la perfecta paz de la aceptación por Dios (Conflicto y valor, p. 326).

Jesús no lo ha abandonado para que usted se asombre por las pruebas y dificultades que encuentra. Él se lo ha expuesto todo, como también le ha dicho que no se quede abatido ni oprimido cuando vienen las pruebas. Mire a Jesús, su Redentor; tenga ánimo y regocíjese… Jesús no está en la tumba nueva de José. Resucitó y ascendió al cielo para interceder allí en nuestro favor. Tenemos un Salvador que nos amó de tal manera que murió por nosotros, a fin de que por él pudiésemos tener esperanza, fuerza y valor, y un lugar con él en su trono. Él puede y quiere ayudamos si lo invocamos.

Si procura llevar solo sus cargas, será aplastado por ellas. Usted lleva pesadas responsabilidades. Jesús las conoce, y no lo dejará solo, si usted no lo abandona. Él se siente honrado cuando le confía la custodia de su alma como a un Creador fiel. Lo invita a esperar en su misericordia, creyendo que él no desea que lleve con su propia fuerza estas pesadas responsabilidades. Tan solo crea, y vera la salvación de Dios (Testimonios para la iglesia, tomo 8. p. 140).

56


Martes 22 de mayo | Lección 8_____________________________________________________

TEMED A DIOS Y DADLE GLORIA

Después de hablar de la proclamación del “evangelio eterno” a todo el mundo, el mensaje del primer ángel se expande en este mensaje. Al proclamar el “evangelio eterno”, debemos incluir las verdades que forman parte de este mensaje del evangelio para este tiempo. En otras palabras, la “verdad presente” para los últimos días también incluye Apocalipsis 14:7.

Lee Apocalipsis 14:7. ¿Qué significa temer a Dios y darle gloria? ¿Cómo vamos a hacer eso? ¿Cómo encajan estos conceptos con el evangelio?

Apocalipsis 14:7

diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas.

Temer a Dios y darle gloria no son conceptos inconexos. Si realmente tememos a Dios en el sentido bíblico, le daremos gloria. Una cosa debería llevar directamente a la otra.

Lee Génesis 22:12, Éxodo 20:20, Job 1:9, Eclesiastés 12:13 y Mateo 5:16. ¿De qué modo estos versículos nos ayudan a entender lo que significa “temed a Dios” y de qué manera eso se relaciona con darle gloria?

Génesis 22:12

12 Y dijo: No extiendas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas nada; porque ya conozco que temes a Dios, por cuanto no me rehusaste tu hijo, tu único.

Éxodo 20:20

20 Y Moisés respondió al pueblo: No temáis; porque para probaros vino Dios, y para que su temor esté delante de vosotros, para que no pequéis.

Job 1:9

Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: ¿Acaso teme Job a Dios de balde?

Eclesiastés 12:13

13 El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre.

Mateo 5:16

16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.

En estos versículos, la idea de temer a Dios está vinculada a la obediencia, y cuando obedecemos a Dios, cuando hacemos lo correcto, le damos gloria. Aunque a menudo se dice que temer a Dios es reverenciarlo, debería ser más profundo que eso. Se nos dice que temamos a Dios. Somos seres caídos. Somos pecadores. Merecemos la muerte. ¿Quién alguna vez no se ha visto sorprendido al darse cuenta de la maldad de sus actos y lo que ellos merecerían a manos de un Dios justo por esas obras? Este es el temor de Dios. Y es el temor que nos lleva en primer lugar a la Cruz en busca de perdón, y en segundo lugar a reclamar el poder de Dios para limpiarnos del mal, que, si no fuera por la Cruz, nos haría perder nuestra alma (ver Mat. 10:28).

¿Cuál ha sido tu experiencia con el temor de Dios? ¿En qué sentido una buena dosis de este temor podría ser bueno para nosotros espiritualmente, y nos ayudaría a tomar más en serio nuestra fe y lo que Dios nos pide?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

(Martes, Miércoles, y Jueves)

Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo,  diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas. (Apocalipsis 14)

 

Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo…  (Apocalipsis 14)

 Es un ángel que está volando por en medio del cielo con un evangelio eterno:

-Es un evangelio eterno porque anuncia negocios que solamente pertenecen a la economía de la salvación eterna

-Es un evangelio eterno porque proviene de un Dios eterno

-Es un evangelio eterno porque anuncia a un Dios eterno

-Es un evangelio eterno porque está basado en una alianza eterna entre Dios y el hombre

-Es un evangelio eterno porque a pesar de la oposición que ha tenido, siempre se ha predicado y siempre se predicará

-Es un evangelio eterno porque ofrece la vida eterna

-Es un evangelio eterno porque trae una felicidad eterna a todo aquel que lo acepte

 

El predicador es un ángel:

Su tema es glorioso: Es un mensaje de amor divino, su verdad es absoluta y su redención es completa.

 Es un evangelio para todo el mundo: Todo hombre lo necesita y es igual para todos

 El mensaje es urgente, el tiempo es corto, la vida es incierta.

 El mensaje es original: Es uno en su clase, no hay nada que se le pueda comparar, lleva la firma de su Autor; nació en la mente divina, esa mente divina que es la Fuente de las creaciones puras.

Este mensaje es el primero y el último del sistema de la verdad divina; es antiguo, pero también es nuevo. La mayoría de cosas que existen en el mundo pierden su frescura, y pronto envejecen; pero el evangelio de Dios siempre permanece nuevo, lleno de la vida de Dios, tan fresco como el primer día de la creación. Mientras más en contacto estamos con el evangelio eterno, más nos profundizamos en su belleza y en sus misterios;  siempre nos conduce a las fuentes más profundas de la mente divina.

 El ángel misionero tiene un libro que contiene el evangelio eterno. Un libro parece ser una arma débil e insignificante para conquistar la destruida moral de todo un mundo, especialmente si el mensaje no es predicado por el ángel, sino por el débil y falible hombre. 25 Pero lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres.” 1 Corintios 1

Fue la insignificante vara de Moisés la que, al extenderse invocando el nombre de Dios, hizo milagros  y también abrió un mar. Fue una insignificante piedra y una onda en manos de un humilde pastor de ovejas que invocaba al Dios de los ejércitos, la que derrotó al poderoso guerrero filisteo. Fueron doce humildes pescadores del Mar de Galilea los que en el nombre de Cristo iluminaron a un mundo que estaba en tinieblas espirituales.

Que no te dé temor hablar por CRISTO, mi hermano. Repite con fe el mandato divino 

 

1
No te dé temor hablar por Cristo,
haz que brille en ti su luz;
al que te salvó confiesa siempre,
todo debes a Jesús.

Coro
No te dé temor, no te dé temor,
nunca, nunca, nunca.
Es tu Salvador amante;
nunca, pues, te dé temor.

2
No te dé temor vivir por Cristo
cuanto de tu parte esté;
obra con amor, con fe y constancia:
tus trabajos premiará.

3
No te dé temor sufrir por Cristo
los reproches, o el dolor;
sufre con amor tus pruebas todas,
cual sufrió tu Salvador.

4
No te dé temor morir por Cristo:
vida y verdad es él;
él te llevará con gran ternura
a su célico vergel.

(Himnario adventista, 559)

 

“Temed a Dios, y dadle gloria” (Apoc. 14:7) es el primero de los tres mensajes angélicos, tan centrales en la vida y la fe adventistas. Temer a Dios no es tenerle miedo, como a menudo se piensa. Es darse cuenta de cómo es Dios y cuáles son sus demandas para nosotros. Es un acto de fe que involucra total lealtad a él. Dios llega a ser el único Guía y Árbitro de nuestra vida, de nuestros pensamientos, acciones, relaciones y destino. El discipulado basado en esa clase de “temor” se encuentra sobre un terreno seguro.

Este es el verdadero temor:

Mas os digo, amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a éste temed. ¿No se venden cinco pajarillos por dos cuartos? Con todo, ni uno de ellos está olvidado delante de Dios. Pues aun los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis, pues; más valéis vosotros que muchos pajarillos. Os digo que todo aquel que me confesare delante de los hombres, también el Hijo del Hombre le confesará delante de los ángeles de Dios; mas el que me negare delante de los hombres, será negado delante de los ángeles de Dios. 10 A todo aquel que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que blasfemare contra el Espíritu Santo, no le será perdonado. 11 Cuando os trajeren a las sinagogas, y ante los magistrados y las autoridades, no os preocupéis por cómo o qué habréis de responder, o qué habréis de decir; 12 porque el Espíritu Santo os enseñará en la misma hora lo que debáis decir. (Lucas 12: 4 -12)

El pasaje muestra con claridad a quién hay que temer y a quién no. No necesitamos temer a las fuerzas que sólo pueden afectar nuestro cuerpo en el mundo presente. En cambio, debemos temer y obedecer a Dios, porque en sus manos está nuestro destino eterno.

Nuestro Dios –cuyos ojos están sobre el gorrión  y quien ha contado nuestros cabellos− es amante y se preocupa por nosotros; por eso, cada uno de nosotros es infinitamente precioso a su vista. Si realmente creyéramos eso, muchos temores que nos perturban aquí en la tierra desparecerían de nuestras vidas.

 

De acuerdo con el libro de los Proverbios, obtenemos mucha ganancia en nuestras vidas cuando tenemos el temor correcto hacia Dios.

El principio de la sabiduría es el temor de Jehová. (1:7) «El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.»

El temor del SEÑOR es fuente de vida, (14:27) «El temor de Jehová es manantial de vida, para apartarse de los lazos de la muerte.»

El temor del SEÑOR es instrucción de sabiduría, (15:33)  «El temor de Jehová es enseñanza de sabiduría; y a la honra precede la humildad.»

 El temor del SEÑOR es aborrecer el mal. (8:13) «El temor de Jehová es aborrecer el mal; la soberbia y la arrogancia, el mal camino, y la boca perversa, aborrezco.»

 El temor del SEÑOR aumentará los días. (10:27) «El temor de Jehová aumentará los días; mas los años de los impíos serán acortados»

 En el temor del SEÑOR hay confianza segura. (14:26) «En el temor de Jehová está la fuerte confianza; y esperanza tendrán sus hijos.»

 En el temor del SEÑOR el hombre se aparta del mal. (16:6) «Con misericordia y verdad se corrige el pecado, y con el temor de Jehová los hombres se apartan del mal.»

 El temor del SEÑOR conduce a la vida, (19:23) «El temor de Jehová es para vida, y con él vivirá lleno de reposo el hombre; no será visitado de mal.»

 El temor del SEÑOR es riqueza, honor y vida. (22:4) «Riquezas, honra y vida son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová.»

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Juan en el Apocalipsis predice la proclamación del mensaje evangélico precisamente antes de la segunda venida de Cristo. El contempla a un “ángel volar por en medio del cielo, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a todos los que moran en la tierra, y a toda nación y tribu y lengua y pueblo, diciendo en alta voz: Temed a Dios, y dadle honra: porque la hora de su juicio es venida”. Apocalipsis 14:6. 7.

En la profecía, esta amonestación referente al juicio, con los mensajes que con ella se relacionan, es seguida por la venida del Hijo del hombre en las nubes de los cielos. La proclamación del juicio es el anunció de que la segunda aparición del Salvador está por acaecer. Y a esta proclamación se denomina el evangelio eterno. Así se ve que la predicación de la segunda venida de Cristo, el anunció de su cercanía, es una parte esencial del mensaje evangélico (Palabras de vida del gran Maestro, p. 179).

Sus mandamientos y su gracia están adaptados a nuestras necesidades, y sin ellos no podemos ser salvos, no importa qué hagamos Requiere una obediencia que él pueda aceptar. La ofrenda de bienes, o cualquier otro servicio, sin la participación del corazón, no será aceptado. La voluntad debe ser sometida a él. El Señor requiere de ustedes una mayor consagración, una mayor separación del espíritu y la influencia del mundo…

La conducta de los cristianos es como la de su Señor. El enarbola el estandarte, y a nosotros nos corresponde decidir si nos vamos a reunir en torno de ese estandarte o no. Nuestro Señor y Salvador dejó a un lado su dominio, sus riquezas y su gloria, y vino a buscarnos, para poder salvamos de la miseria y hacer de nosotros seres semejantes a él. Se humilló a sí mismo y tomó nuestra naturaleza para que pudiéramos aprender de él y, al imitar su vida de generosidad y abnegación, pudiéramos seguirlo paso a paso hasta el Cielo. No podemos ser iguales al Modelo, pero podemos parecemos a él, y de acuerdo con nuestra capacidad obrar de la misma manera (Testimonios para la iglesia, tomo 2, pp. 153, 154).

Los padres y las madres que ponen a Dios en primer lugar en su familia, que enseñan a sus hijos que el temor del Señor es el principie de la sabiduría, glorifican a Dios delante de los ángeles y delante de lo: hombres…

El sagrado privilegio de comulgar con Dios aclara y define la visión de las cosas gloriosas que se han preparado para los que aman a Dios y reverencian sus mandamientos. Debemos infundir reverencia a nuestra vida diaria…

Complicamos nuestros deberes diarios de la vida con demasiadas cosas mezquinas y comunes, y por eso no vamos al invisible. De esa manera perdemos muchas y ricas bendiciones dentro de nuestra experiencia religiosa.

La verdadera reverencia se revela mediante la obediencia. Dios no exige nada que no sea esencial, y no hay mejor manera de manifestar la reverencia que tanto le agrada que obedeciendo sus palabras (Mi vida hoy, p. 293).

57


Lección 8 | Miércoles 23 de mayo__________________________________________________

LA HORA DE SU JUICIO HA LLEGADO

En el mensaje del primer ángel, la idea de temer a Dios y darle gloria está relacionada con el Juicio (Apoc. 14:7). Si hay una enseñanza clara en la Biblia, es la de que Dios es un Dios de justicia y de juicio. Un día, el juicio y la justicia, tan escasos en este mundo, ciertamente llegarán.

No es de extrañar que la gente necesite temer a Dios.

Y por eso el “evangelio eterno” también incluye la realidad del Juicio. ¿Cuál es la relación entre estos dos elementos? Si el evangelio expresa “buenas nuevas”, significa que, aunque todos somos pecadores y transgredimos la Ley de Dios, cuando llegue el Día del Juicio, como el ladrón en la cruz, no enfrentaremos la pena ni el castigo que merecemos por nuestro pecado y transgresión.

Lee Mateo 12:36, Eclesiastés 12:14, Romanos 2:6 y 1 Corintios 4:5. Luego, hazte esta pregunta: ¿Cuán bien me iría si me valiera de mis propios méritos?

Mateo 12:36

36 Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.

Eclesiastés 12:14

14 Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala.

Romanos 2:6

el cual pagará a cada uno conforme a sus obras:

1 Corintios 4:5

Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.

El Dios que conoce el número de cabellos de nuestra cabeza juzgará al mundo. Pero es precisamente por eso que el “evangelio eterno” es una buena noticia. Se viene el Juicio, pero no hay “condenación” para los fieles seguidores de Jesús, los lavados, los santificados y justificados en el nombre del Señor Jesús (ver 1 Cor. 6:11), porque Jesucristo es su justicia, y su justicia es lo que los hace salir adelante en ese juicio.

“El hombre no puede por sí mismo hacer frente a estas acusaciones. Con sus ropas manchadas de pecado, confiesa su culpabilidad delante de Dios. Pero Jesús, nuestro Abogado, presenta una súplica en favor de todos los que mediante el arrepentimiento y la fe le han confiado el cuidado de sus almas. Intercede por su causa y vence a su acusador con los poderosos argumentos del Calvario. Su perfecta obediencia a la Ley de Dios, aun hasta la muerte de cruz, le ha dado toda potestad en el cielo y en la Tierra, y él solicita a su Padre misericordia y reconciliación para el hombre culpable” (EJ 228).

¿Qué nos enseña la realidad del Juicio acerca de nuestra absoluta necesidad de perdón? ¿Cómo puedes aprender a darles a los que te han hecho mal la clase de gracia y perdón que Dios nos ofrece a través de Jesús?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

El comentario de este día está junto con el día martes.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Muchos profesos cristianos asegurarían hoy que Daniel fue demasiado exigente y lo tacharían de estrecho y fanático. Consideran de poca monta la cuestión de la comida y la bebida, como para requerir una actitud tan decidida y que pudiera involucrar el sacrificio de toda ventaja terrenal. Pero los que razonan de esta manera se darán cuenta en el día del juicio que se habían alejado de los expresos requerimientos divinos y habían establecido su propio juicio como norma de lo bueno y lo malo. Entonces comprenderán que lo que para ellos parecía sin importancia, era de suma importancia ante los ojos de Dios. Las demandas de Dios se deben obedecer religiosamente. Los que aceptan y obedecen uno de los preceptos divinos porque les parece conveniente hacerlo, mientras ignoran otro porque les parece que su observancia les demandaría un sacrificio, rebajan las normas del bien y con su ejemplo arrastran a otros a considerar con liviandad la sagrada ley de Dios. “Así dice el Señor”, debiera ser nuestra norma en todo tiempo (Consejos sobre la salud, p. 69).

Es el privilegio de toda persona vivir de tal manera que Dios la apruebe y la bendiga. Podéis estar cada hora en comunión con el cielo; no es la voluntad de vuestro Padre celestial que continuamente estéis bajo tribulación y tinieblas. Debierais cultivar el respeto propio, viviendo de tal modo que seáis aprobados por vuestra propia conciencia, y delante de los hombres y los ángeles… Tenéis el privilegio de ir a Jesús y de ser limpiados, y de estar delante de la ley sin vergüenza y remordimiento. “Ahora pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, mas conforme al espíritu”. Romanos 8:1. Mientras no debemos pensar en nosotros mismos más de lo debido, la Palabra de Dios no condena un debido respeto propio. Como hijos e hijas de Dios, debiéramos tener una consciente dignidad de carácter, en la cual el orgullo y la importancia de sí mismos no tienen parte (Nuestra elevada vocación, p. 145).

Quede este punto completamente aclarado en cada mente: Si aceptamos a Cristo como Redentor, debemos aceptarlo como Soberano No podemos tener la seguridad y perfecta confianza en Cristo como nuestro Salvador hasta que lo reconozcamos como nuestro Rey y seamos obedientes a sus mandamientos. Así demostramos nuestra lealtad a Dios. Entonces nuestra fe sonará genuina, porque es una fe que obra. Obra por amor. Digan de corazón: “Señor, creo que tu moriste para redimir mi alma. Si tú le has dado tal valor al alma como para ofrecer tu vida por la mía, yo voy a responder. Entrego mi vida y todas sus posibilidades, con toda mi debilidad, a tu cuidado”.

La voluntad debe ser puesta en completa armonía con la voluntad de Dios. Cuando se ha hecho esto, ningún rayo de luz que brille en el corazón y en las cámaras de la mente será resistido. El alma no será obstruida con prejuicios que lleven a llamar tinieblas a la luz, y luz a las tinieblas. La luz del cielo es bien recibida, como una luz que llena todos los recintos del alma (Fe y obras, pp. 13, 14).

58


Jueves 24 de mayo | Lección 8______________________________________________________

ADORAD A AQUEL QUE HIZO EL CIELO Y LA TIERRA

Vuelve a leer Apocalipsis 14:6 y 7. ¿Cuáles son los elementos específicos encontrados en el mensaje del primer ángel y cómo se relacionan entre sí?

Apocalipsis 14:6-7

Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas.

Junto con el evangelio, el llamado a dar testimonio al mundo y el llamado a temer a Dios y a darle gloria está el llamado a adorar a Dios como Creador. Y no es de extrañar. Todos estos otros aspectos de la “verdad presente” (el evangelio eterno, el llamado a dar testimonio, el Juicio), ¿qué significan al margen de Dios como nuestro Creador? Estas verdades, y todas las demás verdades, surgen de la verdad fundacional de que el Señor es el que hizo todas las cosas. Al adorar al Señor como Creador, estamos volviendo a la base de lo que significa ser un ser humano, estar vivo y, a diferencia de cualquier otra criatura terrenal, ser hecho a la imagen de Dios. Al adorar al Señor como Creador, reconocemos nuestra dependencia de él para nuestra existencia y para nuestra futura esperanza. Por eso es tan importante guardar el sábado. Es un reconocimiento especial de que solo Dios es nuestro Creador, y solo lo adoramos a él. Es decir, junto con el evangelio, junto con el Juicio, se le da prominencia al llamado a adorar al Señor como Creador.

Lee Apocalipsis 14:8 al 11. ¿Qué dicen estos versículos que podrían ayudarnos a entender la importancia de adorar al Señor como Creador?

Apocalipsis 14:8-11

Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación. Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano, 10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero; 11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.

A medida que se desarrollen los acontecimientos finales, la presión para adorar a la bestia y su imagen en vez de al Creador vendrá sobre todo el mundo. Si consideramos la temible advertencia sobre el destino de aquellos que adoran a la bestia y a su imagen, podemos entender mejor el énfasis en adorar a Dios como Creador, como el único digno de la adoración humana. En la crisis final, esta verdad se volverá más crucial que nunca.

Tómate el tiempo necesario para meditar en las increíbles maravillas del mundo creado. ¿Qué nos enseñan acerca de Aquel que lo creó todo y por qué solo él es digno de nuestra adoración?

COMENTARIO DE LA LECCIÓN

El comentario de este día está junto con el día martes.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

El deber de adorar a Dios estriba en el hecho de que él es el Creador, y que a él todos los demás seres deben su existencia. Y cada vez que la Biblia presenta el derecho de Jehová a nuestra reverencia y adoración con preferencia a los dioses de los paganos, menciona las pruebas de su poder creador…

Dice el salmista: “Reconoced que Jehová él es Dios: él nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos”. “¡Venid, postrémonos, y encorvémonos; arrodillémonos ante Jehová nuestro Hacedor!” Salmos 100:3; 95:6 (VM). Y los santos que adoran a Dios en el cielo dan como razón de homenaje que le deben: “¡Digno eres tú, Señor nuestro y Dios nuestro de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas!” Apocalipsis 4:11 (Exaltad a Jesús, p. 45).

Y como lo hizo todo, creó también el sábado. Por él fue apartado como un monumento recordativo de la obra de la creación. Nos presenta a Cristo como Santificador tanto como Creador. Declara que el que creó todas las cosas en el cielo y en la tierra, y mediante quien todas las cosas existen, es cabeza de la iglesia, y que por su poder somos reconciliados con Dios. Porque, hablando de Israel, dijo: “Diles también mis sábados, que fuesen por señal entre mí y ellos, para que supiesen que yo soy Jehová que los santifico” (Ezequiel 20:12), es decir, que los hace santos. Entonces el sábado es una señal del poder de Cristo para santificarnos. Es dado a todos aquellos a quienes Cristo hace santos. Como señal de su poder santificador, el sábado es dado a todos los que por medio de Cristo llegan a formar parte del Israel de Dios.

A todos los que reciban el sábado como señal del poder creador y redentor de Cristo, les resultará una delicia. Viendo a Cristo en él, se deleitan en él. El sábado les indica las obras de la creación como evidencia de su gran poder redentor. Al par que recuerda la perdida paz del Edén, habla de la paz restaurada por el Salvador. Y todo lo que encierra la naturaleza, repite su invitación: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, que yo os haré descansar”. Mateo 11:28 (El Deseado de todas las gentes, p. 255).

59


Lección 8 | Viernes 25 de mayo____________________________________________________

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:

Los estudiantes de la Biblia han visto durante mucho tiempo un vínculo entre el llamado de Apocalipsis 14:7, “adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas”, y el cuarto Mandamiento, en Éxodo 20:11, cuando el sábado vuelve a señalar que “en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay”. Por más que el lenguaje esté muy estrechamente relacionado, hay un cambio en el que el texto de Apocalipsis señala al Señor como el que hizo “las fuentes de las aguas”.

El autor John Baldwin comenta: “Si asumimos que hay intencionalidad divina detrás de la frase ‘las fuentes de las aguas’, ¿por qué Jesús hace que el mensajero interrumpa la lista paralela de las cosas que se mencionan en Éxodo 20:11? ¿Por qué el ángel menciona ‘las fuentes de las aguas’ y no alguna otra clase de cosas creadas, como árboles, pájaros, peces o montañas?

“Quizá la referencia a ‘las fuentes de las aguas’, en el contexto de un anuncio divino de la llegada de un momento único de Juicio divino, busca llamar la atención del lector a un período anterior de juicio divino […]. Tal vez Dios quiera que la posible alusión al Diluvio en las palabras ‘las fuentes de las aguas’ subraye la verdad de que él es en verdad un Dios de juicio, al igual que un Dios de fidelidad y gracia eternas (ambas se evidencian en el relato del Diluvio, del Génesis). Si es así, las implicaciones personales y espirituales de las connotaciones del Diluvio que desencadena la frase ‘las fuentes de las aguas’ podrían ser alentar al lector a que se tome en serio la llegada trascendental de un nuevo proceso final de juicio divino e individual que ahora anuncia el primer mensajero de Apocalipsis 14”.–John Baldwin, ed. Creation, Catastrophe, and Calvary: Why a Global Flood Is Vital to the Doctrine of Atonement, p. 27.

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

  1. Isaías 53:6 dice: “Todos nosotros nos descarriamos como ovejas”. La palabra en hebreo para “todos nosotros” es cullanu. En el mismo versículo, Isaías dice que el Señor puso sobre Jesús “el pecado de todos nosotros”. La palabra para “todos nosotros” aquí también es cullanu. ¿De qué manera esto nos muestra que, sin importar cuán grande sea el problema del pecado, la solución es más que suficiente para resolverlo?
  2. ¿Qué otras lecciones podemos aprender de la historia del ladrón en la cruz? Supongamos que el ladrón hubiese recibido el perdón, lo hubiesen bajado de la cruz y hubiese sobrevivido. ¿Cuán diferente habría sido la vida que hubiese llevado? ¿Qué nos dice esa respuesta acerca del poder de Cristo para cambiar nuestra vida?

60


Escrito por: Tony García.

Gramática revisada por:
Pastor Noel Ruiloba y Nory Ester Garcia-Marenko

Este documento es una cortesía de 7day Media Group.
“One World – One Dream”
http://www.sevendayradio.com
http://www.escuelasabaticamaestros.com
Madrid, España 2018

6 pensamientos en “LECCIÓN 8 – ADORAD AL CREADOR – PARA EL 26 DE MAYO DE 2018

  1. Hermano querido gracias por tus lecciones pero esta vez el acceso esta truncado y te dirije a la lección 7 y no a la 8attejorge

  2. Excelente herramienta, especialmente las citas de Ellen White.
    Una recomendación. Sigan haciendo el trabajo que están haciendo con dedicación y no se conviertan en jueces de los demás. El comentario acerca de la hora en que las personas entran a su página estuvo de más.

    • Claro que no. El Hno. Tony estuvo bn en comentarlo, solamente que no nos gusta que nos digan nuestras verdades. Nos está alertando y esa reprension que hizo con firmeza no nos debiera molestar.

  3. Hola:
    Quisiera una opinión sobre un tema en el que me surgen dudas con respecto a las conmemoraciones que se están haciendo en la iglesia los días sábados. Me refiero a » Día del Pastor, Anciano,Niño adventista, etc.», no logro fundamentar dichas celebraciones bíblicamente ya que EL SÁBADO es un día sagrado para adoración de nuestro Creador. Les agradecería fundamento de la Biblia y Espíritu de Profecia.
    Estoy muy agradecida con su trabajo en la escuela sabática, me ha proporcionado mucho conocimiento e interés por escudriñar más profundamente las doctrinas.

  4. Me han sido muy util los temas que he recibido para enrender mejor las lecciones que estamos estudiando Diis mes de sabiduria para seguir adelante

  5. Dios los bendiga, y les cuento la maravillosa experiencia que sentí con la lección del ladrón en la cruz, nunca antes había experimentado tan profundo agradecimiento a Dios por ese pasaje de la Biblia, nunca antes me había sentido como este malhechor pero el Espíritu Santo toco mi corazón y vi la realidad de cada ser humano muriendo al lado de EL GRAN REY DE REYES es lo que todos deberíamos reconocer el tener un SALVADOR con tanta misericordia y amor al morir por mi y por todos en esa Cruz. Gracias por der instrumentos de DIOS Gracias

Responder a Nelson CedeñpCancelar respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Descubre más desde Escuela Sabatica Para Maestros

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo